Los determinantes de salud y la informaci¨®n sanitaria

A pesar de la creencia generalizada de que la salud est¨¢ determinada fundamentalmente por la asistencia sanitaria, existen abundantes referencias hist¨®ricas que demuestran que dicha afirmaci¨®n no es del todo exacta, ya que los factores sociales o econ¨®micos, la biolog¨ªa humana (carga gen¨¦tica), el medio ambiente o la conducta y los estilos de vida parecen desempe?ar un papel tanto o m¨¢s importante que los propios servicios sanitarios.

Las pol¨ªticas de salud deben dar respuesta a los determinantes de salud extrasanitarios, lo que implica la participaci¨®n de otros sectores como la econom¨ªa, la educaci¨®n, las obras p¨²blicas, el medio ambiente en la definici¨®n de objetivos de salud para la poblaci¨®n, sin dejar de mejorar los servicios de asistencia sanitaria en su vertiente preventiva, curativa o rehabilitadora, procurando un adecuado balance entre prevenci¨®n de la enfermedad y promoci¨®n de la salud, as¨ª como su mantenimiento y recuperaci¨®n.

"Hacen falta estad¨ªsticas y sistemas de informaci¨®n centrados m¨¢s en la salud que en los servicios sanitarios"

Sin embargo, los ciudadanos, los medios de comunicaci¨®n, la industria sanitaria, los profesionales sanitarios y los pol¨ªticos parecen no tener demasiado en cuenta estos aspectos, ya que la mayor parte de los recursos se dedican a la asistencia sanitaria y no propiamente a la consecuci¨®n de objetivos de salud. De hecho, la mayor parte de las enfermedades responsables de la incapacidad y la muerte prematura son poco sensibles a incrementos adicionales de recursos estrictamente sanitarios. Tal como se?ala Geoffrey Rose, "los principales determinantes de la enfermedad son, sobre todo, econ¨®micos y sociales".

Una cosa es la diferencia entre la enfermedad reconocida por el sistema sanitario y la salud, y otra la capacidad funcional que experimentan los individuos. La salud pertenece al individuo. Por tanto, podemos distinguir entre la enfermedad desde un punto de vista cl¨ªnico, definici¨®n que orienta sobre la aplicaci¨®n apropiada y disponible del conocimiento m¨¦dico y la tecnolog¨ªa y la percepci¨®n de la enfermedad por parte de los pacientes m¨¢s interesados en c¨®mo influye en sus vidas.

Avanzar en el conocimiento de c¨®mo cada determinante impacta sobre la salud es obligado y s¨®lo puede hacerse explicitando objetivos concretos en los planes de salud traducidos en planes de servicios, cuantificables e incentivables, por parte de los prestadores de dichos servicios; junto con otras acciones de sectores diferentes al sanitario (por ejemplo, la obligatoriedad del carnet de conducir con puntos para reducir los accidentes de tr¨¢fico) se conseguir¨¢ ajustar adecuadamente salud y asistencia sanitaria.

Para ello, el primer paso es dotarnos de unos sistemas de informaci¨®n sanitaria capaces de aportar datos fiables y contrastables que permitan articular la pol¨ªtica sanitaria. De nuevo, si los determinantes de la salud son m¨¢s sociales y econ¨®micos, es necesario que las estad¨ªsticas sanitarias muestren informaci¨®n sobre la influencia de estos aspectos sobre la salud. Es decir, si queremos ampliar nuestro campo de visi¨®n debemos de dotarnos de estad¨ªsticas y sistemas de informaci¨®n sanitaria centrados m¨¢s en la salud que en los servicios sanitarios.

No cabe duda de que la mejora de las fuentes de informaci¨®n es una demanda recurrente de los investigadores de servicios sanitarios. A menudo se piensa que el problema reside en las dificultades de "crear" informaci¨®n relevante, si bien en muchas ocasiones el origen del problema no reside en la inexistencia de la informaci¨®n, sino en su dispersi¨®n, falta de homogeneidad, falta de sistematizaci¨®n, tard¨ªa publicaci¨®n, escasa difusi¨®n y an¨¢lisis incompleto. La gran dispersi¨®n de las fuentes de datos sanitarios en Espa?a es lo que hace que su acceso sea dificultoso y de coste elevado, tanto en t¨¦rminos de oportunidad como en t¨¦rminos econ¨®micos. Por ¨²ltimo, la discrecionalidad en la publicaci¨®n de algunas series de datos importantes, interrumpidas en algunas ocasiones por motivos no justificados, provoca lagunas de informaci¨®n temporales. El sistema de informaci¨®n sanitaria (www.sisan.info) pretende ayudar a mejorar el actual estado de las cosas. La cobertura del mismo, as¨ª como los indicadores utilizados ha supuesto un esfuerzo importante, al tener en un ¨²nico portal la mayor¨ªa de la informaci¨®n sanitaria relevante respecto a Espa?a.

En resumen, en el contexto actual de descentralizaci¨®n administrativa casi federal (comunidades aut¨®nomas) y con autogobiernos soberanos, es razonable pensar que aumente la dispersi¨®n en los modos de generar y utilizar la informaci¨®n. Y sin buena informaci¨®n ser¨¢ dif¨ªcil establecer comparaciones en el desempe?o de los servicios regionales de salud y evaluar los progresos.

Juan E. del Llano Se?ar¨ªs es director de la Fundaci¨®n Gaspar Casal.