Retrato de nueve mujeres
Carmen Alborch presenta en Valencia 'Libres, ciudadanas del mundo', su t¨ªtulo m¨¢s reciente
Las nueve mujeres de Libres, ciudadanas del mundo (Aguliar, 2004), el ¨²ltimo libro de Carmen Alborch, tienen varias cosas en com¨²n: "Est¨¢n comprometidas con la lucha por los derechos humanos, en especial por los derechos de las mujeres"; son transgresoras; tienen talento, y est¨¢n vivas, lo que permite asistir a su "evoluci¨®n vital". Su trayectoria en la pol¨ªtica, la ciencia, y el arte las convierte en modelos de referencia y a la vez desmiente la teor¨ªa de que las mujeres deben masculinizarse para tener ¨¦xito.
La lista la abre la brasile?a Marina Silva. Una mujer que parti¨® de unas condiciones muy adversas, "como son la miseria y la ignorancia en la selva amaz¨®nica", y ha acabado ocupando la cartera de Medio Ambiente en el Gobierno de Luis Inazio Lula da Silva. Un camino lleno de obst¨¢culos que la emparenta con la autora estadounidense Alice Walker, afroamericana, que naci¨® pobre y para la que "el secreto de la alegr¨ªa est¨¢ en la resistencia, en la lucha".
El rastreo de la escritora y pol¨ªtica valenciana, intencionadamente multicultural, contin¨²a en Italia, con Rita Levi-Montalcini. La neurobi¨®loga y premio Nobel de medicina es otro ejemplo de c¨®mo la voluntad se impone a las condiciones objetivas. En su caso, la de ser mujer, jud¨ªa e investigadora en plena dictadura de Mussolini.
Una valent¨ªa que comparte con la abogada iran¨ª Shirin Ebadi, Nobel de la Paz en 2003 y que para Alborch qued¨® clara durante el discurso en el que recogi¨® el premio. "Fue capaz de quitarse el velo, de criticar al r¨¦gimen de su pa¨ªs, y de hacer lo mismo con la pol¨ªtica de Bush y con el, entre comillas, imperialismo de Occidente".
Respecto al debate del velo, Alborch, que tiene su opini¨®n personal bien formada, asegura que es una cuesti¨®n compleja a la que hay que acercarse con respeto. "Todos nos emocionamos al ver c¨®mo las primeras mujeres se quitaban el burka en Afganist¨¢n, y hoy muchas siguen llev¨¢ndolo". La escritora atribuye su mantenimiento al miedo sufrido durante la etapa de los talibanes, pero tambi¨¦n a que los cambios culturales son lentos: "Hay mujeres musulmanas que reivindican que la libertad en este caso consiste en poder elegir si ponerse el velo o no".
El talento y la lucha contra el racismo y la xenofobia de la artista Adrian Piper, nacida en el barrio neoyoquino de Harlem, y que el a?o pasado expuso en el Museo de Arte Contempor¨¢neo de Barcelona (MACBA), hacen de ella otro de los referentes de Carmen Alborch, atraida igualmente por la figura de Vandana Shiva. India, doctora en F¨ªsica, su "aspecto complaciente" esconde a una implacable luchadora contra la globalizaci¨®n econ¨®mica en cuanto ¨¦sta implique "la destrucci¨®n del medio ambiente", y a una de las principales representantes del ecofeminismo.
El libro lo cierran dos pol¨ªticas -la ministra de Defensa chilena Michelle Bachelet Jeria, hija de un represaliado por Pinochet, y la ex primera ministra irlandesa Mary Robinson-, y la economista norteamericana Marilyn Waring.
A Alborch se la nota satisfecha con las decisiones en materia de paridad del Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y asegura que muchas de las j¨®venes que recelan del adjetivo feminista, en la pr¨¢ctica, luchan por la igualdad. Y a?ade: "Tenemos que ser conscientes de que nosotras podemos transmitirles cierta experiencia, pero que ellas tambi¨¦n est¨¢n luchando a su manera"
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