Calista Flockhart asegura que odia las pel¨ªculas de miedo

Calista Flockhart (Freeport, Illinois, Estados Unidos, 1964) est¨¢ rodando en los alrededores de Barcelona Fragile, a las ¨®rdenes del director catal¨¢n Jaume Balaguer¨® (Darkness, Los sin nombre). Qu¨¦ buen t¨ªtulo para una pel¨ªcula protagonizada por esta actriz de apariencia fr¨¢gil: menuda, delgada rozando lo extremo, piel transparente y facciones muy finas. El calificativo, sin embargo, no se refiere a ella, sino que alude a la ficci¨®n en la que anda, inmersa en la piel de Amy, abnegada enfermera de un hospital infantil que amenaza ruina. Las dificultades -y el terror, porque el filme se inscribe en este g¨¦nero- surgen cuando algo misterioso impide el traslado de los ni?os. Algunos sufren extra?as fracturas ¨®seas: sus huesos se quiebran como el cristal.

Tras m¨¢s de un mes de rodaje en Espa?a -falta filmar varios exteriores en la isla de Wight y en las inmediaciones de Londres-, la actriz se present¨® ayer ante los periodistas, junto al director y a dos de sus compa?eras de reparto, Elena Anaya y la ni?a Yasmin Murphy. Vestida informal -recordaba a Ally McBeal cuando se despojaba de su consabido traje de abogada de Harvard y se quedaba en casa llorando sus penas de amores y resonando en sus o¨ªdos canciones de Barry White-, con unos vaqueros ajados, camiseta blanca, que cubr¨ªa con un jersey rosa ya usado, y alpargatas azul marino con tac¨®n de esparto, dej¨® estupefacta a la concurrencia cuando admiti¨® que, como espectadora, detesta el cine de terror. "Odio las pel¨ªculas de miedo", asegur¨®, aunque se apresur¨® a matizar que, desde su punto de vista, su trabajo en Fragile nada tiene que ver con una interpretaci¨®n de g¨¦nero. "El personaje de Amy no pertenece a un filme de terror; s¨®lo es una enfermera que se halla en unas circunstancias muy especiales", dijo sin desvelar cu¨¢les, por no destripar la pel¨ªcula.

Amable, educada, hasta simp¨¢tica -"No hablo espa?ol, lo siento", empez¨® su interven-ci¨®n-, pero escueta en sus respuestas, se la vio inc¨®moda con las preguntas alusivas a su relaci¨®n con Harrison Ford, que recientemente la ha visitado en Barcelona, donde la actriz comparte apartamento con su hijo adoptivo, Liam, de tres a?os.

Luego, en una conversaci¨®n con EL PA?S, se extendi¨® un poco m¨¢s en sus reflexiones. Habl¨® entonces del personaje que la ha hecho popular y que le supuso un Globo de Oro, Ally McBeal, hacia el que tiene, se sincer¨®, un sentimiento ambivalente: "Me abri¨® much¨ªsimas puertas, me dio much¨ªsimas oportunidades, pero ahora ya empieza a ser hora de que la gente deje de relacionarme con el personaje, aunque, por lo que veo, habr¨¢ que esperar a¨²n m¨¢s". Pese a todo, la actriz no reniega de la televisi¨®n, y asegur¨® que volver¨ªa a ella, siempre que el proyecto fuera interesante y no se prolongara demasiado. "Creo que ya no podr¨ªa trabajar en otra serie", puntualiz¨®.

Flockhart, que hasta que no triunf¨® en la televisi¨®n hab¨ªa desarrollado su carrera en el teatro -al que volvi¨® hace poco para representar en Nueva York Los mon¨®logos de la vagina, de Eve Enslers, cuya recaudaci¨®n se destin¨® a una organizaci¨®n que lucha contra la violencia sexista- y no debut¨® en cine hasta 1994 con Quiz show, dirigida por Robert Redford, asegur¨® no saber hacia d¨®nde va a encaminarse su carrera. "Si el papel es bueno, puedo hacer cualquier cosa", se limit¨® a contestar. Tampoco fue nada clara sobre la situaci¨®n pol¨ªtica en EE UU. A la pregunta de qu¨¦ candidato cree ella que va a ganar las elecciones presidenciales, respondi¨®, encogi¨¦ndose de hombros: "No s¨¦". Eso s¨ª, en perfecto castellano.