Pol¨¦mica entre el Gobierno portugu¨¦s y la televisi¨®n
La s¨²bita dimisi¨®n del comentarista pol¨ªtico m¨¢s popular de la televisi¨®n portuguesa, Marcelo Rebelo de Sousa, ha desencadenado una enorme pol¨¦mica por la sospecha de presiones gubernamentales sobre la cadena privada TVI con el objetivo de silenciar a un cr¨ªtico inc¨®modo del primer ministro, el liberal y populista Pedro Santana Lopes.
Las sospechas de censura a Rebelo de Sousa, denunciadas por la oposici¨®n, la prensa y, principalmente, por miembros destacados del Partido Social Dem¨®crata (el liberal PSD, en el Gobierno), tienen como principal argumento unas declaraciones del ministro de Asuntos Parlamentarios, Rui Gomes da Silva. El pasado lunes, Gomes da Silva dijo estar "indignado" con los comentarios que Rebelo de Sousa hac¨ªa todos los domingos por la noche, durante unos 45 minutos, en el telediario de esa cadena privada. El ministro ped¨ªa a la Alta Autoridad para la Comunicaci¨®n Social frenar en estos comentarios "de odio al primer ministro", por considerar inaceptable la inexistencia de una opini¨®n contraria en el referido programa. Dos d¨ªas despu¨¦s, y tras una reuni¨®n con el presidente de TVI, convocada por la direcci¨®n de la empresa, el comentarista anunci¨® el fin de la colaboraci¨®n con la cadena. Seg¨²n algunas fuentes, TVI pudo ser presionada porque el grupo de que forma parte tiene negocios que dependen de decisiones del Gobierno.
Obsesi¨®n con la prensa
Rebelo de Sousa, prestigioso ex l¨ªder del PSD, es el analista estrella de la pol¨ªtica portuguesa. Sus 45 minutos en el informativo de TVI de los domingos situaban a este programa entre los tres con m¨¢s audiencia de la televisi¨®n lusa. Sus comentarios eran, adem¨¢s, reproducidos y analizados por la prensa escrita. Pese a ser militante del mismo partido del Gobierno, Rebelo de Sousa no ocultaba su antipat¨ªa al primer ministro y denunciaba el perfil populista de Santana Lopes y su falta de preparaci¨®n para ser jefe de Gobierno, cargo que asumi¨® el pasado julio.
Ya entonces, Santana Lopes fue apodado de "Berlusconi portugu¨¦s", por su perfil populista, su ambici¨®n y por la extrema mediatizaci¨®n de su imagen y de su vida privada. A lo largo de los ¨²ltimos tres meses, muchos analistas y algunos sectores de la prensa han denunciado la obsesi¨®n del primer ministro con la comunicaci¨®n social.
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