Maragall apoyar¨ªa a la selecci¨®n catalana en una final de hockey contra Espa?a

La selecci¨®n catalana de hockey sobre patines gan¨® ayer la Copa del Mundo B al derrotar a Inglaterra por 6-0. Esta victoria supone su ascenso a la m¨¢xima categor¨ªa y el eventual enfrentamiento con la selecci¨®n espa?ola. El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, presenci¨® la final. Tras la victoria, se fotografi¨® con los integrantes del combinado y asegur¨®: "Ir¨¦ a una final Espa?a-Catalu?a, en la que ganaremos porque somos los mejores". Maragall trat¨® de quitar hierro, a su manera, a la pol¨¦mica: "Esto no es un problema, no es un terremoto...; es deporte. No hay ninguna intencionalidad perversa, sino ¨²nicamente la libre expresi¨®n de un sentimiento deportivo y nacional que es compatible con el respeto mutuo", agreg¨®.

Maragall remat¨® augurando: "Los catalanes ganar¨ªamos esa final con Espa?a en la que todos lo pasar¨ªamos en grande".

En las gradas, con un cuarto de entrada, quienes m¨¢s vociferaban eran los 40 seguidores del combinado de Catalu?a. El partido lo retransmit¨ªa TV-3. El republicano Josep Llu¨ªs Carod estaba sentado en primera l¨ªnea. Falt¨® Artur Mas, el l¨ªder convergente de la oposici¨®n, que presenci¨® un partido del mundial el pasado jueves, tras abandonar precipitadamente la comitiva del viaje a China del presidente de la Generalitat. En un posible error de c¨¢lculo o de simple menosprecio respecto a la capacidad de reacci¨®n del oponente pol¨ªtico, acab¨® dejando que sean sus contrincantes quienes se hagan la foto de la Catalu?a triunfante y sobre patines. Ayer, Mas se felicit¨® por la victoria, pero advirti¨® a Esquerra de que no intente apropi¨¢rsela. El ministro de Industria y primer secretario del Partit dels Socialistes (PSC), Jos¨¦ Montilla, felicit¨® a la selecci¨®n, pero no quiso comentar un hipot¨¦tico enfrentamiento entre Catalu?a y Espa?a. "No le toca al ministro de Industria hablar de un futurible como ¨¦ste".

Carod record¨® que en 1976 asesor¨® la primera retransmisi¨®n de un partido de hockey en catal¨¢n en la SER. Carod, en cuanto acab¨® el encuentro, recibi¨® un mensaje del presidente del Parlament de Catalunya, Ernest Benach, con la frase "qu¨¦ bonito es ser un pa¨ªs normal". Con todo, admiti¨® que la oficialidad de las selecciones "de deportes de m¨¢s intensidad social y medi¨¢tica es mucho m¨¢s dif¨ªcil".

Para presenciar el partido, Maragall sali¨® de madrugada de Tokio, mientras que Carod part¨ªa de la lejana Galicia en un vuelo intercontinental de m¨¢s 12 horas. A la misma hora en que se celebraba el encuentro, Mas asist¨ªa a un consejo nacional de su formaci¨®n en Barcelona. "He venido porque estaba cerca, pero tambi¨¦n estaba obligado; si en alg¨²n deporte tenemos que apretar es en ¨¦ste; y espero que alg¨²n d¨ªa llegaremos a ser campeones absolutos", asegur¨® Maragall.

El portavoz de Deportes del PP en el Congreso, Francisco Antonio Gonz¨¢lez, anunci¨® ayer que su grupo solicitar¨¢ la comparecencia en la comisi¨®n correspondiente de la C¨¢mara baja del secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, para que d¨¦ explicaciones sobre el "esperp¨¦ntico viaje" que Pasqual Maragall ha realizado a Macao (China) para apoyar a la selecci¨®n catalana de hockey. En declaraciones a Europa Press, Gonz¨¢lez inst¨® a Lissavetzky a "aclarar" cu¨¢l es la postura del Gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero sobre la participaci¨®n en competiciones internacionales de las selecciones deportivas auton¨®micas. A su juicio, tambi¨¦n se deber¨ªa conocer cu¨¢nto ha costado al erario p¨²blico la visita de Maragall a Macao. "El Gobierno y el PSOE tienen que clarificar a qu¨¦ juegan", enfatiz¨® Gonz¨¢lez.

El PP reclam¨® "seriedad" al Ejecutivo, denunci¨® que un "miembro tan cualificado del PSOE" como Maragall est¨¦ "animando, alentando y haciendo la ola" al combinado catal¨¢n de hockey, m¨¢xime cuando su integraci¨®n en la Federaci¨®n Internacional de esta disciplina es "provisional", puesto que se ha recurrido contra ella. El diputado del PP admiti¨® que el Gobierno "no puede interferir" en esta decisi¨®n, puesto que las federaciones son organismos que se rigen por el derecho privado, pero insisti¨® en la necesidad de que el Ejecutivo deje clara su postura. "No podemos consentir que Maragall baile con la selecci¨®n catalana y la ministra lo haga con la espa?ola", agreg¨®. Adem¨¢s, calific¨® de "absolutamente impresentable" que Maragall haya viajado a Macao para apoyar a esta selecci¨®n auton¨®mica y denunci¨® que esa visita ha sido sufragada "no s¨®lo por los catalanes, sino tambi¨¦n por los contribuyentes del resto de Espa?a". En este sentido, se pregunt¨® si las partidas presupuestarias incluidas en el acuerdo al que Esquerra Republicana (ERC) ha llegado con el Ejecutivo para apoyar los Presupuestos Generales del Estado para 2005 "van a destinarse a estos viajes esperp¨¦nticos".

La alegr¨ªa por la victoria catalana era general ayer por la tarde en la ex colonia portuguesa de Macao entre los seguidores del equipo. Habr¨¢ que esperar a noviembre para que la asamblea de la Federaci¨®n Internacional de Hockey en Fresno (Nevada, EE UU) decida si ese Espa?a-Catalu?a de la m¨¢xima categor¨ªa, la clase A, a la que ayer ascendi¨® Catalu?a, puede acabar produci¨¦ndose.

La Federaci¨®n Espa?ola de Hockey sobre Patines intentar¨¢ impedir el reconocimiento de la Federaci¨®n Catalana. Las dos partes defender¨¢n en Fresno argumentos contrapuestos. La Federaci¨®n Espa?ola esgrime que las leyes deportivas y la Constituci¨®n otorgan s¨®lo la posibilidad de competir oficialmente a las selecciones de Espa?a y les impiden enfrentarse deportivamente a combinados de sus comunidades aut¨®nomas.

La Federaci¨®n Catalana y la Generalitat sostienen, por el contrario, que el deporte no forma parte de lo p¨²blico, sino de lo privado, y que cada federaci¨®n internacional es la que decide si en sus competiciones participan s¨®lo Estados o bien partes de ellos. Ayer, en Barcelona, tras conocerse la victoria de la selecci¨®n catalana, unos centenares de personas se congregaron en la plaza de Sant Jaume y en la Rambla de Canaletas para festejar la victoria.