Gracias a Saramago

Tras leer el elogio que Jos¨¦ Saramago ha hecho de maestros y profesores de primaria y secundaria (EL PA?S, 20 de octubre) tengo que decir que me sent¨ª feliz y satisfecho porque una persona hab¨ªa tenido la sensibilidad de valorar nuestro trabajo y de ensalzarlo hasta la categor¨ªa de heroico.

Creo que en nuestra sociedad hay muchos h¨¦roes an¨®nimos, que luchan y trabajan por un mundo m¨¢s justo y m¨¢s humano cada d¨ªa, pero es de agradecer que alguien nos considere dentro de ese grupo y que, incluso, lo reconozca p¨²blicamente. Tambi¨¦n es de agradecer la evaluaci¨®n que hace de los problemas actuales, en cuanto que no est¨¢ en nuestras manos cambiar una sociedad que parece ir a la deriva.

Nosotros, maestros y profesores, nunca podremos sustituir a la familia, ni podemos hacer frente a los referentes medi¨¢ticos, cuya influencia es tan decisiva en la educaci¨®n de hoy, ni podemos aportar los medios econ¨®micos ni otras necesidades que la educaci¨®n requiere en la actualidad. Gracias por romper una lanza a nuestro favor. Estoy seguro de que con sus palabras ha hecho subir la autoestima y la ilusi¨®n de muchos profesionales de la ense?anza. Usted no es s¨®lo un gran escritor al que admiro, sino tambi¨¦n un gran maestro de la sensibilidad humana.