La aplicaci¨®n cautelar divide a los jueces

El control de la medida cautelar de alejamiento mediante el brazalete electr¨®nico suscit¨® ayer un contraste de criterios entre la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM), mayoritaria y conservadora, y Jueces para la Democracia (JpD), progresista. Jos¨¦ Manuel Su¨¢rez Robledano, portavoz de la APM, al igua que la propia Consejer¨ªa de Justicia madrile?a, considera que el brazalete electr¨®nico puede imponerlo "sin duda alguna" el juez de instrucci¨®n, como herramienta de la medida cautelar de alejamiento, que permite la Ley de Enjuiciamiento Criminal, incluso sin que consienta el supuesto maltratador.

En cambio, Inmaculada Montalb¨¢n, portavoz de JpD, se?ala que, dado que el control electr¨®nico lo introduce el C¨®digo Penal para cuando exista sentencia condenatoria, "el brazalete electr¨®nico no podr¨¢ imponerse como medida cautelar previa al juicio, a no ser con el consentimiento del acusado de maltrato".

La portavoz de JpD explic¨® que, "al tratarse el brazalete electr¨®nico de una medida restrictiva de garant¨ªas y derechos fundamentales, tiene que aplicarse de forma restrictiva, por lo que lo mejor es que se establezca expresamente por ley, o, en su defecto, atenerse a la futura jurisprudencia".