Zapatero y Schr?der debaten hoy en Le¨®n sus diferencias sobre la financiaci¨®n de la UE

Espa?a y Alemania celebran hoy en Le¨®n su primera cumbre bilateral en varios a?os no marcada por las dificultades psicol¨®gicas y diferencias personales que caracterizaron la ¨²ltima etapa del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y nutrieron la vasta cr¨®nica de sus desavenencias con el canciller federal, Gerhard Schr?der. Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero inaugur¨®, por el contrario, su mandato con una profesi¨®n de fe en Berl¨ªn y Par¨ªs como motores de la construcci¨®n europea. Schr?der le correspondi¨® con deferencias que se han prolongado al hilo de los esfuerzos del espa?ol por desbloquear los problemas europeos heredados. Pero la agenda com¨²n no est¨¢ libre de temas susceptibles de enfrentarlos.

Espa?a se juega en pocos meses, con el nuevo modelo de financiaci¨®n comunitaria, los aproximadamente 6.000 millones de euros que viene recibiendo anualmente de la pol¨ªtica europea de solidaridad, y Alemania, como primer contribuyente a las finanzas de los 25, tiene la llave que graduar¨¢ ese proceso. Una ca¨ªda brusca, y acelerada por la reducci¨®n de la renta media europea que ha inducido la entrada de los nuevos socios del Este, tendr¨ªa el efecto de una hecatombe sobre la pol¨ªtica regional espa?ola, que ha avanzado a ritmos de v¨¦rtigo con los fondos europeos.

Schr?der tiene, sin embargo, escaso margen de maniobra y muy poca disposici¨®n pol¨ªtica para prolongar una situaci¨®n que agrava los problemas ya importantes de sus presupuestos. Zapatero plantea, sin embargo, condiciones m¨ªnimas, y en concreto que Espa?a no sea el ¨²nico de los 15 socios veteranos privado de fondos por la necesidad de atender la solidaridad, m¨¢s urgente, con los ¨²ltimos incorporados al plan.

"Espa?a no tiene por qu¨¦ pagar todo el coste de la ampliaci¨®n" de la UE, es el argumento reiterado en varias ocasiones por el presidente del Gobierno, que suele mostrarse confiado en que sus buenas relaciones con Par¨ªs y Berl¨ªn facilitar¨¢n el acuerdo. Pero Zapatero tiene prisa, porque entiende que si el programa financiero de la Uni¨®n para el septenio 2006-2013 no se cierra antes de julio las dificultades pueden volverse insuperables.

Los t¨¦cnicos espa?oles estiman que el acuerdo est¨¢ maduro para que se concrete en cualquier momento, si existe el impulso pol¨ªtico. En cualquier caso, es seguro que, en Le¨®n, la ciudad natal de Zapatero, que ser¨¢ la sede de su primera cumbre con Schr?-der, no se dir¨¢ nada al respecto, aunque sin duda se hablar¨¢ del asunto.

Sobre la mesa habr¨¢ suficientes temas -sobre todo internacionales, ya que las relaciones bilaterales son poco problem¨¢ticas y estables- como para llegar a lenguajes comunes que transmitir para concluir el encuentro. Destaca el futuro de la relaci¨®n trasatl¨¢ntica tras la victoria de George W. Bush, un tema sobre el que Zapatero y Schr?der han estado en contacto desde el primer momento, especialmente cuando desayunaron el pasado viernes en Bruselas con el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac.

El lema com¨²n en este caso es la disposici¨®n abierta a cooperar y a encontrar soluciones de consenso para Irak que permitan reconducir la crisis y superar los enfrentamientos pol¨ªticos del pasado.

Oriente Pr¨®ximo, pendiente en estos momentos de la salud de Yasir Arafat, es otro punto importante de inter¨¦s compartido, donde la parte espa?ola tiene contactos especialmente intensos. El futuro de Afganist¨¢n, donde Espa?a y Alemania cooperan militarmente, y el ingreso de Turqu¨ªa en la UE, que Espa?a favorece y Schr?der apoya, aunque los alemanes lo temen, son otros temas de la agenda de este primer encuentro hispano-alem¨¢n al que asiste Zapatero.