Acerca de lo 'real-maravilloso'

No parece aventurado admitir que esa premisa literaria de lo real-maravilloso acu?ada por Alejo Carpentier puede localizarse originariamente en la revitalizaci¨®n de la lengua verificada por los primitivos cronistas de Indias. El propio Carpentier se preguntaba en su libro Tientos y diferencias: "?Qu¨¦ es la historia de Am¨¦rica toda sino una cr¨®nica de lo real maravilloso?". Por ah¨ª habr¨ªa que rastrear la significaci¨®n de ese concreto sistema po¨¦tico que configura el corpus narrativo de Carpentier. Se trata, en todo caso, de una referencia ineludible para abordar la obra del gran novelista cubano. Desde Ecu¨¦-Yamba-O a El arpa y la sombra -es decir, desde su primera a su ¨²ltima novela-, Carpentier no hizo otra cosa que afanarse por trasladar a la literatura una versi¨®n prodigiosa de ciertas parcelas de la historia americana.

Ya se trate -por ejemplo- de las pesquisas en la corte antillana de Henri Cristophe o en el ¨¢mbito dom¨¦stico de un dictador de hoy mismo; de la terrible sucursal revolucionaria de Victor Hugues en la Guadalupe o del mitol¨®gico fugitivo por la selva amaz¨®nica, Carpentier ha usado siempre de un mismo aparejo art¨ªstico para trasponer a la literatura sus bagajes culturales. Ha reactivado sinf¨®nicamente toda una serie de acordes l¨¦xicos y sint¨¢cticos oriundos del barroquismo y los ha recreado dentro de una nueva din¨¢mica estil¨ªstica. Su poderosa po¨¦tica narrativa pasa as¨ª a convertirse en el insustituible hilo conductor de toda una fascinante sensibilidad interpretativa. Cuando Carpentier describe el laberinto lujurioso de un puerto antillano o el v¨¦rtigo primordial de la jungla, logra sistem¨¢ticamente lo m¨¢s resolutivo: rectificar la historia, hacer que revierta a sus m¨¢s secretas interioridades para poder ser enfocada bajo un nuevo prisma est¨¦tico. Esos eslabones de la vida hist¨®rica americana, ensamblados con una impecable pericia narrativa, no reproducen s¨®lo una determinada realidad, son otra realidad, revalorizan el mundo descrito, lo elevan a un rango po¨¦tico gracias al mismo proceso de elaboraci¨®n de la lengua literaria. Suponen, por as¨ª decirlo, un planteamiento mucho m¨¢s operativo que el propio suministro de datos de la historia.

Algunos estudiosos de la obra de Carpentier se han referido con mayor o menor atenci¨®n a los v¨ªnculos te¨®ricos entre lo real maravilloso y el surrealismo. Si se admite que el surrealismo no s¨®lo es un sistema expresivo absolutamente paradigm¨¢tico, sino un modo de ser, un ¨¦tat d'esprit, resulta evidente que Carpentier comparte esa actitud de modo categ¨®rico. Ser¨ªa muy ilustrativo en este sentido sugerir que cuando el autor de Concierto barroco acu?a el t¨¦rmino real-maravilloso est¨¢ asoci¨¢ndolo en cierta medida a la primaria noci¨®n surrealista de lo merveilleux (de lo extraordinario), esa imantaci¨®n sensible que -como en el caso del barroquismo- posibilita una previa conducta super-realista frente a la com¨²n manera de interpretar la historia. El registro en una realidad de ¨ªndole maravillosa s¨®lo podr¨¢ abordarse eficientemente a trav¨¦s de un inventario ling¨¹¨ªstico, de un c¨®digo po¨¦tico, que equivalga al inventario de maravillas que persevera en el fondo de esa realidad. Una estrategia, en definitiva, que fue la que practic¨® regularmente Carpentier.