Los zaplanistas se pliegan a la disciplina del PP y apoyan a D¨ªaz Alperi en el palacio de congresos

La expectaci¨®n que hab¨ªa provocado la votaci¨®n en el Ayuntamiento de Alicante de una moci¨®n del alcalde, el popular Luis D¨ªaz Alperi, sobre su propuesta de urbanizar el barrio de La Sangueta y construir all¨ª un palacio de congresos, qued¨® ayer en nada. La moci¨®n, que no comparte la mitad del gobierno local, fue aprobada sin una sola deserci¨®n en las filas del PP, a pesar de que el sector zaplanista la tach¨® de "pelotazo urban¨ªstico". Pese a no materializarse, la crisis municipal, enmarcada en parte en la lucha por las cuotas de poder en el PP valenciano, subi¨® ayer de intensidad.

Los concejales zaplanistas mantuvieron en vilo al resto de la Corporaci¨®n y al numeroso p¨²blico asistente a la sesi¨®n plenaria de ayer hasta el momento de la votaci¨®n. Ni siquiera el alcalde -muy serio durante toda la reuni¨®n- conoc¨ªa si los ediles encabezados por el presidente de la Diputaci¨®n, Jos¨¦ Joaqu¨ªn Ripoll, iban a votar en contra de su iniciativa y a oficializar, por tanto, la ruptura del gobierno local. Porque ayer, m¨¢s que la confirmaci¨®n de un proyecto urban¨ªstico importante para Alicante, estaba en juego algo de mayor relevancia: la gobernabilidad de la ciudad y la posible materializaci¨®n de la ruptura del PP, en plena pelea precongresual por el reparto del poder en ese partido.

A las nueve de la ma?ana, una hora antes de pleno municipal, Ripoll hab¨ªa convocado a los concejales zaplanistas -ocho de los 14 que componen el gobierno local- en la Diputaci¨®n. Les expuso que no era partidario de romper la disciplina de voto, pero s¨ª de criticar abiertamente el proyecto del alcalde e, incluso, de declarar en p¨²blico que la iniciativa de D¨ªaz Alperi huele a "pelotazo urban¨ªstico". En esa reuni¨®n, seg¨²n varios de los asistentes, no hubo fisuras. Pero s¨ª "muchas ganas de votar en contra", coment¨® uno de los ediles. Los mismos protagonistas -salvo dos ausencias, Francisco Zaragoza y Miguel Valor- se hab¨ªan reunido el viernes y ya ese d¨ªa se habl¨® de no romper el grupo municipal.

Despu¨¦s de que Alperi pusiera a los zaplanistas en el brete de votar un proyecto que no comparten y ¨¦stos decidieran apoyarle, la estrategia de Ripoll pasa ahora por rentabilizar esa supuesta responsabilidad en aras de mantener la unidad del partido en las duras negociaciones con el sector campista por las cuotas de poder en el PP valenciano. Esa estrategia se resume en una frase pronunciada ayer por un zaplanista: "Hemos podido romper el grupo y no lo hemos hecho".

As¨ª las cosas y pese a no consumarse la ruptura, la crisis ha alcanzado un nivel que, seg¨²n concejales de ambas facciones, puede estallar en cualquier momento.Dos minutos despu¨¦s de votar a favor del desarrollo urban¨ªstico de La Sangueta, el presidente de la Diputaci¨®n de Alicante, Joaqu¨ªn Ripoll, convoc¨® a los periodistas para explicar su voto y el de siete ediles m¨¢s. Primero dijo que se trata de un proyecto del alcalde de Alicante y "no del PP", y luego dej¨® claro que "una mayor¨ªa" de ediles populares, que "se podr¨ªa cifrar en ocho" (Pedro Romero, Juan Zaragoza, Rosana Cremades, Mar¨ªa Jos¨¦ Rico, Miguel Valor, Francisco Zaragoza, Andr¨¦s Llorens y ¨¦l mismo), ha apoyado la moci¨®n por "no plantear ning¨²n tipo de ruptura".

Ripoll aleg¨® tres puntos de desencuentro entre esa mayor¨ªa del grupo y el alcalde sobre el proyecto de La Sangueta. Primero, dijo, la construcci¨®n del palacio de congresos, con la rehabilitaci¨®n del barrio de La Sangueta, "nos va a llevar un retraso evidente", cuando "creemos que hay ubicaciones suficientes para que ese retraso no se tuviera que producir". En segundo lugar aludi¨® a un posible pelotazo urban¨ªstico. "No ser¨¦ yo el que lo diga, pero muchas personas o algunas personas o alg¨²n n¨²mero importante de personas ya hablan de pelotazos urban¨ªsticos y de qui¨¦nes son las personas que los van a llevar adelante". Seg¨²n Ripoll, hay que tener en cuenta las plusval¨ªas para los constructores que lleven adelante el proyecto. "No estamos hablando de plusval¨ªas para realojar a los vecinos, de plusval¨ªas para que el puerto pueda desprenderse de esos terrenos, plusval¨ªas para generar esos grandes n¨²cleos de comunicaci¨®n, de plusval¨ªas para construir el palacio o dejar libre la parcela del palacio, si no tambi¨¦n para los que construyan las viviendas y los hoteles...". En tercer lugar, el presidente de la Diputaci¨®n y concejal alicantino insisti¨® en que la moci¨®n del alcalde sobre el proyecto del palacio de congresos "no es el proyecto d

el PP", porque no se ofert¨® as¨ª a los ciudadanos, y ni siquiera, agreg¨®, es el proyecto del Grupo Popular. "No se ha consultado al equipo de gobierno sobre la ubicaci¨®n y "ni siquiera se le ha consultado para decidir sobre la moci¨®n, algo que nos parece extra?o en los cauces normales de cualquier ayuntamiento, entre otras cosas porque hoy ha parecido que el portavoz del Grupo Popular era el se?or Blas Bernal -portavoz del Grupo Socialista-, y no Pedro Romero.

Pese a esas razones para votar en contra del proyecto, Joaqu¨ªn Ripoll argument¨®: "Como se est¨¢n haciendo lecturas ajenas al contenido de la moci¨®n y ajenas al funcionamiento del grupo municipal, una mayor¨ªa de ese grupo hemos considerado que no vamos a plantear ning¨²n tipo de ruptura en una moci¨®n que, entre otras cosas, no plantea nada concreto".

El portavoz de los socialistas argument¨® su respaldo al proyecto porque ¨¦ste incluye "todos" los requisitos planteados por su grupo. La ¨²nica edil de Esquerra Unida, Susana S¨¢nchez, vot¨® en contra porque el emplazamiento "no se ha debatido suficientemente".

Antes del pol¨¦mico acuerdo, el pleno aprob¨® por unanimidad el plan del soterramiento del ferrocarril en Alicante. Pese al acuerdo, tambi¨¦n en este punto afloraron las diferencias en el gobierno local. El alcalde, en tres ocasiones, neg¨® la petici¨®n del concejal de Comercio, Juan Zaragoza, para intervenir en el pleno. ?ste ha criticado abiertamente que el plan para enterrar las v¨ªas incluya un centro comercial en la nueva estaci¨®n intermodal.

Blas Bernal, por su parte, destac¨® su acuerdo con el desarrollo viario y con el proyecto en general, aunque demand¨® que al menos un 35% de las viviendas que se construyan en los terrenos liberados por Renfe sean VPO.