CiU divide el sentido de su voto en el pen¨²ltimo tr¨¢mite para que los homosexuales puedan adoptar

S¨ª, no y todo lo contrario. Los tres diputados de Converg¨¨ncia Democr¨¤tica en la comisi¨®n de justicia del Parlament no se pusieron de acuerdo ayer al votar la reforma del C¨®digo de Familia que permitir¨¢ la adopci¨®n a las parejas homosexuales. De los tres diputados, uno vot¨® a favor, otro en contra y el tercero se abstuvo. Sus socios de Uni¨® optaron por el no en bloque, sum¨¢ndose as¨ª a la postura del Partido Popular. S¨®lo los tres grupos presentes en el Gobierno optaron por un s¨ª sin fisuras en el ¨²ltimo tr¨¢mite antes de la votaci¨®n final en el pleno.

Las profundas divisiones existentes en el seno de Converg¨¨ncia i Uni¨® en todo lo referente al reconocimiento de nuevos derechos para gays y lesbianas dieron pie ayer a un nuevo y vistoso episodio en el Parlament. La comisi¨®n de justicia somet¨ªa a votaci¨®n el dictamen sobre el proyecto de ley que eliminar¨¢ las trabas para que las parejas formadas por dos personas del mismo sexo puedan ser candidatas a adoptar un ni?o con las mismas condiciones que las parejas heterosexuales.

Ninguno de los representantes de los grupos parlamentarios argument¨® el sentido de su voto, por lo que el tr¨¢mite apenas dur¨® cinco minutos. Adem¨¢s se realiz¨® a puerta cerrada tal y como manda el reglamento que rige las votaciones de dict¨¢menes de ponencias.

Los diputados del PSC, Esquerra Republicana e Iniciatiava per Catalunya Verds votaron afirmativamente, as¨ª como Esteve Orriols, de Converg¨¨ncia Democr¨¤tica. Sin embargo, el voto de la federaci¨®n nacionalista qued¨® dividido como nunca, puesto que la diputada y ex consejera de Gobernaci¨®n Maria Eug¨¨nia Cuenca se abstuvo y el tambi¨¦n miembro del grupo de CDC Llu¨ªs Recoder opt¨® por el no.

El Partido Popular no s¨®lo vot¨® negativamente, sino que adem¨¢s present¨® una enmienda a la totalidad al texto propuesto. Los conservadores se quedaron solos en su defensa, puesto que los miembros del tripartito lo rechazaron y CiU se abstuvo.

A la salida de la votaci¨®n, la diputada de Uni¨® Democr¨¤tica N¨²ria de Gispert argument¨® el no de su formaci¨®n recordando que el reciente congreso de los democristianos rechaz¨® el matrimonio entre personas del mismo sexo y la posibilidad de adopci¨®n.

En las filas de Converg¨¨ncia la disparidad se justific¨® por la libertad de voto que el l¨ªder de la formaci¨®n, Artur Mas, hab¨ªa dado a sus diputados. Fuentes del partido aseguraron que el resultado de la votaci¨®n, lejos de demostrar divisiones internas, "manifiesta la profunda pluralidad del partido".

No piensan lo mismo en el Grupo Socialista-Ciutadans pel Canvi. Su portavoz en materia de libertad sexual, Juan Jaime, afirm¨® a prop¨®sito de la disparidad del voto en el seno de CiU: "Pone de manifiesto que este partido no es la vanguardia de la defensa de la equiparaci¨®n de derechos de los homosexuales con el resto de la poblaci¨®n como quisieron hacernos creer durante 23 a?os". En opini¨®n de Jaime, la votaci¨®n de ayer sirvi¨® para "desenmascarar a CiU y situarla claramente donde siempre ha estado, a la derecha del arco parlamentario".

El de ayer era un paso m¨¢s en la tramitaci¨®n de los cambios legislativos que deben culminar con la desaparici¨®n de las barreras para la adopci¨®n por parte de homosexuales. Las reformas del C¨®digo de Familia votadas ayer hac¨ªan referencia mayoritariamente a los derechos del ni?o adoptado. As¨ª, si finalmente sale adelante la reforma, los ni?os ya adoptados por una persona cuya pareja sea del mismo sexo tendr¨¢n derecho a estar bajo la tutela de ambos, as¨ª como a entrar en la l¨ªnea sucesoria de los dos. A las parejas homosexuales que quieran adoptar un ni?o tambi¨¦n se les facilitan las cosas, puesto que para conseguir el certificado de idoneidad ya no deber¨¢ indicarse el sexo de los dos miembros de la pareja.

Los defensores de la reforma aseguran que ello permitir¨¢ garantizar los derechos del ni?o, puesto que en la actualidad muchos gays y lesbianas ya adoptan ni?os, aunque de forma individual. De esta forma se podr¨¢ ver la realidad, afirman.

Los detractores, por su parte, consideran que la ley no har¨¢ m¨¢s que evidenciar nuevos problemas. Daniel Sirera, del Grupo Popular, explic¨® ayer que su partido rechaza la modificaci¨®n del C¨®digo de Familia por dos motivos b¨¢sicos: "En primer lugar, porque no se ha debatido suficientemente con la sociedad civil, pero tambi¨¦n lo rechazamos porque nos arriesgamos a que los pa¨ªses que permiten a los espa?oles ir all¨ª a adoptar cerrar¨¢n sus puertas al saber que entre los posibles padres adoptantes puede haber parejas homosexuales".

Superado el tr¨¢mite de ayer, el debate y la votaci¨®n final para la reforma del C¨®digo de Familia en el pleno de Parlament se realizar¨¢ presumiblemente el pr¨®ximo 9 de diciembre.