Los socialistas creen que el PP busca excusas para seguir "el acoso"

Los peores pron¨®sticos del PSOE se han cumplido respecto a los efectos que pod¨ªa producir en el PP la afirmaci¨®n del ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, de que el ex presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar apoy¨® el golpe de Estado en Venezuela de 2002. En efecto, los populares amenazan al Ejecutivo con romper el di¨¢logo en todos los temas salvo en la lucha antiterrorista. "Es una mera excusa para seguir con el acoso que llevan practicando contra el Gobierno desde que perdieron las elecciones; acoso s¨ª, pero no derribo porque eso no lo van a conseguir". ?sta fue la respuesta inmediata del responsable de Pol¨ªtica Institucional del PSOE, Alfonso Perales. Los socialistas no ocultaron su gran malestar por "el error grave" del ministro al traer al primer plano a Aznar y a un episodio del pasado. Pero, sobre todo, lamentaban que el PP tuviera nuevos argumentos para continuar atacando al PSOE en pol¨ªtica exterior, cuando ambos tendr¨ªan que ir juntos en la campa?a institucional a favor del s¨ª en el refer¨¦ndum sobre la Constituci¨®n Europea.

Pero la reacci¨®n furibunda del PP provoc¨® ayer una reacci¨®n "de familia", seg¨²n un miembro de la ejecutiva socialista. La responsable de Pol¨ªtica Internacional del PSOE, Trinidad Jim¨¦nez, hizo ayer una cerrada defensa del ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos. "Tiene todo el apoyo del PSOE y mi simpat¨ªa personal", dijo Jim¨¦nez.

Hasta el final

Enseguida lleg¨® el aviso un tanto enigm¨¢tico. Jim¨¦nez aseguro que si el PP quiere "se llegar¨¢ hasta el final", pero no quiso ser m¨¢s precisa y remiti¨® a la comparecencia del ministro en el Congreso el pr¨®ximo mi¨¦rcoles. "El ministro explicar¨¢ lo que dijo y por qu¨¦ lo dijo".

Ahora bien, la intervenci¨®n del ministro no est¨¢ decidida todav¨ªa y ser¨¢ un asunto que se decidir¨¢ a principios de la pr¨®xima semana con la opini¨®n determinante del presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.

Los interlocutores consultados informan de que s¨®lo hay dos opciones: o reconocer que hubo un exceso verbal y que no se quer¨ªa llegar a acusar al ex presidente directamente de apoyar el golpe o, mantener la tesis y tratar de demostrarla.

A la pregunta de si hay pruebas concluyentes, en ¨¢mbitos socialistas se guarda un misterioso silencio. Estos interlocutores reconocen que si se va "hasta el final" la guerra con el PP ser¨¢ abierta y total. Los socialistas evaluar¨¢n si les merece la pena que la gresca contin¨²e o prefieren que la tempestad amaine. Lo cierto es que ayer, tras la advertencia del PP, "la tentaci¨®n" era la de sugerir al ministro que no se retracte.