El ex canciller Casta?eda asegura que EE UU y Espa?a trabajaron para consolidar el golpe en Caracas

El activismo del embajador del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar en Venezuela durante el golpe de abril de 2002, Manuel Viturro, fue intenso para "consolidar" el golpe contra Hugo Ch¨¢vez y la presidencia de facto del empresario Pedro Carmona. La imputaci¨®n fue efectuada por Jorge Casta?eda, entonces ministro de Relaciones Exteriores de M¨¦xico. "Recuerdo que el embajador de Espa?a en Caracas estuvo muy activo en tratar de consolidar lo que estaba sucediendo [el golpe y a las nuevas autoridades]", declar¨® Casta?eda a Radio F¨®rmula. "Estados Unidos y Espa?a metieron la pata".

M¨¦xico, m¨¢s determinado, y otros pa¨ªses latinoamericanos rechazaron estampar su firma en el comunicado conjunto de Washington y Madrid, publicado el 12 de abril, un d¨ªa despu¨¦s del golpe, que instaba a la pronta reanudaci¨®n de la normalidad democr¨¢tica, aunque sin reclamar la reinstalaci¨®n de Ch¨¢vez -detenido en la isla La Orchila hasta su vuelta al poder el d¨ªa 14- en la presidencia. "Hubo el intento de buscar una declaraci¨®n que, de alguna manera, apoyara, sancionara, avalara el golpe y reconociera al nuevo gobierno", seg¨²n Casta?eda. Los Ejecutivos de George W. Bush y de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar trataron de implicar a Am¨¦rica Latina en su conjunto, pero M¨¦xico tambi¨¦n se opuso, siempre seg¨²n Casta?eda.

Las gestiones de EE UU y de Espa?a en ese sentido fueron canalizadas por varios gobiernos centroamericanos en el seno del Grupo de R¨ªo, reunido en San Jos¨¦ de Costa Rica por aquellas fechas. El intento fue doble: un comunicado hispano-estadounidense-latinoamericano y una declaraci¨®n regional. "Lo quisieron hacer, sin duda, pero nosotros no quisimos prestarnos a eso", agreg¨® Casta?eda en conversaci¨®n telef¨®nica con el periodista Joaqu¨ªn D¨®riga. "Nuestro embajador en Venezuela, Enrique Loaeza, ofreci¨® sus servicios para lo que pudiera ser ¨²til, pero no quisimos actuar en concierto ni con Espa?a, ni con Estados Unidos, ni con los centroamericanos".

El presidente de El Salvador, Francisco Flores (1999-2004), dirigente de la derechista Arena y amigo personal de Aznar, m¨¢s activo, otros gobiernos conservadores de Am¨¦rica Latina y en cierta medida Colombia, buscaron que el Grupo de R¨ªo "se manifestara a favor del golpe o en todo caso reconociera al nuevo gobierno de Pedro Carmona", a?adi¨® Casta?eda.

El presidente mexicano, Vicente Fox, conservador, acord¨® con su canciller rechazar ese enfoque. "Eso tambi¨¦n lo pudimos parar e incluso voltear sacando una declaraci¨®n de apoyo a la institucionalidad venezolana, que creo que tuvo algo con el hecho de que todo esto [el golpe] se viniera abajo. EE UU y Espa?a, que no contaban con el apoyo iberoamericano, recularon".

El 13 de abril, disueltos ya todos los poderes del Estado, Viturro y Charles Shapiro, embajador de EE UU, acudieron a reunirse con Cardona. Ning¨²n otro embajador lo hizo porque "quedaba est¨¦ticamente feo. Era como reconocer a un presidente golpista", dijeron fuentes diplom¨¢ticas latinoamericanas.