A vueltas con los titulares

No es la primera vez que esta Defensora se ocupa en esta columna de los titulares del peri¨®dico. Despu¨¦s de las quejas por errores, fallos gramaticales y mal uso del lenguaje, protagonistas ex aequo del primer puesto, los titulares se alzan con un meritorio segundo lugar en la lista de las protestas favoritas de los lectores.

Tampoco es la primera vez que trata el conflicto israelo-palestino, motivo de notables y continuados enfados -por ambas partes-, precisamente por c¨®mo se utiliza el lenguaje cuando hablamos de los protagonistas, palestinos o israel¨ªes, de esta ya larga contienda de Oriente Pr¨®ximo. En esta ocasi¨®n se dan los tres casos juntos: titulares, lenguaje y conflicto israelo-palestino, una especie de quintaesencia de nuestras faltas.

Tres lectoras de Madrid expresan su malestar por el titular La muerte de Arafat abre nuevas v¨ªas para la paz en Oriente Pr¨®ximo, publicado en la primera p¨¢gina del peri¨®dico el 12 de noviembre de 2004. "No tengo intenci¨®n de loar al personaje, incluso entiendo que no sea del agrado del peri¨®dico, pero decir que su muerte es una v¨ªa de soluci¨®n del problema de Oriente Pr¨®ximo me parece excesivo. ?Abrir¨ªan con un titular semejante caso de que falleciera Ariel Sharon?", pregunta Mar¨ªa Teresa P¨¦rez. "Nos parece una falta de respeto que lo m¨¢s destacable de la muerte de Arafat, en su titular, no sea su contribuci¨®n hist¨®rica a la lucha del asediado pueblo palestino. Y que adem¨¢s, para colmo, se diga que su muerte 'abre' nuevas v¨ªas para la paz, induciendo a pensar que el principal impedimento de la negociaci¨®n era simplemente Arafat, cuando la verdad es que esto era sencillamente una excusa. Si se hubiera utilizado el verbo 'obliga', como s¨ª se ha utilizado en la entradilla, no se habr¨ªa sugerido que Arafat era el responsable de la falta de acuerdos", afirman Ana Rosa y Ada Heredero.

El director adjunto de EL PA?S, Jos¨¦ Mar¨ªa Izquierdo, explica: "Lo primero, y como siempre, lamentar que un titular haya inducido a error a algunos de nuestros lectores. Sin embargo, creemos que el titular de referencia es puramente descriptivo. S¨®lo una interpretaci¨®n maliciosa, a mi juicio, hace decir al titular lo que no dice. La muerte de Arafat abre nuevas v¨ªas para la paz en Oriente Pr¨®ximo expresa unos hechos reales y dif¨ªcilmente rebatibles. Basta leer las informaciones y art¨ªculos de ese d¨ªa -y los siguientes- para corroborar lo que se indica en dicho titular. Los propios dirigentes palestinos as¨ª lo han visto convocando, por ejemplo, unas elecciones que siempre neg¨® Arafat. ?Acaso no es ¨¦sta una nueva v¨ªa que se abre para una futura negociaci¨®n? Respecto a la responsabilidad de los dirigentes palestinos e israel¨ªes en el conflicto de Oriente Pr¨®ximo, EL PA?S ha publicado decenas de editoriales se?alando con claridad los acuerdos y desacuerdos con la pol¨ªtica de Yasir Arafat y de Ariel Sharon. Y si se ha sido cr¨ªtico en algunas ocasiones con la labor del rais, seguro que nuestros lectores est¨¢n convencidos de que la pol¨ªtica de Sharon ha recibido muchos m¨¢s varapalos que congratulaciones en nuestros editoriales. Por ¨²ltimo, propongo un titular en un caso distinto. No ya con la muerte de Sharon, como sugiere una lectora, simplemente con la hip¨®tesis de que el dirigente israel¨ª pierda las pr¨®ximas elecciones ante los laboristas: La derrota de Sharon abre nuevas v¨ªas a la paz en Oriente Pr¨®ximo. ?Tambi¨¦n le parece excesivo?".

Bush y Moratinos

Otro titular, atribuido al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, publicado en la primera p¨¢gina del peri¨®dico el 7 de noviembre, tambi¨¦n relacionado con dicho conflicto, ha motivado la queja de Augusto Klappenbach: "Leo en portada el siguiente t¨ªtulo entrecomillado: 'Vamos a ayudar a Bush en Oriente Pr¨®ximo'. Un poco desconcertado acudo a la entrevista y me encuentro con las siguientes frases del ministro: 'No hay que olvidar que Bush, en su discurso de junio de 2002, dio lo que se denomin¨® su visi¨®n del problema y la bas¨® en dos Estados, el de Palestina y el de Israel, viviendo en paz y seguridad. Es su visi¨®n y yo me imagino que, en su segundo mandato, lo que querr¨¢ es que su visi¨®n se convierta en realidad. Y nosotros le vamos a ayudar, y le vamos a facilitar que su visi¨®n no sea simplemente una visi¨®n, sino que sea una realidad pol¨ªtica (...), etc¨¦tera. Es decir: no vamos a ayudar a Bush, sino a que cumpla lo que dijo en su discurso de 2002. La diferencia es evidente. Pero aunque no lo fuera, la cita entrecomillada no es textual y ello deber¨ªa bastar para omitir las comillas. ?Es tan complicado respetar una norma tan sencilla de su propio Libro de estilo?".

El subdirector del peri¨®dico, Antonio Ca?o, responsable en esas fechas de la edici¨®n del domingo, responde: "En mi opini¨®n, el titular recog¨ªa la esencia de lo que dec¨ªa Moratinos".

El Libro de estilo de EL PA?S mantiene, con criterio general, que las citas o reproducciones entrecomilladas son "citas literales de un texto" y que hay que "distinguir entre lo que es una cita textual y lo que es parafrasear un dicho". Y al referirse a los titulares se?ala que, adem¨¢s de responder fielmente a la informaci¨®n, "jam¨¢s establecen conclusiones que no figuren en el texto". No parece que en esta ocasi¨®n el peri¨®dico se haya atenido a estas premisas. Ya sabemos que encajar una cita literal en un titular con espacio limitado, generalmente muy limitado, es una labor complicada y, en ocasiones, los resultados son poco finos. As¨ª que una de dos, o prescindimos de las comillas o prescindimos de las citas literales cuando son imposibles de encajar en tan exiguos espacios. Porque, interpretaciones aparte, el lector tiene raz¨®n y el entrevistado no dijo textualmente lo que dec¨ªa el titular.

Por ¨²ltimo, Juan Pablo Crespo, de Madrid, lamenta el uso reiterado del verbo "abatir" en las informaciones referidas a "muertos o asesinados palestinos, v¨ªctimas del Ej¨¦rcito israel¨ª". Y cita como ejemplo la cr¨®nica de Ferran Sales titulada Soldados israel¨ªes ultrajan cad¨¢veres de palestinos -20 de noviembre, p¨¢gina 6 de Internacional-, que en su primer p¨¢rrafo dec¨ªa: "... sistem¨¢tica vejaci¨®n por parte de algunos soldados de cad¨¢veres de palestinos abatidos en los territorios ocupados...". "Sinceramente, creo que deber¨ªan revisar el uso de esta palabra en el contexto que se emplea. Parece humillante, deleznable y una falta de respeto hacia personas que son v¨ªctimas mortales de los conflictos, que se utilice un t¨¦rmino completamente inadecuado e impropio".

La redactora jefe de Internacional, Berna Gonz¨¢lez Harbour, asegura: "Despu¨¦s de consultar distintos diccionarios, debo reconocer que el lector tiene raz¨®n, y que hemos utilizado 'abatir' como sin¨®nimo de matar sin tener en cuenta sus connotaciones de humillaci¨®n. Intentaremos tener m¨¢s cuidado en el futuro".

Los lectores pueden escribir a la Defensora del Lector por carta o correo electr¨®nico (defensora@elpais.es), o telefonearla al n¨²mero 913 377 836.