Simeone vuelve a dejar el Atl¨¦tico

Cuando Diego Simeone jugaba en el Inter, all¨¢ por marzo de 1998, un d¨ªa evoc¨® sus dos amores: "El Atl¨¦tico es mi tipo de club, como el Racing de Avellaneda, sufrido, que vive el f¨²tbol con pasi¨®n, al que le cuesta mucho m¨¢s conseguir todo". Hace a?o y medio, Simeone regres¨® al Atl¨¦tico, aparentemente para cerrar su carrera en el Manzanares. Ayer, el rumor que se dejaba oir por Buenos Aires desde hace una semana se materializ¨®: Simeone no se despedir¨¢ del f¨²tbol jugando en Madrid. Lo har¨¢ vestido de celeste y blanco en el Racing de Avellaneda, el primer club argentino en ganar tres t¨ªtulos de Liga consecutivos, el primero en alzar la Copa Libertadores, el primero en ganar la Intercontinental... El club de Per¨®n y de Gardel. Un mito al que Simeone se at¨® despu¨¦s de la edad dorada porque Simeone, bajo el caparaz¨®n, fue siempre un sentimental.

El club argentino confirm¨® la noticia. Ferrando no convoc¨® al jugador para Bilbao

El volante del Atl¨¦tico no ha podido soportar quedarse tres veces fuera de una convocatoria por razones t¨¦cnicas. Nunca en su vida le hab¨ªa pasado una cosa semejante. A sus 34 a?os ha preferido el repliegue a la confrontaci¨®n con su entrenador, C¨¦sar Ferrando. Fuentes del club argentino confirmaron ayer la noticia y el jugador no desminti¨® ni confirm¨® nada p¨²blicamente. Simeone se prepara para regresar al f¨²tbol argentino despu¨¦s de 15 a?os de ausencia. Por si acaso, Ferrando no le ha convocado para visitar San Mam¨¦s, un campo que le tiene entre sus elementos m¨¢s aborrecidos.

A excepci¨®n de la extra?a relaci¨®n que mantuvo con Radomir Antic, Simeone fue la clase de caudillo que se identific¨® y se aproxim¨® a su entrenador. El hombre fue tan correligionario de Bilardo como de Passarella, Basile, Simone, Eriksson, Mancini o Bielsa. Si hay l¨ªderes d¨ªscolos, el suyo fue un caso de disciplina marcial. Quiz¨¢ por eso prefiera dejar el Atl¨¦tico en el momento en que su choque con Ferrando parece inminente. Ya no se siente con fuerzas —ni autoridad suficiente— para exigir el tratamiento que cree que merece de Ferrando, un t¨¦cnico al que considera demasiado afanado en absorber protagonismo. El suyo parece definitivamente cosa del pasado.

Simeone, que gan¨® una Liga y una Copa con el Atl¨¦tico, una Liga con el Lazio, una Copa de la UEFA con el Inter, y dos Copas de Am¨¦rica con la selecci¨®n, es el futbolista que m¨¢s veces se ha vestido la camiseta de Argentina en la historia: 105 partidos oficiales. La cifra no es trivial. En su suma, el Cholo ha compartido equipo con Maradona, Caniggia, Batistuta, Ruggeri o Redondo. Vestir bajo el escudo del Racing, el equipo que hered¨® los colores nacionales, parece, a la vista de su historial, una consecuencia autom¨¢tica. Los antecedentes, sin embargo, reflejan otra tendencia: salvo Ortega, por razones de fuerza mayor tras ser sancionado por la FIFA, el resto de los veteranos de la selecci¨®n Argentina que jug¨® el Mundial de 1998 ha desistido de regresar a jugar al pa¨ªs. Los salarios y, sobre todo, la inseguridad de Buenos Aires, han sido una barrera que s¨®lo Simeone parece decidido a saltar. Si lo hace, ser¨¢ por motivos afectivos. Racing, localizado en la barriada industrial de Avellaneda, es uno de los clubes que ha tenido m¨¢s problemas econ¨®micos en Argentina. Pero es el club del que Simeone fue seguidor desde su infancia y eso tiene un m¨¦rito especial.

Simeone naci¨® en 1970 y para entonces la ¨¦poca gloriosa del Racing estaba finiquitada. Basile, D¨ªaz y Perfumo, autores principales de la conquista de la Copa Intercontinental de 1967, se hab¨ªan marchado. Sin ellos, Racing se encamin¨® al descenso. Desde entonces ha ganado un campeonato local, en 2001, y una Supercopa en 1988, pero nunca ha vuelto a jugar como evoca la leyenda de Zito, La Bordadora, Enrique Garc¨ªa, Rub¨¦n Bravo, Pizzuti, Dellacha, Maschio, Sacchi y Corbatta. Del equipo de f¨²tbol mitol¨®gico queda un resabio mucho m¨¢s pobre. Mucho menos inspirador que el grupo de 1966 que integr¨® y defini¨® Alfio Basile: "No podr¨ªa decir qui¨¦n fue el mejor ni aunque me dieran un a?o de plazo".

Simeone deja el Manzanares en una maniobra de car¨¢cter pol¨ªtico. Se va con la idea de regresar para ocupar un puesto en el banquillo o en sus inmediaciones. Para eso est¨¢ completando el curso espa?ol de entrenadores, una de sus grandes aspiraciones desde hace a?os.