F¨²tbol espumoso
Esta noche, en Barcelona, Xavi nos ofrecer¨¢ una nueva exhibici¨®n de agudeza visual. Se abrir¨¢ camino en la sopa de nombres y dorsales que Ranieri se atreve a llamar equipo.
Como en la mejor ¨¦poca del insurrecto Johan Cruyff, su figura representa la continuidad de una exquisita dinast¨ªa de medios centro. Desde entonces, un nuevo rango de finos percusionistas ha dado al Bar?a el sello que determina el estilo: all¨ª, el juego era una energ¨ªa radial que proyectaba el foco m¨®vil de un solo director. Discut¨ªamos si el secreto de la f¨®rmula estaba en la armon¨ªa del dibujo o en la velocidad de ejecuci¨®n, pero el amplio abanico de las maniobras, su rigor cartesiano y su perfil variable nos pon¨ªan finalmente de acuerdo: aquello era un prodigio de ritmo y simetr¨ªa.
El prototipo de la cantera fue Milla, un menudo administrador que repart¨ªa el juego en peque?as porciones. Sus pases no llegaban lejos, pero compromet¨ªan a todo el mundo en la conspiraci¨®n. A su mando, los extremos se sent¨ªan r¨¢pidos, los interiores descubr¨ªan las excelencias del tri¨¢ngulo y los goleadores gozaban siempre de una segunda oportunidad. Sumando c¨¦ntimos, combinando m¨¦todo, instinto y proporci¨®n, Luis convirti¨® en un arte el viejo oficio de brujulear.
M¨¢s tarde lleg¨® Guardiola, equidistante como un epicentro, y empez¨® a tender en el c¨ªrculo central una precisa telara?a. Gracias a ¨¦l pudimos disfrutar de la visi¨®n perif¨¦rica de Laudrup, de la fiereza rural de Stoichkov y el tacto sedoso de Romario: nunca la posesi¨®n de la pelota hab¨ªa sido tan diab¨®lica. Cuando cre¨ªamos que el caudal gen¨¦tico del club estaba agot¨¢ndose, apareci¨® Xavi Hern¨¢ndez, la pen¨²ltima mutaci¨®n. Esta vez ven¨ªa disfrazada de subalterno: ten¨ªa un modesto porte de pe¨®n y parec¨ªa m¨¢s hecha para llevar la carga que para pilotar el b¨®lido.
Las primeras impresiones eran infundadas. Como en un crisol, en Xavi se agrupaban todos los encantos y misterios de la estirpe: el instinto del compositor, el gusto por la transparencia y una sensibilidad plural capaz de integrar los valores mestizos de la plantilla blaugrana.
Pase lo que pase en el marcador, esta noche habr¨¢ f¨²tbol espumoso en el Camp Nou. Servido por Xavi, f¨²tbol de cava.
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