Dos golazos de Valdo tumban al Mallorca

Es conocida la carencia goleadora de los equipos de H¨¦ctor C¨²per, un rasgo que se hace tolerable cuando queda compensado por la habitual eficacia defensiva de los conjuntos dirigidos por el t¨¦cnico argentino. Ayer, el Mallorca se salta por vez primera esta m¨¢xima cuperiana. El equipo mallorqu¨ªn se ha convertido en un conjunto que recibe goles a pares, sin tan siquiera exigir a cambio un esfuerzo f¨ªsico o t¨¢ctico de consideraci¨®n por parte del rival.

No se despein¨® Osasuna para neutralizar los t¨ªmidos acercamientos baleares al ¨¢rea de El¨ªas. La primera parte, que por oportunidades y dominio bien pudo acabar tal y como empez¨®, con empate a cero, se cerr¨®, no obstante, con una clar¨ªsima ventaja navarra en el marcador. En un lapso de ocho minutos, dos grandes goles de Valdo dejaron sin aliento al Mallorca. El medio ofensivo enchuf¨® primero una volea desde la frontal del ¨¢rea, tras un rechace de la defensa local. Y aprovech¨® despu¨¦s un pase de cabeza de Pu?al para volver a batir a Moy¨¢ por el mismo palo y casi desde el mismo punto.

Osasuna es un conjunto con facilidad para el gol: s¨®lo Barcelona, Real Madrid y Valencia suman m¨¢s tantos que los navarros en la presente temporada. Ayer, los de Javier Aguirre demostraron que los n¨²meros no son fruto de la casualidad y dejaron el partido casi sentenciado cuando a¨²n faltaban 45 minutos por disputar.

El Mallorca lo intent¨® sin tino durante el segundo tiempo, pero ni siquiera los cambios introducidos obraron el milagro. En Son Moix flotaba a¨²n el recuerdo de la remontada ante el Numancia, conseguida dos jornadas atr¨¢s y partiendo de un id¨¦ntico marcador adverso. Pero Osasuna mantuvo el tipo cuando arreciaba el peligro, especialmente en las jugadas a bal¨®n parado.

El ¨²nico gol balear lleg¨® finalmente con un bal¨®n largo, peinado por Arango y rematado por Perera a la red. Era el minuto ochenta, demasiado tarde para que el Mallorca so?ara en cambiar el signo del partido, aunque el propio Perera dispuso todav¨ªa de una ocasi¨®n clara para lograr el empate.

A la postre, Osasuna se embols¨® con merecimiento los tres puntos y se coloc¨® a un tiro de piedra de las posiciones europeas. Por su parte, Valdo, que acab¨® lesionado, hizo su particular aportaci¨®n al angustioso deambular del Mallorca por esta Liga.