El suelo edificado aumenta un 50%

La Comunidad de Madrid aument¨® sus zonas urbanizadas un 49,23% entre 1990 y 2000, uno de los mayores incrementos de Espa?a. El dato es m¨¢s llamativo a¨²n si se tiene en cuenta que ya en 1990 Madrid era la comunidad m¨¢s urbanizada.

La prueba de que Madrid es diferente es que, a vista de sat¨¦lite, ya se observa el aumento del suelo urbanizado. Cuando Ana Porcuna, del departamento de teledetecci¨®n del Instituto Geogr¨¢fico Nacional, superpone en la pantalla del ordenador la imagen de sat¨¦lite de la Comunidaden 1990 y en 2000 se observa una gran diferencia. En el resto de Espa?a, hay que colorear la superficie urbanizada para distinguir el aumento de lo construido.

En Madrid se observan localidades del cintur¨®n, como Legan¨¦s, Alcorc¨®n o Getafe, que han duplicado su extensi¨®n. Se detecta c¨®mo la capital crece hacia el norte, el corredor del Henares y el sur. Destaca Rivas-Vaciamadrid, que entre 1981 y 2001 pas¨® de 653 habitantes a 35.742.

La capital tambi¨¦n crece. El Plan General de Ordenaci¨®n Urbana, aprobado en 1997 por el Ayuntamiento, preve¨ªa levantar con "urgencia" al menos 200.000 nuevas viviendas en los l¨ªmites de Madrid. El crecimiento es muy distinto del de Barcelona, "m¨¢s ordenado y limitado geogr¨¢ficamente", seg¨²n el secretario general de Ordenaci¨®n del Territorio del Ministerio de Medio Ambiente, Antonio Serrano.

Serrano afirma que la mancha dispersa que da el sat¨¦lite demuestra que "Madrid es una especie de ameba con un crecimiento disperso e incontrolado. Algo que necesariamente obliga al uso del coche y a construir infraestructuras, algunas de las cuales s¨®lo se usan unas pocas horas al d¨ªa". Es la ciudad dispersa, que se extiende por la comunidad. Madrid es la autonom¨ªa que m¨¢s suelo agr¨ªcola pierde, un 8,75%. Serrano explica que el cambio lleva de una ciudad compacta mediterr¨¢nea hacia una ciudad anglosajona, "muy extendida y en la que los ciudadanos ganan en individualidad pero pierden sociabilidad". "Son ciudades con casas grandes, muy extendidas pero sin gente ni comercios en las calles. El centro de reuni¨®n es el centro comercial. Y en lo medioambiental son poco sostenibles, porque obligan al uso del coche".

El ex director de la Agencia Europea de Medio Ambiente, Domingo Jim¨¦nez Beltr¨¢n, se?ala: "No faltan viviendas. Falta acceso a ellas, porque est¨¢n en un mercado especulador". La comunidad se est¨¢ convirtiendo en "una gran regi¨®n funcional urbana", seg¨²n Serrano. En la pel¨ªcula La escopeta nacional, de Luis Garc¨ªa Berlanga, un constructor lamenta que no se pueda urbanizar la Casa de Campo. Pero advierte: "Ya la tenemos rodeada". Era 1978.