?Maremoto econ¨®mico?

Cuando la naturaleza impone su fuerza, poco m¨¢s se puede hacer que tratar de reparar, en la medida de lo posible, la destrucci¨®n. Mientras miles de personas de todo el mundo se est¨¢n movilizando para tratar de ayudar con donaciones a los afectados por el maremoto, nuestros gobiernos, al parecer, opinan diferente. Porque mientras la ayuda oficial (donaciones y cr¨¦ditos) del Gobierno espa?ol es de 50 millones, la de EE UU es de 350 millones, etc¨¦tera. El dinero que los pa¨ªses afectados dar¨¢n a los pa¨ªses m¨¢s ricos y a los acreedores internacionales en concepto de deuda externa ser¨¢ este a?o de 101.000 millones de d¨®lares, y la deuda total superar¨¢ los 350.000 millones de d¨®lares (datos del Banco Mundial).

?stos son recursos con los que no podr¨¢n contar los pa¨ªses arrasados para cubrir sus necesidades b¨¢sicas, pero que nuestros gobernantes exigen sin dudarlo. Sin duda podemos decir que la demanda de la deuda externa en estos pa¨ªses es hoy un segundo tsunami, pero esta vez econ¨®mico y voluntario. Como ciudadanos no queremos contribuir en esta nueva expoliaci¨®n de la miseria. Se?ores gobernantes, nosotros ya ayudamos; ustedes colaboren un poco y anulen la deuda externa.