Upa!
La mayor¨ªa de nosotros soportamos ¨²ltimamente los limitadores de velocidad que, lejos de ser algo nuevo (ya se intent¨® hace a?os con las famosas "chinchetas"), parecen volver a renacer en las mentes de algunos ediles o presidentes de comunidades de urbanizaciones privadas. Ser¨ªa bueno recordar que aquellas macro-chinchetas de acero alternadas en hilera, fueron al final eliminadas por suponer un obst¨¢culo peligroso en la calzada y eso que imprim¨ªan al auto un movimiento de vaiv¨¦n hasta cierto punto agradable. Pues bien; algo ha debido cambiar en el corpus legislativo o en el animus del legislador y ahora nos sorprenden con una barrera transversal a la marcha hecha de asfalto que, no por m¨¢s integrado en la calzada, resulta menos molesto y peligroso. Es m¨¢s, su peligrosidad aumenta, dado que si bien al principio est¨¢n pintados de color blanco o amarillo tr¨¢fico, acaban deste?idos y dif¨ªciles de detectar a simple vista. Y no todos ellos est¨¢n se?alizados por la que deber¨ªa ser preceptiva placa vertical de "perfil irregular".
Soportar un trayecto a diario plagado de estos obst¨¢culos es irritante y perjudicial para la mec¨¢nica del autom¨®vil e incluso para la seguridad (he visto hacer de todo al tratar de esquivarlos.) No s¨¦; pero algo en todo esto me huele a irregular. Entiendo que quien padece la irresponsabilidad de los conductores: colegios, urbanizaciones, cruces peligrosos, v¨ªas r¨¢pidas, etc. se sientan tentados a solicitar que se instalen. Pero considero que en algunos casos no est¨¢n ubicados ni con las garant¨ªas de seguridad ni mucho menos con las legales suficientes. Y ¨¦stos son los casos que invito a que todos los automovilistas responsables, denunciemos.
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