Interior atribuye el atentado a un 'comando itinerante' sin infraestructura en la capital

Los servicios antiterroristas sospechan que el atentado de ayer fue perpetrado por un comando itinerante de ETA, que tra¨ªa el encargo de entrar en la capital, golpear y huir. La mec¨¢nica del crimen -el coche robado de madrugada y colocado al alba- hace pensar en esa posibilidad, aunque los investigadores no descartan que los terroristas se hayan refugiado en Madrid antes de su huida definitiva. El escaso margen de tiempo entre la colocaci¨®n del coche, el aviso a Gara y el estallido avalar¨ªan esta hip¨®tesis. No obstante, no creen que la banda tenga en estos momentos infraestructura estable en la capital.

El atentado es pr¨¢cticamente id¨¦ntico al que ETA perpetr¨® el 22 de abril de 2002 junto a la sede central de Repsol-Ypf en Madrid. En aquella ocasi¨®n, como en ¨¦sta, el coche fue robado pocas horas antes del atentado, cargado con cloratita, guiado por dos personas hasta la puerta del garaje del edificio y activado con un temporizador. La diferencia: en el de Repsol-Ypf no hubo aviso. Esos terroristas no volvieron a atentar en Madrid (ni ETA lo hizo hasta la Nochebuena de 2003, aunque un comando fue interceptado con otro coche bomba el 17 de diciembre de 2002), y, como ahora, la acci¨®n se atribuy¨® a un comando itinerante.

Los terroristas que atentaron ayer robaron el Renault 19 blanco en una calle de Guadalajara, a unos 50 kil¨®metros de Madrid y en la misma carretera en la que, ya llegando a la capital, est¨¢n los desv¨ªos para ir al Parque de las Naciones, donde est¨¢ el Ifema. Lo hicieron despu¨¦s de las 21.00 del martes, porque, seg¨²n la denuncia de su due?o, fue a esa hora cuando lo dej¨® aparcado en la calle. Los etarras le quitaron al coche sus matr¨ªculas originales y le colocaron otras falsas de Madrid, correspondientes a un veh¨ªculo de la misma marca y modelo, por lo que ya las tra¨ªan, al igual que el explosivo.

El lugar en el que cambiaron las matr¨ªculas e introdujeron el explosivo es un enigma, pero los investigadores saben que los terroristas ya tra¨ªan las herramientas para estas operaciones (ETA dispone de un sacacorchos o ganz¨²a artesanal para abrir Renault y Peugeot antiguos). El turismo fue aparcado bajo el edificio de Bull entre las 7.30 y las 8.30.

Cuando se produjo el aviso, a las 8.55, ya estaba all¨ª y, minutos antes, hab¨ªa sido visto por varios testigos. Lo corto de los plazos entre la colocaci¨®n, el aviso y el estallido (9.30) hace pensar a los investigadores que los terroristas pudieran haber optado por introducirse en Madrid, donde posiblemente se habr¨ªan refugiado en un piso de alg¨²n colega.

"Ya tenemos varias hip¨®tesis, pero por el momento la polic¨ªa no descarta absolutamente nada", indic¨® ayer el ministro del Interior, Jos¨¦ Antonio Alonso. Ninguna de las fuentes consultadas se atrevi¨® ayer a asegurar taxativamente que ETA no tiene infraestructura en la capital. "Todav¨ªa hay que hacer muchas comprobaciones, pero parece que no", indicaron.

Tanto el ministro como los investigadores rehusaron explicar el porqu¨¦ del atentado. "No podemos entrar en una explicaci¨®n de acci¨®n-reacci¨®n", dijo Alonso. "Pueden ser muchas cosas: aprovechar la repercusi¨®n internacional de la feria internacional de arte contempor¨¢neo Arco; perjudicar la candidatura de Madrid 2012, puesto que la zona de la explosi¨®n es parte del proyecto ol¨ªmpico; darle un aviso al presidente mexicano, Vicente Fox, por la pol¨ªtica de su pa¨ªs respecto a los etarras que viven all¨ª...", aseguraron fuentes de los servicios antiterroristas.

No obstante, la mayor¨ªa de las fuentes consultadas apuntan a que se trata de una continuaci¨®n de la estrategia que comenz¨® en verano. "Quieren decir que est¨¢n ah¨ª, que hay que contar con ellos, que pueden hacerlo donde y cuando quieran y que, adem¨¢s, van aumentando cada vez m¨¢s su capacidad", alegan. Fuentes policiales vascas insistieron en la tesis de su consejero de Interior, Javier Balza, de que ETA ha entrado en una escalada de atentados, cada vez m¨¢s intensos, "para ir reacostumbrando a la poblaci¨®n a los atentados, tras la conmoci¨®n del 11-M". El atentado del 18 de enero en Getxo (Vizcaya), con 40 kilos de explosivos, m¨¢s clavos y tornillos de metralla, estuvo a punto de matar a un ertzaina.

Otros medios explicaron que este atentado demuestra que ETA, aunque muy debilitada, "sigue disponiendo de mucha gente" (aunque entre Espa?a y Francia hay casi 700 presos) y que, adem¨¢s, "la banda no tiene una direcci¨®n ¨²nica, porque parece que hay terroristas que van por su cuenta". De ser cierta esta tesis, ETA habr¨ªa sufrido una divisi¨®n interna entre los partidarios de aprovechar el momento y los proclives a seguir atentando.