Espa?a y Polonia coordinar¨¢n sus posiciones sobre las ayudas de la UE
Zapatero conf¨ªa en alcanzar un acuerdo
Cuando se debatan cifras surgir¨¢n las discusiones, pero, de momento, Espa?a y Polonia han acordado ir de la mano en el debate sobre el reparto de las ayudas comunitarias, con un principio b¨¢sico: que las pol¨ªticas de cohesi¨®n son un pilar esencial de la UE y deben ser defendidas como tal, frente a los intentos de recortarlas por parte de pa¨ªses ricos. El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el polaco, Marek Belka, afirmaron ayer este objetivo y el inter¨¦s privilegiado de las relaciones entre sus respectivos pa¨ªses.
Frente a la posibilidad de que las cumbres hispano-polacas sean una herencia indeseada de la etapa en que Aznar estableci¨® un contacto privilegiado con Varsovia, por el entusiasmo com¨²n con la pol¨ªtica de George W. Bush, Zapatero declar¨® ayer que "la relaci¨®n de Espa?a con Polonia es fundamental" y que a esta cumbre le seguir¨¢n otras de periodicidad anual, si bien la de ayer vale para 2005 y para 2004, cuando fue suspendida por prolongaci¨®n de la comparecencia del presidente ante la Comisi¨®n del 11-M.
Zapatero invit¨® por carta al l¨ªder del PP, Mariano Rajoy, a viajar con ¨¦l ayer a Varsovia, como le prometi¨® al final del agrio debate parlamentario sobre la cancelaci¨®n de su viaje a la capital polaca, el pasado diciembre. Seg¨²n fuentes gubernamentales, en La Moncloa no se ha recibido respuesta de Rajoy.
El primer ministro Belka parece haber olvidado, en cambio, el desaire de hace dos meses. Ayer correspondi¨® a las atenciones de su hu¨¦sped espa?ol con el anuncio de que viajar¨¢ a Espa?a el pr¨®ximo 11-M para participar en la conferencia antiterrorista organizada por el Club de Madrid. Zapatero y Belka demostraron un empe?o total en subrayar sus coincidencias por encima de las diferencias que se puedan derivar del reparto de los fondos estructurales y de cohesi¨®n en la UE de 25 miembros, una negociaci¨®n a trav¨¦s de la que Polonia aspira a suceder a Espa?a como la mayor perceptora neta. Madrid reclama una reducci¨®n gradual de sus ingresos que le evite ser la ¨²nica pagadora del coste de la entrada de nuevos socios.
"Espa?a y Polonia se necesitan dentro de la UE", dijo Belka. "Los dos pa¨ªses tenemos intereses comunes en la Uni¨®n, derivados de nuestro similares tama?os demogr¨¢ficos, de que somos pa¨ªses intensamente europe¨ªstas y de que ambos defendemos el principio de la cohesi¨®n de la solidaridad como elemento esencial de la identidad europea", se?al¨® Zapatero. Espa?a y varios de los nuevos socios firmaron el pasado 7 de diciembre una carta en la que defend¨ªan que el volumen de recursos propios de la Uni¨®n se mantenga al menos en el 1,24% del PIB comunitario, seg¨²n propone la Comisi¨®n, pese a la propuesta de algunos pa¨ªses ricos de reducir el techo hasta el 1%.
El presidente del Gobierno se declar¨® "convencido de que va a haber un acuerdo" y afirm¨® que no tiene "ninguna duda de que, en el periodo 2007-2013 [el septenio financiero en discusi¨®n], se va a abrir la puerta del ¨¦xito a Polonia, porque va a recibir muchos fondos de la UE. Quiero el ¨¦xito de Polonia", proclam¨®.
Belka reconoci¨® que "hay detalles que negociar", pero reiter¨® que existe "un enfoque com¨²n del problema" a partir del principio de solidaridad, en cuya promoci¨®n destac¨® el liderazgo de Zapatero, y la voluntad de construir una propuesta "en la que cada parte ceda un poquito".
Otro tema abordado fue el deseo polaco de que sus ciudadanos adquieran en 2006 la plena libertad de emigrar dentro de las fronteras europeas. Zapatero insisti¨® dos veces en "la sensibilidad y la buena disposici¨®n" de su Gobierno, pero no comprometi¨® un apoyo definitivo. En Espa?a hay 30.000 polacos regularizados, casi toda la colonia, que no plantean problema, pero la entrada en vigor de la libertad de circulaci¨®n debe ser com¨²n para todos los nuevos socios, y puede haber dificultades con otros, indican fuentes gubernamentales.
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