Cine contra la violencia de g¨¦nero

"Esta historia me la cont¨® una amiga hace unos a?os, es real, despu¨¦s de reirme a carcajadas, vi que era una barbaridad y realice el corto Mi se?ora", cont¨® ayer por la tarde el actor y director cordob¨¦s Juan Rivadeneyra al dirigirse junto al actor Jos¨¦ Chaves, el presidente de la Fundaci¨®n Iniciativa Social (FIS), Hilario Sa¨¦z y varios miembros de la ONG Solidarios, a la c¨¢rcel Sevilla II. Minutos despu¨¦s, se reun¨ªan con un grupo de presos para realizar un taller contra la violencia de g¨¦nero.

El primer paso fue proyectar a los presos el cortometraje Mi se?ora que lleva circulando por Internet desde hace un a?o y medio, que ha sido premiado en ocho ocasiones, gan¨® en Cinemad 2003, que ha recibido m¨¢s de un mill¨®n de visitas al mes y que se est¨¢ utilizando en numerosos talleres con colectivos masculinos. "Lo estamos poniendo en todo tipo de sitios, en institutos, a polic¨ªas, a jueces, porque la violencia est¨¢ en toda la sociedad y da igual de la clase que seas", a?adi¨® el director.

Ayer, le toc¨® el turno a una decena de presos de la capital andaluza. Tras un primer pase en el que los internos vieron como un hombre, al actor Jos¨¦ Chaves, increpaba a una mujer durante tres minutos, lo que provoc¨® que las carcajadas fueran un¨¢nimes en la sala, el soci¨®logo Hilario S¨¢ez comenz¨® el taller. Con preguntas y poni¨¦ndo a los presos en otras situaciones (por ejemplo que imaginaran que la mujer era su hija, su pareja o su madre) los internos se fueron sensibilizando con un problema que, seg¨²n S¨¢ez, "hay que prevenir desde la educaci¨®n": "Trabajamos por ejemplo con los polic¨ªas porque hay que cambiar las perspectivas. No es c¨®mo regular el tr¨¢fico, hay que aprender a ver d¨®nde no estamos viendo. La violencia de g¨¦nero no es que sea tan dif¨ªcil de perseguir, es que no la estamos viendo. Cuando se cambia de perspectiva, se ve por todas partes".

Un cambio en la actitud de los presos es lo que consigui¨® S¨¢ez ayer. Las carcajadas del primer pase y frases como "ella se lo habr¨¢ buscado" dieron paso a las sonrisas en un segundo pase y a un debate entre los presos para intentar explicar por qu¨¦ el hombre agrede verbalmente a la mujer. "Todo el problema tiene que ver con el concepto de que el hombre es superior a la mujer, parece que hay un acuerdo en el que el hombre puede faltarle al respeto. Despu¨¦s, la t¨ªa aguanta y se empieza por muy pocas cosas que van a m¨¢s", se?al¨® S¨¢ez. Los presos asent¨ªan y el corto lo reafirmaba: la agresi¨®n verbal del hombre se queda en el umbral de la violencia f¨ªsica despu¨¦s de tres minutos de insultos. Una situaci¨®n que seg¨²n el director Rivadeneyra se da en la sociedad continuamente. "El corto pretende provocar mostrando una realidad", a?adi¨®.

La brutalidad de Mi se?ora ha levantado tambi¨¦n reacciones contrarias de algunos colectivos de mujeres aunque el director se?al¨® que lo ¨²nico que pretende es reproducir la forma de ser del hombre. Un comportamiento que cambi¨® en el tercer pase d¨®nde el silencio fue casi total en el aula de la c¨¢rcel.