Kofi Annan anuncia que presentar¨¢ en Madrid el plan antiterrorista de la ONU

Cuando la Carta Fundacional de la ONU est¨¢ a punto de cumplir 60 a?os, su secretario general, Kofi Annan, anunci¨® ayer en M¨²nich que presentar¨¢ un plan de reformas de la organizaci¨®n en Madrid con ocasi¨®n de la cumbre sobre Democracia y Terrorismo (del 8 al 11 de marzo), as¨ª como el esquema de una estrategia antiterrorista para Naciones Unidas. Annan apoy¨® la recomendaci¨®n del comit¨¦ encargado de la reforma de la ONU de crear un fondo para apoyar a los Estados m¨¢s pobres en la lucha antiterrorista.

Annan, en la primera ocasi¨®n en que un secretario general de la ONU se ha dirigido a tan se?ero foro estrat¨¦gico, desgran¨® las tres principales l¨ªneas de "la reforma de mayor alcance del sistema de seguridad internacional" desde 1945, que propondr¨¢, en su mayor parte basada en las recomendaciones del grupo de alto nivel.

En primer lugar, Annan considera que hay que reforzar las defensas colectivas para reducir las posibilidades de que "las amenazas latentes se conviertan en inminentes, y ¨¦stas, en reales". Cit¨® los ejemplos de la proliferaci¨®n nuclear y del terrorismo. Adem¨¢s del mencionado fondo, se propone tambi¨¦n partir de la definici¨®n de terrorismo acordada por el citado grupo, y proponer que los Estados la aprovechen para "finalizar y adoptar un convenio amplio contra el terrorismo", que haga inaceptable "cualquier objetivo civil o de no combatientes" de tales ataques.

La cumbre Democracia y Terrorismo, entre el 8 y el 11 de ese mes, en la que Annan presentar¨¢ estas iniciativas, es organizada por el Club de Madrid en el primer aniversario de los atentados del 11-M, con pleno apoyo de los gobiernos nacional, regional y municipal.

En segundo lugar, Annan estima que cuando la prevenci¨®n fracasa y se han agotado los medios pac¨ªficos, se puede "considerar el uso de la fuerza". No es partidario de enmendar el art¨ªculo 51 de la Carta de Naciones Unidas, que autoriza el uso de la fuerza en defensa propia o por decisi¨®n del Consejo de Seguridad. Seg¨²n Annan, la mayor parte de los juristas creen tambi¨¦n en el derecho a la acci¨®n preventiva contra una amenaza inminente.

El problema a?adido, para Annan, es que hay amenazas que no son inminentes, pero que pueden culminar en una "pesadilla".

Para ello (y frente a la Doctrina Bush) consider¨® que es al Consejo de Seguridad a quien corresponde decidir. Annan tambi¨¦n ha evolucionado desde su defensa del derecho a la injerencia por cuestiones humanitarias hasta abogar ahora por la "responsabilidad de proteger" a poblaciones frente a genocidios u otros horrores. En ese contexto, pidi¨® una r¨¢pida decisi¨®n del Consejo de Seguridad contra las matanzas en Darfur.

En tercer lugar, el secretario general se propone reforzar los instrumentos colectivos para construir la paz en zonas castigadas y para ello hizo suya la idea de crear un nuevo ¨®rgano intergubernamental en la ONU: una Comisi¨®n de Construcci¨®n de la Paz, que re¨²na a todas las partes e instituciones necesarias. Lo que le parece m¨¢s complicado a Annan es una reforma del n¨²mero de miembros del Consejo de Seguridad, aunque su ampliaci¨®n lo har¨ªa m¨¢s representativo y m¨¢s democr¨¢tico, y aumentar¨ªa as¨ª la legitimidad de sus decisiones.

Hillary Clinton

Por su parte, la senadora dem¨®crata estadounidense Hillary Clinton se volc¨® ayer en la Conferencia sobre Pol¨ªtica de Seguridad de M¨²nich en apoyo de la figura de Annan y de la propia ONU, que calific¨® de "organizaci¨®n indispensable".

Naturalmente, esta reforma que han de debatir los Gobiernos en su cumbre de septiembre debe venir firmemente apoyada por Estados Unidos. Desde luego, si por Hillary Clinton fuera, la apoyar¨ªa, pues la senadora -que no se perdi¨® un minuto de los dos d¨ªas de debate en M¨²nich- no s¨®lo alab¨® el liderazgo de Annan -cuestionado por la Administraci¨®n de George W. Bush-, sino que se mostr¨® partidaria de "reforzar, reformar, aligerar la burocracia y mejorar la capacidad de responder a crisis de la ONU". Estados Unidos se beneficiar¨ªa de una ONU fuerte, "no m¨¢s d¨¦bil", afirm¨® Clinton, para lo cual "Am¨¦rica tiene que tomar la direcci¨®n" de este proceso.