Una exposici¨®n re¨²ne los retratos y paisajes captados por la c¨¢mara de Martine Franck

La fot¨®grafa Martine Franck (Amberes, 1938) asegura que el retrato le apasiona porque supone "siempre un nuevo encuentro" y que toma im¨¢genes de paisajes "por placer, por necesidad". Retratos y paisajes son los dos pilares de la exposici¨®n que ayer inaugur¨® la sala de la BBK (Gran V¨ªa, 32), con medio centenar de im¨¢genes captadas a lo largo de m¨¢s de 30 a?os por la fot¨®grafa, miembro de la agencia Magnum. Casada con Henri Cartier-Bresson en 1970, Franck tuvo que superar la dificultad de realizar una obra propia junto al gran maestro franc¨¦s.

El profesor Ram¨®n Esparza, organizador de la exposici¨®n en Bilbao, encuadr¨® a Martine Franck en "la segunda generaci¨®n del realismo po¨¦tico franc¨¦s". Su preocupaci¨®n por la instant¨¢nea -"incluso en lo m¨¢s est¨¢tico, el paisaje", subray¨®- y la tendencia geom¨¦trica de la composici¨®n marcan el estilo de una fot¨®grafa preciosista en el uso del blanco y negro. "Depura el uso de la luz, hasta convertirla en un elemento integrante, un elemento que crea", a?adi¨®.

Martine Franck, fot¨®grafa, abierta hasta el pr¨®ximo 24 de abril, es una versi¨®n reducida de la exposici¨®n antol¨®gica que present¨® en 2002 en el Museo de la Vida Rom¨¢ntica, en Par¨ªs.

Encaminada al mundo del arte desde ni?a, influida por una vida cosmopolita y por la afici¨®n familiar al coleccionismo, y con estudios de Historia del Arte realizados en Inglaterra y Madrid, Franck decidi¨® dedicarse profesionalmente a la fotograf¨ªa despu¨¦s de realizar un viaje a Extremo Oriente con la directora de teatro Ariane Mnouchkine, fundadora de Le Th¨¦atre du Soleil. La propia Mnouchkine y otros personajes del teatro est¨¢n presentes en las fotograf¨ªas reunidas en la exposici¨®n.

Esparza destaca el peso de la tradici¨®n art¨ªstica en los retratos firmados por Franck, una selecta lista de personajes relacionados con la creaci¨®n, como Balthus, Isabelle Huppert, Marc Chagall, Peter Brook, Yves Saint Laurent, o su marido, Henri Cartier-Bresson, fallecido el pasado agosto. Marta Daho, encargada de exposiciones de Magnum, destac¨® que los retratos "rigurosos y sensibles" de Franck consiguen "ir m¨¢s all¨¢ de lo conocido para entrar en la parte m¨¢s ¨ªntima de los retratados".

Franck solicit¨® su ingreso en Magnum en 1980 y tres a?os m¨¢s tarde logr¨® convertirse en miembro de pleno derecho de la agencia. Sus fotograf¨ªas de paisajes -"una especie de ejercicio de meditaci¨®n visual ante los espacios desconocidos"- muestran rincones de China, Jordania, Italia, Irlanda o Gran Breta?a. "Mis paisajes son cl¨¢sicos y rom¨¢nticos a la vez: cl¨¢sicos por la composic¨¬¨®n, el contenido; rom¨¢nticos, por el desarraigo, el gusto por lo extra?o", dice.

Franck est¨¢ plenamente activa. Tras realizar un proyecto en la isla irlandesa de Tory y una serie de retratos de ni?os tibetanos, en los ¨²ltimos dos a?os ha acompa?ado al escen¨®grafo Robert Wilson en la Comedia Francesa para fotografiar sus montajes.

La exposici¨®n incluye una vitrina con objetos personales de Franck, una serie de peque?os portarretratos en los que se ven fotograf¨ªas de otra de las obsesiones: la vejez. Los retratos de ancianos reunidos en el libro Le Temp de Viellir (El tiempo de envejecer) son considerdos por la fot¨®grafa "un verdadero cuestionando social sobre una realidad mirada de frente".