La primera estrella del canto

El bel canto tiene un origen espa?ol. Fue, precisamente, el tenor Manuel Garc¨ªa (Sevilla, 1775-Par¨ªs, 1832), quien, de alguna manera, estableci¨® sus reglas para luego traspasarlas a las generaciones sucesivas. Sus hijas, Mar¨ªa Malibr¨¢n y Pauline Viardot, continuaron dibujando muescas en la leyenda creada por su padre. Su familia consigui¨® encabezar durante m¨¢s de un siglo la historia de la ¨®pera y el canto en sus pa¨ªses de residencia. Manuel Garc¨ªa fue tan c¨¦lebre como lo puede ser hoy una estrella del rock. El Teatro de la Maestranza de Sevilla y la Universidad Internacional de Andaluc¨ªa desarrollan estos d¨ªas el curso Manuel Garc¨ªa y su proyecci¨®n en el bel canto, que rinde homenaje a este tenor, considerado como padre de la ¨®pera espa?ola en su faceta de compositor y la primera estrella internacional del canto.

Manuel Garc¨ªa fue un m¨²sico extraordinario, cantante, actor, profesor y un ser de una personalidad arrolladora. Compuso tonadillas, canciones y alrededor de 40 ¨®peras y operetas. Alessandra Panzavolta, jefa de producci¨®n del Teatro de la Maestranza, se?ala que con Manuel Garc¨ªa "nace, pr¨¢cticamente, el divismo del bel canto". "?l encarna el personaje del tenor famoso, del divo que iba de pa¨ªs en pa¨ªs. Manuel Garc¨ªa era un hombre polifac¨¦tico. Fue compositor, int¨¦rprete, empresario... Llev¨® las ¨®peras italiana y espa?ola a Am¨¦rica. Fue un hombre renacentista", comenta Panzavolta.

Manuel Garc¨ªa, que adopt¨® el apellido de su padrastro, nunca conoci¨® a su padre. Inici¨® su aprendizaje en la escuela coral de la catedral de Sevilla. Debut¨® como int¨¦rprete de tonadillas en C¨¢diz. Luego march¨® a Madrid, donde obtuvo en 1779 su primer gran ¨¦xito con la Nina, de Paisiello. Pronto fue conocido en Espa?a por su talento como cantante y compositor. En 1802 estren¨® la opereta El seductor arrepentido, a la que sigui¨® la ¨®pera El poeta calculista tres a?os m¨¢s tarde. En 1808 interpret¨® en Par¨ªs la ¨®pera Griselda, de P?er. Cuatro a?os m¨¢s tarde fue nombrado tenor titular del San Carlo de N¨¢poles, junto a la cantante Isabella Colbran, con la que interpret¨® la Medea, de Mayer, y la Elisabetta, de Rossini.

El 20 de febrero de 1816 fue una jornada decisiva en su carrera: ese d¨ªa interpret¨® al primer Almaviva del Barbero de Sevilla, escrito especialmente para ¨¦l. Desde entonces Garc¨ªa se convirti¨® en el primer exponente de la m¨²sica de Rossini fuera de Italia. El tenor sevillano cant¨® en el estreno de El Barbero de Sevilla en Par¨ªs, Londres y Nueva York. Otello, de Rossini, le coron¨® con el triunfo total. De 1816 a 1825 altern¨® entre Par¨ªs y Londres mientras produc¨ªa sus nuevas ¨®peras. Manuel Garc¨ªa era ambicioso y las Am¨¦ricas refulg¨ªan ante sus ojos con el brillo de Eldorado. En 1825 viaj¨® a EE UU y a M¨¦xico. Le acompa?aba su familia.

Se cas¨® dos veces y tuvo cuatro hijos, que se convirtieron en cantantes. Sus dos hijas entraron en la leyenda. La soprano Mar¨ªa Malibr¨¢n (Par¨ªs, 1808-Manchester, 1836) fue la gran int¨¦rprete de Rossini. Aclamada en Francia e Italia, la Malibr¨¢n es hoy un mito por la fascinaci¨®n que ejerc¨ªa su talento y su belleza. Su hermana Pauline Viardot (Par¨ªs, 1821-1910) no le fue a la zaga. La mezzosoprano fue tambi¨¦n una gran cantante. El escritor ruso Ivan Turgueniev bebi¨® los vientos por ella.

La trayectoria de Manuel Garc¨ªa ayuda a conocer un territorio que suele permanecer en la sombra: la ¨®pera espa?ola. ?Por qu¨¦ no es conocida por el gran p¨²blico? "No existe todav¨ªa la capacidad de hacer conocer al p¨²blico lo que ha sido escrito en Espa?a", dice Panzavolta, que reconoce que Italia vivi¨® en el siglo XIX una proliferaci¨®n de compositores y teatros que pudo eclipsar las obras espa?olas.

"Hay ¨®peras de Manuel Garc¨ªa con una escritura parecida a la de Mozart. Siendo Manuel Garc¨ªa un hombre de cultura, conoc¨ªa lo que los dem¨¢s escrib¨ªan", agrega la jefa de producci¨®n del Teatro de la Maestranza, que recalca "la influencia rec¨ªproca entre Manuel Garc¨ªa y Rossini".

El tenor peruano Juan Diego Fl¨®rez, al que muchos consideran heredero de la tradici¨®n del bel canto iniciada por Manuel Garc¨ªa, pondr¨¢ el colof¨®n musical a este seminario con una actuaci¨®n, programada dentro del Ciclo de Grandes Int¨¦rpretes el 10 de marzo, el mismo d¨ªa que finaliza el curso.