El Papa dice que el Parlamento Europeo respalda "una nueva ideolog¨ªa del mal"
El Parlamento Europeo y otras instituciones democr¨¢ticas son instrumentos de "una nueva ideolog¨ªa del mal" que con su respaldo al aborto y a las uniones homosexuales "utiliza los derechos humanos en contra del hombre y la familia". ?sta es una de las reflexiones del segundo tomo de las memorias de Juan Pablo II, Memoria e identidad, que aparece hoy en Italia y abarca desde antes de su elecci¨®n como Papa.
La obra no es un recuento de los acontecimientos del largo pontificado, sino m¨¢s bien una cadena de reflexiones, centradas especialmente en el tema del bien y el mal. Cuesti¨®n central es el aborto, calificado de "exterminio legal de seres concebidos y a¨²n no nacidos". Ese exterminio "ha sido decidido", seg¨²n Juan Pablo II, "por parlamentos elegidos de forma democr¨¢tica" y constituye una de las m¨¢s graves "violaciones de la ley de Dios", entre las que incluye las "fuertes presiones del Parlamento Europeo" a favor de "las uniones homosexuales como alternativas a la familia". "Es l¨ªcito, e incluso necesario", se?ala, "preguntarse si aqu¨ª no sigue obrando una nueva ideolog¨ªa de mal, quiz¨¢ la m¨¢s sutil y oculta, que intenta utilizar los derechos humanos en contra del hombre y la familia".
Sobre el atentado del 13 de mayo de 1981, el Papa sugiere que una "ideolog¨ªa de la prepotencia", obviamente el comunismo, "encarg¨®" al turco Ali Ag?a que disparara. El atentado, escribe, fue "una de las ¨²ltimas convulsiones de las ideolog¨ªas de la prepotencia desencadenadas en el siglo XX". "Ali Ag?a", prosigue, "es, como todos saben, un asesino profesional. Eso significa que el atentado no fue una iniciativa suya, que alg¨²n otro lo ide¨® y alg¨²n otro se lo encarg¨®".
Los momentos posteriores a los disparos aparecen en un di¨¢logo de profundo misticismo entre el Papa y su secretario Dziwisz. "Ag?a sab¨ªa disparar y dispar¨® ciertamente a matar, pero fue como si alguien guiara y desviara el proyectil", comenta Wojtyla. "La bala traspas¨® el cuerpo del Santo Padre hiri¨¦ndole en el vientre, el codo derecho y el ¨ªndice de la mano izquierda; la bala cay¨® finalmente entre el Papa y yo", indica Dziwisz, y a?ade: "Sobre la vida o la muerte [del pont¨ªfice romano] decidieron varios elementos, como el tiempo que tardamos en llegar al hospital: algunos minutos m¨¢s, un peque?o obst¨¢culo en el camino, y habr¨ªamos llegado demasiado tarde. En todo esto es visible la mano de Dios, cada elemento lo indica". El libro revela que Dziwisz dio la extremaunci¨®n al Papa tras una fallida transfusi¨®n. "Pr¨¢cticamente estaba ya en el otro lado", indica Wojtyla.
Juan Pablo II hace tambi¨¦n referencia al sufrimiento que en la actualidad le causan el mal de Parkinson, la artritis y otras dolencias, y cita a San Pablo para decir que le parece positivo: "Todo sufrimiento humano, todo dolor, toda enfermedad encierran una promesa de salvaci¨®n y una promesa de alegr¨ªa". "Y eso vale", a?ade, "para cualquier sufrimiento provocado por el mal".
El pont¨ªfice recuerda los "a?os de plomo" italianos, en la d¨¦cada de los 70 y primeros 80, cuando el terrorismo fascista y de las Brigadas Rojas estaban en auge. Ese tipo de violencia, se?ala, "se ha atenuado de forma notable". Pero ha surgido otro: "En este ¨²ltimo periodo, sin embargo, se han extendido por el mundo las llamadas redes del terror, que constituyen una amenaza constante para la vida de millones de inocentes. Tuvimos una confirmaci¨®n impresionante de ese peligro en la destrucci¨®n de las Torres Gemelas de Nueva York (11 de septiembre de 2001), en el atentado de la estaci¨®n de Atocha de Madrid (11 de marzo de 2004) y en la masacre de Beslan en Osetia (del 1 al 3 de septiembre de 2004)". El presidente de la Conferencia Episcopal Espa?ola, Antonio Mar¨ªa Rouco, afirm¨® ayer al presentar en Madrid el libro del Papa, que Juan Pablo II "es un europeo de primera categor¨ªa", informa Efe.
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