'Estado de sitio' en Maguncia
La visita de George W. Bush a Maguncia coloc¨® ayer a esta apacible ciudad de menos de 200.000 habitantes (capital del Estado federado Renania-Palatinado) en un aut¨¦ntico estado de sitio y provoc¨® la indignaci¨®n de sus habitantes por las molestias causadas. Una mujer, indignada ante un agente que le imped¨ªa el acceso, grit¨®: "Mi marido est¨¢ enfermo y es mucho m¨¢s importante que ese presidente". Unos 10.000 polic¨ªas movilizados, varias de las autopistas de las de m¨¢s tr¨¢fico de Alemania cortadas, espacio a¨¦reo cerrado, m¨¢s de 100 vuelos anulados en el vecino aeropuerto de Francfort -Lufthansa estudia la posibilidad de exigir da?os y perjuicios-, tr¨¢fico fluvial en el Rin interrumpido, cientos de tapas de alcantarilla soldadas, buzones de correos arrancados, decenas de coches trasladados por la gr¨²a, contenedores de basura retirados, comercios obligados a cerrar por las calles clausuradas a peatones y coches y hasta suspensi¨®n de la jornada laboral en la f¨¢brica Opel de R¨¹sselheim. Maguncia era ayer en muchos lugares una ciudad fantasma. Las autopistas de los alrededores recordaban los domingos del a?o 1973, cuando en Alemania se suspendi¨® el tr¨¢fico para ahorrar gasolina. La imagen de las damas Laura Bush y Doris K?pf, la esposa del canciller Gerhard Schr?der, en la catedral de Maguncia era digna de una pel¨ªcula de ciencia-ficci¨®n. Acompa?adas del obispo, cardenal Karl Lehman, y un par de cl¨¦rigos, o tal vez sacristanes, las dos damas tomaron asiento en la gigantesca nave central de la catedral vac¨ªa, mientras el ¨®rgano atronaba con la Tocata y fuga en re menor de Johann Sebastian Bach.
El cronista de la cadena de televisi¨®n de noticias N 24 relataba que hab¨ªa sufrido 15 controles policiales. Una presentadora de la primera cadena p¨²blica alemana (ARD) reprim¨ªa a duras penas su indignaci¨®n al explicar a los televidentes que no pod¨ªan emitir el programa previsto porque el servicio secreto hab¨ªa encerrado a sus c¨¢maras en un cuarto, a pesar de las credenciales.
Unos 5.000 manifestantes recorrieron Maguncia en forma pac¨ªfica con las habituales pancartas de "Bush, el asesino numero 1" y el eslogan de la convocatoria: "?Bush, no eres bienvenido!". Claro, que Bush ni se enter¨®. Otro par de manifestantes de la organizaci¨®n ecologista Greenpeace probaron suerte e intentaron acercarse a Maguncia por el Rin a bordo de unas lanchas con unas pancartas sobre cuestiones relacionadas con el clima. Fracasaron; unas barcas de la polic¨ªa los interceptaron y los pusieron a buen recaudo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.