Zapatero se reunir¨¢ en Par¨ªs con Schr?der, Chirac y Putin

El presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, parece decidido a echar el resto en la campa?a del refer¨¦ndum y, entre otras cosas, quiere explotar su imagen de estadista. El palacio del El¨ªseo confirm¨® ayer que el 18 de marzo, el presidente del Gobierno espa?ol, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero; el canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, y el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, viajar¨¢n a Par¨ªs para cenar con el jefe del Estado franc¨¦s, en lo que bien pudiera interpretarse como el primer acto de relevancia de la campa?a en favor de la Carta Magna europea.

Los cuatro l¨ªderes, que parecen haber decidido unificar sus encuentros a tres bandas, tienen en com¨²n su oposici¨®n a la invasi¨®n de Irak y su pretensi¨®n de contrapesar el unilateralismo de Washington. Seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas francesas, la agenda del encuentro incluye la crisis de L¨ªbano y las presiones internacionales contra Siria para que retire sus tropas, y el contencioso por el desarrollo de tecnolog¨ªa nuclear en Ir¨¢n.

El resultado del refer¨¦ndum del 29 de mayo ser¨¢, sin duda, la piedra de toque del segundo mandato de Chirac en el El¨ªseo y establecer¨¢ tambi¨¦n la capacidad de maniobra del presidente para influir en su sucesi¨®n o, incluso, para volver a ser candidato a la jefatura del Estado, lo que no puede descartarse por muchas razones, entre otras por los problemas que tiene pendientes con la justicia de su ¨¦poca de alcalde de Par¨ªs, de los que ahora le protege su inmunidad como presidente.

El actual l¨ªder de la UMP, Nicolas Sarkozy, aspira a suceder a Chirac en la presidencia, aunque no sea el delf¨ªn preferido por el actual inquilino del El¨ªseo, con el que mantiene una relaci¨®n muy tensa. Con vistas al refer¨¦ndum Sarkozy se encuentra en una situaci¨®n compleja; una derrota del s¨ª no le conviene, puesto que har¨¢ campa?a a favor, pero una victoria muy ajustada podr¨ªa beneficiarle: descartar¨ªa a Chirac y eliminar¨ªa a sus protegidos de la carrera por la presidencia de 2007. En 1992, Maastricht se aprob¨® por unas d¨¦cimas.