Guti¨¦rrez Arag¨®n rueda en La Habana 'Una rosa de Francia'
Jorge Perugorr¨ªa interpreta a un villano seductor y perverso en los a?os 40 y 50
Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n repite tema cubano. El cineasta espa?ol ha comenzado el rodaje en La Habana de Una rosa de Francia, una pel¨ªcula de aventuras ambientada antes de la revoluci¨®n y protagonizada por Jorge Perugorr¨ªa, que encarna a un villano seductor, Sim¨®n, que dirige dos negocios de mala cala?a en la Cuba de entonces: el tr¨¢fico con personas hacia Estados Unidos y una refinada casa para educar "se?oritas". Comparte papeles principales con el joven actor espa?ol ?lex Gonz¨¢lez (Segundo Asalto, de Daniel Cebri¨¢n) y la cubana Ana Celia de Armas, de 16 a?os.
En realidad, Una rosa de Francia es el primer filme que Guti¨¦rrez Arag¨®n rueda en la isla, pues Cosas que dej¨¦ en La Habana (1997), que narra la historia y peripecias de varios emigrantes cubanos, se realiz¨® en Espa?a. Arag¨®n vuelve a colaborar ahora con parte de aquel equipo cubano: el guionista Senel Paz (Fresa y chocolate), la actriz Broselianda Hern¨¢ndez y Jorge Perugorr¨ªa.
"No sabr¨ªa definir el g¨¦nero de la pel¨ªcula, lo que s¨ª est¨¢ claro es que es una historia escrita para Perugorr¨ªa, que para m¨ª tiene una mezcla extra?a de seducci¨®n y perversidad, de cinismo y ternura, que lo hace muy atrayente como actor", afirma Arag¨®n.
Sim¨®n es un personaje con pocos escr¨²pulos, lo mismo abandona a emigrantes ilegales en un cayo despu¨¦s de haberles cobrado por llevarlos a Estados Unidos, que trae a jovencitas del campo a La Habana para casarlas con se?ores mayores y adinerados. "En cierto sentido, la pel¨ªcula tiene un aire perverso, pues aunque las chicas son las v¨ªctimas y los verdugos son Sim¨®n y los caballeros adinerados, existe una enorme complicidad entre todos", considera el realizador.
Para Perugorr¨ªa, Sim¨®n es "un t¨ªpico personaje de la picaresca cubana, un hombre ingenioso y a la vez un bandido sin moral, com¨²n en aquella Habana que recrea la pel¨ªcula", ambientada en un momento impreciso entre los a?os cuarenta y cincuenta. Una rosa de Francia ha posibilitado el reencuentro de Guti¨¦rrez Arag¨®n y Senel Paz despu¨¦s de Cosas que dej¨¦ en La Habana, y confiesa sentirse muy a gusto: "Manolo y Senel me conocen bien. Han construido un personaje que es como una especie de traje: s¨®lo tengo que venir y pon¨¦rmelo y parece que lo he llevado toda la vida", confiesa el actor.
La pel¨ªcula, una coproducci¨®n entre el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematogr¨¢fica y Tornasol, est¨¢ en su tercera semana de rodaje, que concluir¨¢ el 16 de abril. Las calles de La Habana Vieja y Centro Habana, el Museo de Artes Decorativas, los jardines de La Tropical, as¨ª como las fortalezas coloniales de El Morro y La Caba?a son algunas de las localizaciones del filme, cuyo director de fotograf¨ªa es Alfredo Fern¨¢ndez.
Para ?lex Gonz¨¢lez, se trata de su segundo trabajo y le ha pasado algo parecido que a su personaje, Andr¨¦s, un joven que llega a La Habana con muchas ilusiones y deseos de triunfar. "Se une a Sim¨®n, pero al final le puede su nobleza, su buena fe y el amor". En definitiva, Una rosa de Francia, que toma su nombre de la famosa canci¨®n, no es otra cosa que una historia cubana de toda la vida.
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