"El PP sigue instalado en su peor pasado y en la crispaci¨®n"
Jos¨¦ Blanco (Palas de Rei, Lugo, 1962) es el estratega electoral del PSOE, adem¨¢s de su secretario de Organizaci¨®n. Hace cinco a?os era un diputado de un partido que se hund¨ªa. Ahora lo dirige y es uno de los colaboradores m¨¢s cercanos de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Cree que en un a?o han cambiado sobre todo la forma de gobernar.
Pregunta. A un a?o de la victoria electoral, ?c¨®mo recuerda esa ¨²ltima semana fren¨¦tica?
Respuesta. D¨ªas antes del atentado ve¨ªamos que se intensificaba el cambio. El 11 de marzo lo aceler¨® todo. Pronto comprendimos que los ciudadanos se estaban rebelando contra la forma de gobernar del PP, y no era la primera vez.
P. ?Por qu¨¦ crec¨ªa el PSOE en expectativas durante la campa?a?
"Si alguien despertara hoy tras 12 meses en coma, no reconocer¨ªa la pol¨ªtica espa?ola"
"Nosotros nos parecemos a Espa?a, que es plural y diversa"
R. Porque el proyecto socialista, su l¨ªder y su equipo tuvieron m¨¢s visibilidad en los medios, que antes lo hab¨ªan ocultado, sobre todo los p¨²blicos. Exist¨ªa una gran contradicci¨®n: la sociedad espa?ola, tolerante, moderna y pacifista, ten¨ªa un Gobierno autoritario, antiguo y que nos meti¨® en una guerra. Por eso cuaj¨® nuestro Merecemos una Espa?a mejor.
P. ?Y la campa?a de Rajoy?
R. Aznar lo dijo claro: cuando se sale a empatar se pierde. El PP dio por hecho que ganaba antes de que los ciudadanos votaran.
P. ?El atentado les apuntal¨®?
R. Fue la gesti¨®n que hizo el Gobierno, no tanto el atentado en s¨ª, lo que hizo cristalizar el recuerdo que la gente ten¨ªa de las mentiras del PP. Y moviliz¨® a una parte del electorado, es evidente.
P. Hace cinco a?os era diputado de un partido que se hund¨ªa. ?C¨®mo vive el vuelco?
R. El primer d¨ªa que llegu¨¦ aqu¨ª [a la sede central en Ferraz] me pregunt¨¦ si ser¨ªa capaz de hacerlo. Hab¨ªamos despertado mucha ilusi¨®n. ?ramos desconocidos, nos miraban con lupa, pero los resultados est¨¢n a la vista.
P. ?Han cubierto las expectativas del primer a?o?
R. Han cambiado muchas cosas. Empezando por la forma de gobernar, que ahora se hace desde el di¨¢logo y el respeto a las formas. Pero lo que m¨¢s ha cambiado es el estado de ¨¢nimo de la sociedad. Hemos sustituido la crispaci¨®n por el optimismo. Si alguien despertara hoy tras haber pasado 12 meses en coma, no reconocer¨ªa la pol¨ªtica espa?ola.
P. ?Es lo de Alfonso Guerra: "A Espa?a no la va a conocer ni la madre que la pari¨®"?
R. No, esta vez Espa?a no se reconoc¨ªa a s¨ª misma.
P. ?Y en qu¨¦ han fallado?
R. Ha habido errores. El Gobierno ha rectificado y no ha pasado nada. Cuando se concedi¨® una medalla a Jos¨¦ Bono el propio ministro de Defensa la devolvi¨®.
P. Pero la crispaci¨®n no ha desaparecido. ?Por qu¨¦?
R. Porque la oposici¨®n sigue instalada en su peor pasado. Siguen pensando que la crispaci¨®n es la mejor f¨®rmula para hacer oposici¨®n. No me gusta dar lecciones, pero deber¨ªan mirar lo que hicimos los dem¨¢s, una oposici¨®n ¨²til que se compromete en los temas de inter¨¦s general. Y nunca pierde el respeto, como ellos en estos d¨ªas, con los insultos contra Gregorio Peces-Barba, que por encima de todo es un dem¨®crata. El PP no encuentra su camino, s¨®lo genera ruido.
P. ?Pudo ser un error nombrar a Peces-Barba sin consultar al PP?
R. Nunca el PP hab¨ªa consultado con nosotros el nombramiento de un alto cargo. Nada justifica su actitud con una persona de ese prestigio e incluso bondad.
P. ?Ese ruido puede dificultar su estrategia? No se podr¨¢n hacer algunas reformas sin el PP.
R. Pueden bloquearlas por inter¨¦s partidista. Alg¨²n d¨ªa tendr¨¢n que decir por qu¨¦ est¨¢n instalados en el inmovilismo. Hemos propuesto crear una comisi¨®n para acordar las reformas. Pero nos hemos encontrado con excusas, cada d¨ªa una. Primero quisieron decidir los nombres de nuestra delegaci¨®n.
P. ?Pensaron en cambiarlos?
R. Est¨¢bamos abiertos. Pero ellos no. Luego vino otra excusa: quer¨ªan conocer antes los temas a tratar. Y lo ¨²ltimo que nos pidieron es retirar el plan Patxi L¨®pez. Lo que encubre esto es que en la reuni¨®n del 14 de enero con Zapatero, Mariano Rajoy abandon¨® por un d¨ªa el marcaje del grupo radical del PP. Pero ya ha vuelto sobre sus pasos, parece que piensa lo mismo que los dem¨¢s.
P. ?Cree que sigue siendo pol¨ªticamente interesante tratar de demostrar que el PP minti¨®?
R. Eso lo han juzgado los ciudadanos, y se ha pasado la p¨¢gina.
P. ?C¨®mo van a afrontar los tres a?os que quedan? ?Teme por la estabilidad?
R. Hemos demostrado que cumplimos nuestra palabra desde el primer momento, retirando las tropas de Irak. La experiencia de este a?o muestra una estabilidad a prueba de bomba. Pero el Gobierno sabe que hay que negociar.
P. ?Cree que sus socios de izquierdas apoyar¨¢n tambi¨¦n la pol¨ªtica econ¨®mica del PSOE? ?Ha visto las cr¨ªticas a la pol¨ªtica fiscal?
R. La pol¨ªtica econ¨®mica est¨¢ creando empleo y eso es clave para la izquierda. La reforma fiscal a¨²n no hemos empezado a discutirla pero hay espacio para entenderse, sobre todo en pol¨ªticas sociales.
P. ?Cala el mensaje de la debilidad del Gobierno, especialmente con los sustos de ERC?
R. Creo que sucede lo contrario. Las encuestas que se conocen, y otras de las que disponemos nosotros, son un¨¢nimes: quien est¨¢ m¨¢s d¨¦bil cada d¨ªa es el PP. Estamos muy satisfechos con nuestros socios, con su compromiso y lealtad. De hecho estamos trabajando para ampliar nuestros acuerdos.
P. ?Puede contribuir el enfrentamiento interno, especialmente con Maragall, a la imagen de debilidad?
R. Enfrentamiento es lo que existe entre Piqu¨¦ y Mayor. Nosotros nos parecemos a Espa?a, que es plural y diversa. Eso los ciudadanos lo entienden cada vez mejor.
P. ?La divisi¨®n pol¨ªtica va a seguir?
R. Nos hubiera gustado tener una oposici¨®n con la que se pudiera hablar. Creo que los ciudadanos les van a dar una respuesta clara en Euskadi y en Galicia. El PP deber¨¢ reflexionar despu¨¦s.
P. ?Sostiene que cambiar¨ªan despu¨¦s de un golpe electoral?
R. No s¨¦, porque si hubieran interpretado bien los resultados de las generales no estar¨ªan as¨ª.
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