Los polic¨ªas declaran que el etarra Loran dijo que iba a avisar de la bomba del tren de Chamart¨ªn

El juicio contra los dos supuestos etarras acusados de colocar una maleta bomba en el tren Intercity Ir¨²n-Madrid en la Nochebuena de 2003 comenz¨® ayer en la Audiencia Nacional. Los polic¨ªas que intervinieron como instructor y secretario en el atestado de las detenciones de Gorka Loran y Garikoitz Arruarte aseguraron en la vista que el primero les confes¨® que sab¨ªa que el CD que llevaban para avisar del atentado no funcionaba, pero que pensaba alertar de la bomba cinco minutos antes de la llegada del tren a la estaci¨®n de Chamart¨ªn y 45 minutos antes de la explosi¨®n, para que la gente pudiera desalojarla.

A pesar de estos testimonios, de la declaraci¨®n de Loran en el sumario y de que por el momento no se han aportado m¨¢s pruebas, el fiscal Ignacio Gordillo considera que los acusados cometieron 184 asesinatos en grado de tentativa -tantos cr¨ªmenes como personas iban en el tren- por los que pide 2.760 a?os de prisi¨®n. En total, reclama 2.788 a?os para cada uno de ellos al sumar los delitos de pertenencia a banda armada, terrorismo y tenencia il¨ªcita de armas y municiones. El m¨¢ximo de cumplimiento, en caso de condena, son 40 a?os.

Loran dijo ayer que no reconoc¨ªa al tribunal y no quiso contestar a ninguna pregunta; sin embargo, Garikoitz Arruarte reconoci¨® que pertenece a ETA y trat¨® de justificar la lucha armada. "Nos podr¨¢n condenar a 3.000 a?os de c¨¢rcel, podr¨¢n llenar las c¨¢rceles de militantes vascos....". En ese momento fue interrumpido por el presidente del tribunal, Javier G¨®mez Berm¨²dez, que le espet¨®: "Tiene derecho a contestar, pero no a soltar un mitin".

"Podr¨¦ contextualizar la pregunta...", replic¨® Arruarte. El presidente le volvi¨® a cortar: "Aqu¨ª no se contextualizan m¨¢s que las preguntas del fiscal". "Entonces no voy a declarar m¨¢s", concluy¨® el etarra.

Los testigos, fundamentalmente los polic¨ªas que detuvieron a los presuntos terroristas, pusieron de manifiesto c¨®mo se hab¨ªan resistido a la detenci¨®n, c¨®mo les hab¨ªan ocupado armas y las maletas con explosivos. A Arruarte, una en el momento de su detenci¨®n en San Sebasti¨¢n. La otra, en el tren, que fue desactivada en Burgos. Los agentes explicaron que Loran se?al¨® que pensaba avisar "de propia voz" de la colocaci¨®n de la bomba.

Precisamente el que los etarras no quer¨ªan cometer con esta acci¨®n una matanza indiscriminada como el 11-M fue destacado por el juez Baltasar Garz¨®n en su libro Un mundo sin miedo, lo que le vali¨® la denuncia de Gordillo y del fiscal jefe Fungairi?o, aunque finalmente fue archivada.