Detenido en Francia con explosivos el subjefe de los 'comandos' de ETA

La detenci¨®n ayer en Francia de Joseba Segurola Querejeta, presunto lugarteniente del jefe de los comandos de ETA, Garikoitz Aspiazu, Txeroki, no s¨®lo frustra una cadena de inminentes atentados al ser requisada en la operaci¨®n una mochila con explosivos, sino que la organizaci¨®n pierde a uno de los dise?adores de las campa?as terroristas. Junto a ¨¦l, fue arrestada una etarra con un perfil m¨¢s bajo, Miren Itxaso Zaldua Iriberri, ex militante de Jarrai. La operaci¨®n es fruto de una paciente investigaci¨®n francesa apoyada por la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n espa?ola.

En Lannemezan, a 40 kil¨®metros de Tarbes (Altos Pirineos), una investigaci¨®n policial puso punto final ayer al sanguinario curr¨ªculo de Segurola, subjefe de los comandos etarras. Su detenci¨®n no fue ni fruto de la casualidad, ni de los fruct¨ªferos papeles de Susper, sino de una laboriosa tarea de seguimientos y cruces de datos de la Divisi¨®n Nacional Antiterrorista de la Polic¨ªa Judicial francesa y la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n. El arresto se produjo cuando los dos etarras se dirig¨ªan en sendos coches a un garaje que alquilaban en la localidad y que vigilaba la polic¨ªa.

El dirigente etarra, de 29 a?os, armado con una pistola Sig Sauer B-226 de nueve mil¨ªmetros con munici¨®n, fue sorprendido a bordo de un Citr?en Picasso de color gris. Su compa?era, de 33 a?os, armada con una pistola checa con munici¨®n, fue capturada a bordo de un Renault Clio. El coche de ella ocultaba un arsenal ambulante con destino a inminentes atentados: una mochila con varios tupperware que conten¨ªan explosivos, placas falsas de matr¨ªculas par+a colocar a los veh¨ªculos que fueran robados para cometer las acciones terroristas y herramientas para forzar los coches. Ambos portaban documentaci¨®n falsa, los autom¨®viles que conduc¨ªan eran robados y llevaban matr¨ªculas falsas.

Segurola, natural de Azpeitia (Guip¨²zcoa), est¨¢ huido de Espa?a desde 2001, cuando la polic¨ªa desarticul¨® en Guip¨²zcoa el comando Aranba con el que presuntamente colaboraba desde un subgrupo denominado comando Haitza. El 19 de octubre de 2001 la polic¨ªa registr¨® su domicilio tras intentar detenerlo sin ¨¦xito.

La Comisar¨ªa General de Informaci¨®n considera que Segurola era ahora el lugarteniente de Txeroki, el jefe de los comandos de ETA, y desde tal puesto dirig¨ªa las c¨¦lulas armadas de la banda. Segurola fue, precisamente, quien en febrero de 2004 proporcion¨® una furgoneta-bomba -la caravana de la muerte que el PP ha intentado sin ¨¦xito vincular con el 11-M- con 500 kilos de explosivos al comando Gaztelu, seg¨²n fuentes policiales. La Guardia Civil la intercept¨® en un control en Ca?averas (Cuenca) cuando la transportaban a Madrid para hacerla estallar una semana antes de las elecciones del 14-M.

Segurola hab¨ªa escapado horas antes de la llegada de la polic¨ªa al tener noticia del arresto de los miembros liberados (fichados por la polic¨ªa y con sueldo) del comando Aranba que preparaban un atentado contra concejales de Eibar. El comando Haitza figuraba en una lista intervenida al dirigente de ETA Javier Garc¨ªa Gaztelu, Txapote, detenido en Francia a principios de 2001. La c¨¦lula etarra ten¨ªa en su poder seis kilos de explosivos y material para la confecci¨®n de bombas. Segurola es relacionado en aquella etapa con la voladura de la discoteca Universal, en la localidad navarra de Lacunza, el 28 de septiembre de 2001.

Zaldua, donostiarra de 33 a?os, milit¨® en la organizaci¨®n radical juvenil Jarrai y asisti¨® al congreso de este grupo en 1992 en Bilbao, donde fue identificada por los agentes, pero no se le conoc¨ªan v¨ªnculos con ETA.