M¨¢quina de destrucci¨®n masiva
En un entorno selv¨¢tico como escenario real, el equipo de Hideo Kojima ofrece uno de los mayores espect¨¢culos 3D que ha dado PS2
S¨®lo Hideo Kojima ha sido capaz de unir carisma y enemigos. Es la ¨²ltima entrega de Metal Gear Solid en la que participa, pero ha repetido y superado la f¨®rmula original. En toda la saga, desde que apareci¨® en el 1987 en MSX en dos dimensiones y 16 colores, la atm¨®sfera en que se sumerge al jugador despierta empat¨ªas con el protagonista y profundo odio hacia los responsables de hacer el mal. Incluso la m¨¢quina de destrucci¨®n masiva, que no deja de ser eso, un robot y encima virtual, llamada Metal Gear recibe las iras y el desprecio sentido de quien se enfrenta al reto. Kojima y su equipo (Yoji Shinkawa en el dise?o de personajes, Harry Gregson-Williams a las partituras y Motosada Mori como consejero militar) consiguen una comuni¨®n creativa que arrastra a millones de seguidores tras las aventuras del agente infiltrado Snake.
Metal Gear Solid 3: Snake Eater
Desarrolla: Konami
Distribuye: Konami
Plataforma: PlayStation 2
G¨¦nero: Acci¨®n
Recomendado:
Mayores de 16 a?os
Precio: 60 euros
www.metalgearsolid.com
La historia en Metal Gear Solid 3: Snake Eater precede a todas las entregas anteriores y quien la protagoniza no es otro que Big Boss, soldado original desde el que se clon¨® a Solid Snake. En plena guerra fr¨ªa durante los a?os 60 el cient¨ªfico ruso Sokolov ha sido secuestrado para que construya contra su voluntad el primero de los Metal Gear, que en esta ocasi¨®n recibe el nombre de Shagohod. La acci¨®n vuelve a un escenario original de la serie: la selva. No es fruto de la casualidad, si no del capricho de Konami para llevar a la m¨¢quina de Sony a la m¨¢xima cumbre visual que es capaz de alcanzar antes de que llegue la tercera generaci¨®n de PlayStation.
T¨¦cnicas de representaci¨®n 3D jam¨¢s utilizadas se invocan para dotar al t¨ªtulo de un poco m¨¢s de realismo. Destaca el mapeado de entorno aplicado a los personajes, que se utiliza de forma original para jugar con las sombras que recibe el cuerpo de ¨¦stos. Frondosa, h¨²meda, oscura y cegadora a la vez, as¨ª es la jungla de Kojima. Un escenario perfecto para llevar a cabo las tareas de infiltraci¨®n y supervivencia.
Jack, nombre real de Snake Eater, debe alimentarse bien con aquello que la madre naturaleza le ofrezca. No puede iniciar la misi¨®n cargado con una enorme mochila de provisiones, con lo que ser¨¢ necesario cazar peces, p¨¢jaros, cangrejos, conejos e incluso serpientes para no morir de inanici¨®n. La fruta y las provisiones de los campamentos enemigos sirven tambi¨¦n para saciar el hambre.
La supervivencia pasa tambi¨¦n por recoger aquellas plantas medicinales que en el futuro le puedan servir para curarse una infecci¨®n o cortar una descomposici¨®n inoportuna. Las posibilidades de diagn¨®stico y autocuraci¨®n son variadas, llegando a extremos como tener que practicarse una dolorosa extracci¨®n de bala. Hay que ir con cuidado con las plantas venenosas, ¨²tiles para preparar armas pero letales en caso de ingesti¨®n.
En el campo de la infiltraci¨®n hay que convertirse en el hombre invisible, ya sea eligiendo el traje de camuflaje ideal para cada ocasi¨®n o disfraz¨¢ndose de algo que pase totalmente desapercibido. Existen uniformes espec¨ªficos para la selva, marrones para zonas rocosas, batas de investigador ruso y si en la aventura no se da con el ropaje deseado, siempre se puede bajar de Internet.
Nada mejor que no levantar sospechas para acercarse a los objetivos y enfrentarse a los soldados totalmente desprevenidos. Con estas t¨¦cnicas se puede llegar hasta soltar el aliento en el cogote del enemigo sin que ¨¦ste se percate de nuestra presencia.
En ese momento entra en juego otra novedad, el Close Quarter Combat, una serie de movimientos de ataque a corta distancia y que sirven para rebanar un cuello o para sacar informaci¨®n del guardia de turno.
Se trata de la ¨²ltima joya con el sello Kojima.
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