Koselleck defiende el rigor del lenguaje para contar la verdad de la historia
El gran fil¨®sofo alem¨¢n explica c¨®mo estudia los resortes de la memoria en las sociedades
Reinhart Koselleck ha trabajado con sumo rigor con las palabras para mostrar la importancia que tienen los conceptos que maneja la historia y las categor¨ªas que utilizamos para dar sentido al mundo. Disc¨ªpulo directo de Gadamer, conoce el enorme peso de cada interpretaci¨®n al volver la vista atr¨¢s y, con su noci¨®n de "la contemporaneidad de lo no contempor¨¢neo", alerta sobre la compleja relaci¨®n entre presente, pasado y futuro. En Madrid ha disertado sobre la historia de los conceptos pol¨ªticos: "Lo que ocurre antes de la historia es tan importante como la historia misma".
"No hay que olvidar que adem¨¢s de que las propias palabras cambien, ellas mismas producen cambios", afirma el fil¨®sofo
"La mayor¨ªa de cuantos crecieron despu¨¦s de la ¨¦poca de Hitler est¨¢n convencidos de la culpa moral del pueblo alem¨¢n"
Reinhart Koselleck (G?rlitz, 1923) hizo un mont¨®n de fotos de las estatuas ecuestres que encontr¨® en Madrid, donde dict¨® una conferencia sobre la historia de los conceptos pol¨ªticos. Lo hizo en el Centro de Estudios Pol¨ªticos y Constitucionales y fue presentado por su director, Jos¨¦ ?lvarez Junco, y por Javier Fern¨¢ndez Sebasti¨¢n, catedr¨¢tico de Historia del Pensamiento Pol¨ªtico en la Universidad del Pa¨ªs Vasco, que lo invit¨® a Espa?a.
"Historiador, histori¨®grafo, histori¨®logo... todos los ¨¢ngulos, todas las perspectivas del concepto de historia han sido exploradas a fondo por el profesor Koselleck", dijo este ¨²ltimo, que reconoci¨® la importancia de una obra que ha abierto nuevos caminos y que ha permitido afinar los instrumentos metodol¨®gicos (los conceptos, las palabras) que sirven para reconstruir la historia vivida y para enfrentarse a "la historia en tanto que saber con pretensiones de verdad".
"Cuando se habla de la interpretaci¨®n de las cosas del pasado", dijo Reinhart Koselleck durante una entrevista que tuvo lugar antes de su conferencia, "hay que tener en cuenta que determinadas palabras significaron en otro tiempo cosas distintas de las que significan ahora. El tiempo va transformando cada concepto. Pero hay casos, y ocurre con muchos t¨¦rminos pol¨ªticos, que se transforman tambi¨¦n porque cambian las condiciones sociales, cambia el mundo, cambian las ideas". El comunismo, por ejemplo, dijo. "Signific¨® algo determinado y ahora puede significar otra cosa, pero es que a la propia evoluci¨®n de esa palabra hay que a?adirle los cambios de los propios partidos comunistas, que han modificado sus programas, se han abierto a otras corrientes, se han hecho m¨¢s tolerantes". El historiador a?ade, para subrayar que las palabras y las cosas est¨¢n muchas veces ¨ªntimamente imbricadas, que no hay que olvidar "que adem¨¢s de que las propias palabras cambien, ellas mismas producen cambios".
En Heidelberg, donde estudi¨® despu¨¦s de haber pasado por la Universidad de Bochum y antes de vincularse definitivamente a la de Bielefeld (donde est¨¢ desde 1973), Reinhart Koselleck fue disc¨ªpulo de Hans-Georg Gadamer, uno de los fil¨®sofos m¨¢s influyentes del siglo XX, y fueron los estudios de hermen¨¦utica de su maestro el caldo de cultivo en el que se aliment¨® inicialmente su imponente obra. Javier Fern¨¢ndez Sebasti¨¢n destac¨® el otro d¨ªa entre sus libros Cr¨ªtica y crisis (su tesis de doctorado de 1959 y traducida en Espa?a en 1965), Futuro pasado (1979, que Paid¨®s public¨® en 1993), y "el monumental Diccionario de conceptos hist¨®ricos fundamentales en lengua alemana, de casi 7.000 p¨¢ginas, cuya publicaci¨®n se extiende a lo largo del ¨²ltimo cuarto del siglo XX". De esta ¨²ltima s¨®lo se ha traducido la entrada Historia (en Trotta, en 2004). Otros t¨ªtulos que han aparecido en Espa?a de Koselleck, que se ha ocupado como historiador sobre todo de Prusia y la Ilustraci¨®n, son la reuni¨®n de piezas suyas con otras de Gadamer (Paid¨®s, 1997), Los estratos del tiempo: estudios sobre la historia (Paid¨®s, 2001) y Aceleraci¨®n, prognosis y secularizaci¨®n (Pre-Textos, 2003).
"Trabajo en varios frentes", cuenta Koselleck, que publicar¨¢ dentro de poco un nuevo t¨ªtulo sobre los conceptos que maneja la historia. "Me interesa estudiar qu¨¦ ocurre con esas palabras que manejan los historiadores, c¨®mo cambian y qu¨¦ dicen en distintos momentos. He estudiado, por ejemplo, el t¨¦rmino de culpa". Pero Koselleck habla tambi¨¦n de otro campo de investigaci¨®n, que explica su af¨¢n por fotografiar tanta estatua. "Me ocupo tambi¨¦n de la manera en que se mantiene viva la memoria de la gente de otras ¨¦pocas, las formas en que se recuerda a los protagonistas que lucharon en tantas batallas. En ese terreno se puede hablar de una 'democratizaci¨®n de la muerte'. Antes s¨®lo se recordaba a los grandes monarcas, ahora tambi¨¦n se rinde tributo a los soldados an¨®nimos. Sigo de cerca y me afano por saberlo todo de las estatuas que se levantan para recordar a los que ya no est¨¢n. Hay ocasiones en que alguien que hab¨ªa sido olvidado vuelve a rescatarse. Aqu¨ª, en Espa?a, ocurri¨® con Carlos III".
Cambian las palabras, cambian las interpretaciones, cambian las mentalidades, cambia el mundo. De todo eso se ocupa Koselleck. Cuanto dec¨ªan Hitler y los grandes jerarcas nazis, "todas esas grandes palabras hoy s¨®lo producen risa, una distancia ir¨®nica, cierta verg¨¹enza ajena".
"Yo no sab¨ªa lo que estaba ocurriendo en Auschwitz, aunque eso no sea ninguna disculpa", dice Koselleck. Las heridas de la historia alemana del siglo XX siguen ah¨ª. Koselleck lo sabe de manera muy cercana. Su padre fue represaliado por el r¨¦gimen de Hitler, ¨¦l fue reclutado durante la II Guerra Mundial como soldado y, al terminar, internado en un campo de concentraci¨®n sovi¨¦tico. "La mayor¨ªa de cuantos crecieron despu¨¦s de la ¨¦poca de Hitler est¨¢n convencidos de la culpa moral del pueblo alem¨¢n", explica. "Casi no hay discusi¨®n al respecto: los cr¨ªmenes nazis fueron tan terribles que todo lo dem¨¢s pasa necesariamente a un segundo plano, e incluso es tan fuerte la sensaci¨®n de culpa que es muy dif¨ªcil para nosotros hablar de otros temas de ese periodo, como del sufrimiento del pueblo alem¨¢n durante los bombardeos aliados".
Lo que la historia reconstruye y lo que recuerda la gente. Koselleck ha visitado Espa?a poco despu¨¦s de que la retirada de la estatua de Franco de Nuevos Ministerios desencadenara la pol¨¦mica. "Durante la Guerra Civil espa?ola se pele¨® en muchos frentes, y hay que discutir y analizar y diferenciar lo que ocurri¨® en cada momento. No s¨®lo puede ser verdadera la versi¨®n de uno de los bandos, porque seguramente hubo horrores en los dos, y cada cual cuenta las cosas como las vivi¨® o seg¨²n las interpreta. No hay que olvidar, adem¨¢s, que no hab¨ªa muchos dem¨®cratas entonces y que los republicanos se encontraron peleando contra Franco pero con mucho desorden".
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