Mucho m¨¢s que la cuenta de resultados

Una empresa es por definici¨®n una organizaci¨®n con fines lucrativos. ?Es, por tanto, obtener el mayor beneficio posible su ¨²nica responsabilidad? La Comisi¨®n Europea impulsa desde hace algunos a?os un debate sobre la responsabilidad social de las empresas (RSE) y su contribuci¨®n, real y deseada, al desarrollo europeo. Debate que se repasa en La Responsabilidad Social de las empresas y los nuevos desaf¨ªos de la gesti¨®n empresarial. Un estudio dirigido por Tom¨¢s Perdiguero, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid y miembro del Grup d'Investigaci¨® sobre la RSE de la Universitat de Val¨¨ncia (iGrupo RSE), y Andr¨¦s Garc¨ªa Reche, profesor de Econom¨ªa Aplicada y director del iGrup RSE. El libro recoge una plural lista de "lecturas y de posiciones" en torno a la cuesti¨®n. Los textos, presentados como ponencias en unas jornadas organizadas por UGT y la Universitat de Val¨¨ncia a finales de 2003, incluyen contribuciones del actual ministro de Administraciones P¨²blicas, Jordi Sevilla, del secretario de Acci¨®n Sindical de UGT, Antonio Ferrer, o de Ana Encabo, secretaria auton¨®mica de Empleo de la Generalitat.

"Los consumidores empujan a la empresa a mejorar su conducta ante el mercado"

El libro recuerda que tras un periodo de notable dinamismo econ¨®mico es cada vez mayor el desequilibrio medioambiental, la brecha entre los pa¨ªses ricos y los "menos desarrollados" e incluso la que existe entre la remuneraci¨®n que perciben los grandes directivos y los trabajadores con menos ingresos en un mismo pa¨ªs. Un panorama complicado ante el cual parece obligado revisar el papel de los actores sociales y, en el caso de la empresa su contribuci¨®n al crecimiento colectivo. "El panorama del bienestar europeo requiere una nueva estrategia para su continuidad", resume Garc¨ªa Reche. M¨¢s concretamente, el libro explica, por ejemplo, que en el Consejo Europeo de Lisboa en 2000 se puso sobre la mesa la necesidad de apostar por una visi¨®n m¨¢s responsable de la gesti¨®n empresarial, "m¨¢s favorable a la creaci¨®n de empleo y a la calidad del trabajo frente a las estrategias de bajo coste y con una protecci¨®n social reducida". El debate, en realidad, refiere a c¨®mo mejorar la contribuci¨®n de las empresas al conjunto. Y trata de ir m¨¢s lejos de la pura acci¨®n social que practican muchas firmas y que ser¨ªa, en cualquier caso, s¨®lo un aspecto de esta cuesti¨®n.

La RSE requiere de las empresas una actitud respetuosa con el medio ambiente y los derechos humanos, una clara responsabilidad sobre sus productos o el establecimiento de "redes de confianza" con proveedores, clientes y accionistas.

El libro defiende que el objetivo es lograr un "pacto moral o compromiso social" entre sindicatos, organizaciones empresariales y poderes p¨²blicos, para hacer posible un mayor y mejor crecimiento. Pacto que contenga el establecimiento de un sistema cient¨ªfico consensuado que permita saber qui¨¦n es y qui¨¦n no socialmente responsable. Reglas de juego, en cualquier caso, en las que el consumidor tiene un papel fundamental. Perdiguero y Garc¨ªa Reche defienden que los "consumidores maduros" y las sociedades "cultas y desarrolladas" son las que "empujan incesantemente a la empresa a mejorar su conducta ante el mercado y, a la postre, ante la sociedad como un todo".

La reflexi¨®n de los dos investigadores deja claro que este cambio no es una utop¨ªa y que el reto es que lo que a priori parece un coste para la empresa acaba transform¨¢ndose en una ventaja competitiva. S¨®lo vista como tal, resumen los dos autores, triunfar¨¢ la RSE.

En Espa?a el debate sobre esta cuesti¨®n est¨¢ a¨²n en mantillas. Recientemente el Gobierno ha creado un foro de expertos en RSE (del que forman parte Perdiguero y Garc¨ªa Reche). El foro, cuyas reuniones ser prev¨¦n mensuales, tratar¨¢ de aportar documentos para el debate en la mesa de di¨¢logo social.