Futbolista de laboratorio
Nikon s¨®lo hace f¨²tbol. Su hermano tambi¨¦n es su entrenador. No va al colegio, su hermana es su profesora particular. La familia parece haber enfocado su futuro en torno al futuro futbol¨ªstico de su hijo. Desde luego, una situaci¨®n nada natural. Nikon parece un futbolista de laboratorio, un futbolista de probeta. Un experimento no exento de graves riesgos para el ¨®ptimo desarrollo del chico.
El ni?o se hace persona a trav¨¦s de la acci¨®n de la familia y de la escuela. El ni?o aprende de la relaci¨®n con otros ni?os, guiado y supervisado por los adultos. ?ste es el papel de la escuela. Aprende por inmersi¨®n. No s¨®lo aprende saberes acad¨¦micos. Sobre todo aprende a ser persona. Va interiorizando valores que construir¨¢n una ¨¦tica de comportamiento, aprende habilidades sociales que le ayudar¨¢n a relacionarse con otras personas, aprende a entender y reconducir sus emociones y las de los dem¨¢s, logra comprender que las cosas no son siempre como uno espera y desea, toma conciencia de que hay otros puntos de vista distintos al suyo, aprende a resolver los problemas cotidianos, aprende a trabajar en equipo y a ser solidario...
Para ser feliz es necesario un desarrollo personal arm¨®nico. Tambi¨¦n, para encontrar satisfacci¨®n y obtener ¨¦xito a nivel profesional es indispensable el equilibrio emocional y el desarrollo personal. Primero se es persona, despu¨¦s se es futbolista.
El individuo necesita de la persona para ser feliz. Pero, adem¨¢s, el futbolista necesitar¨¢ de la persona para encontrar ¨¦xito. El talento futbol¨ªstico cobra su sentido al servicio del equipo, y su expresi¨®n exige de habilidades personales que van m¨¢s all¨¢ de las deportivas.
Pero ?qu¨¦ pasar¨¢ con Nikon si su sue?o y el de su familia no se ve cumplido? ?Qu¨¦ pasar¨¢ si surge una lesi¨®n grave, si no sabe ser un buen compa?ero para poder sobrevivir en un vestuario, o si el experimento simplemente no da el resultado esperado? ?Pobre Nikon!
Este tipo de experimentos no tienen sentido en la sociedad de hoy, en la que incluso la educaci¨®n de los futuros pr¨ªncipes se ha socializado, es decir, se hace en una escuela, en compa?¨ªa de otros j¨®venes.
Desde luego, no tiene sentido este experimento atendiendo al desarrollo personal del chico. Pero tambi¨¦n genera mucha dudas desde el objetivo de aprender f¨²tbol. La t¨¦cnica ha de estar al servicio del juego, se aprende y mejora jugando, disfrutando con el juego. El talento supone el dominio del juego, no s¨®lo el dominio de los gestos t¨¦cnicos. ?Tiene claro el Valencia su modelo de ense?ar f¨²tbol? ?Encaja este experimento en su modelo de ense?anza-aprendizaje del f¨²tbol?
Jos¨¦ Carrascosa es psic¨®logo del deporte y especialista en f¨²tbol.
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