"Que nadie se llame a enga?o, porque no habr¨¢ m¨¢s regularizaciones"

La secretaria de Estado de Inmigraci¨®n y Emigraci¨®n, Consuelo Rum¨ª (Almer¨ªa, 1957), es la principal arquitecta de la normalizaci¨®n de inmigrantes que concluir¨¢ el pr¨®ximo s¨¢bado, d¨ªa 7. En esta entrevista despeja algunas dudas que han surgido en la recta final del proceso.

Pregunta. A cinco d¨ªas de la fecha de cierre, los empresarios han presentado m¨¢s de 520.000 solicitudes de regularizaci¨®n. ?Son muchas o son pocas?

Respuesta. M¨¢s de medio mill¨®n de empleos arrancados a la econom¨ªa sumergida es una cifra muy importante. Demuestra que acertamos con el proceso de normalizaci¨®n, no s¨®lo el Gobierno, sino sindicatos, empresarios, ONG y todos los que lo apoyaron. Y, desde luego, deja en evidencia a quienes anticiparon su fracaso. Van a emerger cientos de miles de nuevos trabajadores legales y tambi¨¦n de nuevos contribuyentes que, en su mayor¨ªa, antes trabajaban irregularmente. La cifra cumple las expectativas del Gobierno.

"No hay ninguna posibilidad de que el Gobierno prorrogue el plazo del proceso"

"Ya hemos resuelto el 30% de los expedientes presentados. Queremos terminar todos en julio"

P. ?Cabe alguna posibilidad de que el Gobierno ampl¨ªe el plazo en el ¨²ltimo momento?

R. Ninguna. ?ste es un proceso muy serio, sin precedentes, tanto en los requisitos que se han exigido como en el dispositivo preparado por la Administraci¨®n para gestionarlo. El plazo ha sido suficiente y viene determinado por el propio Reglamento de la Ley de Extranjer¨ªa. Si en lugar de tres meses hubiese sido de seis, o incluso de 12, tambi¨¦n al final se hubiese pedido su ampliaci¨®n. Estas cosas se plantean as¨ª, pero le puedo asegurar que si alguien no se acoge al proceso no habr¨¢ sido por falta de tiempo.

P. ?Seguro que no ampliar¨¢n el plazo? Porque ustedes ya cambiaron de criterio con el empadronamiento por omisi¨®n.

R. No cambiamos de criterio; sencillamente, recurrimos a una figura legal que se utiliza desde hace ocho a?os para que nadie se quedara fuera de la normalizaci¨®n por razones estrictamente burocr¨¢ticas, pero cumpliendo con todos los requisitos. Para tranquilidad de los ciudadanos, la solvencia de los criterios exigidos no ha variado un ¨¢pice, es plena. S¨®lo podr¨¢ acogerse a la normalizaci¨®n quien lleve en Espa?a desde antes del 8 de agosto, disponga de un contrato de trabajo y carezca de antecedentes penales.

P. ?Se dar¨¢n citas el pr¨®ximo s¨¢bado para que los empleadores presenten la documentaci¨®n en d¨ªas sucesivos?

R. El plazo determinado en cuanto a la duraci¨®n del proceso no es para conceder citas, sino para entregar la documentaci¨®n. El ¨²ltimo d¨ªa no habr¨¢ cita previa; se recoger¨¢n directamente las solicitudes.

P. ?Y qu¨¦ pasar¨¢ si a las nueve de la noche, hora de cierre, las oficinas de la Seguridad Social a¨²n no han podido atender a todos los que hacen cola?

R. Pues que seguir¨¢n abiertas hasta que todo el mundo haya sido atendido. Quiero pensar que comprometer un contrato con un trabajador es lo suficientemente importante como para que mucha gente no lo deje para las ¨²ltimas horas. Aun as¨ª, hemos reforzado el dispositivo y estamos preparados para resolver las incidencias. Hemos logrado que todo salga bien, contando, adem¨¢s, con mucha gente que ha arrimado el hombro: agentes sociales, ONG y otros colectivos cuyo esfuerzo, junto al de los funcionarios, quiero reconocer.

P. ?Cu¨¢ntos de los expedientes presentados han sido resueltos hasta ahora?

R. M¨¢s del 30%. La Administraci¨®n va acelerando la tramitaci¨®n a medida que dispone de un volumen significativo de solicitudes. Durante las pr¨®ximas semanas, y ya sin la carga a?adida de atender la llegada de solicitudes, el ritmo se acelerar¨¢ considerablemente. Nuestro objetivo es finalizar el trabajo en julio.

P. ?Y cu¨¢ntas altas en la Seguridad Social se han producido?

R. Son ya decenas de miles. Las altas en la Seguridad Social deben materializarse en el plazo de un mes desde que se concede la autorizaci¨®n provisional de residencia y trabajo. En las ¨²ltimas semanas se est¨¢ produciendo un crecimiento muy importante de ellas, y esperamos que se acelere en los pr¨®ximos d¨ªas. Murcia, Madrid, Barcelona y Alicante est¨¢n concentrando el mayor n¨²mero de altas. El modelo que hemos puesto en pr¨¢ctica conduce de manera inexorable al alta del trabajador. ?ste no ha sido un proceso para legalizar sin m¨¢s, como los anteriores, sino para hacerlo a partir de un empleo cierto, no ficticio.

P. ?Cu¨¢ntas altas espera que se produzcan al final?

R. Las de todas o pr¨¢cticamente todas las solicitudes aprobadas. No tiene l¨®gica que alguien estampe su firma en un contrato e informe a la Administraci¨®n de que quiere legalizar la situaci¨®n de un trabajador extranjero para, finalmente, no completar el tr¨¢mite. Ser¨ªa tanto como si nos dijera que mantiene una situaci¨®n fuera de la legalidad y, por tanto, nos facilitar¨ªa la tarea de control.

P. ?Qu¨¦ pasar¨¢ despu¨¦s de este proceso con quienes no logren obtener papeles y con quienes sigan entrando irregularmente en Espa?a? ?Habr¨¢ que hacer otra regularizaci¨®n dentro de un a?o?

R. No, no. Este proceso pone orden en una situaci¨®n ca¨®tica con la que nos encontramos al llegar al Gobierno. Pero que nadie se llame a enga?o, porque no habr¨¢ m¨¢s regularizaciones. En el Reglamento de Extranjer¨ªa existen otras posibilidades de regularizaci¨®n vinculadas al arraigo, pero no deben generarse falsas expectativas: vamos a combatir la inmigraci¨®n irregular en todos los ¨¢mbitos, desde los puntos de entrada en el territorio hasta el empleo. La Inspecci¨®n de Trabajo pasar¨¢ a desempe?ar un papel esencial contra esa lacra del empleo ilegal que tan cara sale a todos los ciudadanos y que ha sido el verdadero efecto llamada durante todos estos a?os.