El Consell estaba fenomenal

Lo hab¨ªa diagnosticado Francisco Camps el martes en la Primera con los dedos ¨ªndice empinados como signos de exclamaci¨®n: "en el partido las cosas van fenomenal". Y la prueba es que algunos consejeros ayer ni se miraron tras acceder al hemiciclo por la alfombra roja reci¨¦n aspirada. Alicia de Miguel entr¨® muy azul p¨¢lida por la derecha, que es por donde acostumbra la oposici¨®n, como si esquivara el fuego amigo. El presidente hizo el pase¨ªllo metiendo miedo con el faltriquero Gerardo Camps a su derecha, el resuello de Rafael Blasco en el cogote y el forense Alejandro Font de Mora en la adyacente. Mientras, Esteban Gonz¨¢lez Pons, forrado de oscuro como un escolta, le cubr¨ªa el lomo. Y ah¨ª, Gema Amor, con la seguridad que le confer¨ªa el rosa chicle de sus pantalones, puso la directa para plantarle dos besos a Camps como si nada. O como si algo. Incluso el portavoz, que prefiri¨® saludar antes a la oposici¨®n que ella, acab¨® tirando de prox¨¦mica para hacerle confidencias muy org¨¢nicas. O en ese plan. Justo Nieto iba a su bola. Se coc¨ªa en su jugo junto a Juan Cotino, que quiz¨¢ estaba alumbrando en su interior al Vicecristo, como si fuera un cirio pascual. Vicente Rambla, ni fr¨ªo ni calor, echaba unas risas con Miguel Peralta, quien, a la vez, trepanaba con la mirada a Blasco, mientras a su lado De Miguel lo ignoraba por el rabillo del ojo. Camps subi¨® al estrado y mir¨® al banco azul. Aunque no estaba Milagrosa Mart¨ªnez, era "el mejor Consell de la Comunidad", que es la bomba de nitrato de plata que arroj¨® para disolver los c¨²mulos. Y para intensificar el lujo, ah¨ª estaba el destello alicatado de Felipe del Ba?o, reci¨¦n salido del armario, el desgarro hemorr¨¢gico del grupo parlamentario, algunos brillos de Est¨¦e Lauder y no pocos filos de cuchillo.