Investigadores

Leo el lunes 16 un art¨ªculo en EL PA?S referente al Centro de Investigaci¨®n Pr¨ªncipe Felipe, el mismo que la semana pasada saltaba a la palestra por la supuesta discriminaci¨®n a fumadores. En el art¨ªculo se desglosan toda una serie de grandes cualidades que re¨²ne este nuevo centro, impulsado por la Generalitat Valenciana. Se olvida, a mi entender, de un muy asunto grave. Una buena parte de los investigadores est¨¢n remunerados sobre la base de becas, y no con contratos, afianzando as¨ª en la precariedad laboral de los investigadores. Si se han convocado m¨¢s de 66 becas y el centro va a contar con casi 350 cient¨ªficos, f¨¢cilmente llegamos a la conclusi¨®n de que m¨¢s del 20% de la plantilla est¨¢ sin derechos como la seguridad social, paro o vacaciones reguladas. Si dirigimos la mirada a los j¨®venes investigadores predoctorales y reci¨¦n doctorados, casi seguro que el porcentaje ser¨ªa muy alarmante. Esto contradice a la recientemente aprobada Carta Europea del Investigador y al C¨®digo de conducta para la contrataci¨®n de investigadores de la UE, que reconoce como profesionales y el derecho a tener un contrato a todos los investigadores que ya cuenten con un t¨ªtulo de grado. Esto es, que sean licenciado o ingenieros superiores.