?Directora 'privada'?
El pasado d¨ªa 19 por la tarde, el Consejo Escolar del Instituto de Ense?anza Secundaria Mart¨ªn de Bertendona de Bilbao daba como buena la candidatura a directora de una profesora del centro, hasta ahora jefa de estudios. Todo normal, si no fuera por que esta persona no es una profesora en el sentido estricto del t¨¦rmino, sino profesora de religi¨®n.
Es decir, que, como el resto de los 13.000 profesores de esta asignatura existentes, ha sido elegida por el Obispado para adoctrinar j¨®venes en los centros p¨²blicos. Por supuesto, con dinero tambi¨¦n p¨²blico; precisamente, el dinero que se nos niega cada a?o en mayor proporci¨®n, como este mismo Consejo Escolar ha corroborado: de cada solicitud de financiaci¨®n que se hace tan solo se recibe la mitad o incluso menos.
La situaci¨®n es tremenda, ya que si esta candidatura gana la votaci¨®n en la sesi¨®n del Consejo Escolar convocada para el 6 de julio, la directora ser¨ªa una persona elegida por la Iglesia Cat¨®lica que en s¨ª misma constituye la inmensa mayor¨ªa de la patronal de la ense?anza privada, con lo cual tendr¨ªamos a la directora de un centro p¨²blico defendiendo a ultranza los intereses de la ense?anza privada.
Por otro lado hay un gran debate abierto en la sociedad, en la que cada d¨ªa m¨¢s sectores deseamos la separaci¨®n definitiva del Estado y las iglesias. Es una cuesti¨®n especialmente sangrante en la escuela p¨²blica respecto a la Iglesia cat¨®lica, que goza de todos los privilegios emanados de unos acuerdos firmados en los tiempos en que nadie consideraba a Espa?a como una democracia.
La posibilidad legal de que los denominados "profesores" de religi¨®n puedan acceder a cargos de direcci¨®n solo puede traer enfrentamientos y conflictos que degeneren a¨²n m¨¢s la ense?anza p¨²blica.
Creo que la ¨²nica alternativa democr¨¢tica viable est¨¢ en manos de los gobiernos, tanto vasco como central, que pueden decretar una paralizaci¨®n preventiva de estas candidaturas en tanto se resuelve definitivamente la vieja y nunca cumplida reivindicaci¨®n de la separaci¨®n de Estado e Iglesias.
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