En lucha por el aire
Vecinos de tres barrios de San Roque exigen una soluci¨®n a los episodios de contaminaci¨®n que sufren
Los m¨¢s de 15.000 vecinos que viven en los barrios de Puente Mayorga, Guadarranque y Campamento, en San Roque (C¨¢diz) han decidido plantarse y lanzar un ¨®rdago a las autoridades de la zona, a las industrias y a la propia Junta de Andaluc¨ªa, para que se busque una soluci¨®n inmediata a la situaci¨®n que padecen a causa de la poluci¨®n.
Desde hace a?os, estos vecinos, al igual que los del resto del arco de la Bah¨ªa de Algeciras, han tenido que soportar los efectos del primer pol¨ªgono industrial de Andaluc¨ªa, pero la alarma no ha saltado hasta que, hace una semana, se conoci¨® el estudio sobre la calidad ambiental de la zona elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, en el que se asegura que "las emisiones de benceno y n¨ªquel sobrepasan los niveles legales establecidos". En el mismo informe cient¨ªfico se insta a la Junta de Andaluc¨ªa a realizar los an¨¢lisis correspondientes para evaluar, a trav¨¦s de un estudio epidemiol¨®gico de la zona del Campo de Gibraltar, los efectos que est¨¢ teniendo la poluci¨®n generada por las industrias sobre las personas que habitan en estos barrios de San Roque y el resto del arco de la Bah¨ªa de Algeciras.
"Las protestas llegan tarde", dice una vecina enferma de c¨¢ncer
A ra¨ªz de este informe, la Junta de Andaluc¨ªa ya ha anunciado que comenzar¨¢ en breve a tomar muestras de sangre y orina para saber la incidencia de estos los dos elementos qu¨ªmicos mencionados en la salud.Seg¨²n los cient¨ªficos, "tanto el benceno como el n¨ªquel act¨²an sobre el sistema inmunol¨®gico de los humanos y puede llegar a provocar c¨¢ncer".
Rosa Bermejo es vecina de Puente Mayorga, desde hace tres a?os padece c¨¢ncer y, aunque asegura estar bastante recuperada de su enfermedad, est¨¢ dispuesta a secundar cualquier movilizaci¨®n contra la contaminaci¨®n en la zona, tal y como ocurri¨® el pasado 19 de mayo, cuando unas 300 personas se concentraron en la plaza de San Fernando en este barrio sanroque?o. A pesar de ello, piensa que "las protestas llegan tarde, porque hace tiempo que ten¨ªamos que haber hecho esto y hubi¨¦semos evitado llegar a situaciones como la m¨ªa o la de otros muchos que acabaron peor que yo. Muertos por el c¨¢ncer".
Esta vecina de Puente Mayorga espera que las protestas que se est¨¢n desarrollando en las ¨²ltimas semanas sirvan para algo. "Por lo menos, para que las industrias contaminen menos", a?adi¨®. El sentir de los habitantes de esta zona del Campo de Gibraltar es que, casi a diario, desde hace a?os, tienen que convivir con fuertes olores a azufre, que les provocan v¨®mitos, irritaciones, mareos o da?os en sus enseres, como veh¨ªculos o ropas tendidas, que se ti?en de gotas negras y amarillas cuya procedencia y composici¨®n desconocen.
Manuel Jos¨¦ Peralta, vecino de La Colonia, otra de las zonas pr¨®ximas al pol¨ªgono industrial reconoce que "sin industrias no hay trabajo, pero es lamentable que, en esta zona, la gran mayor¨ªa de los vecinos padezcamos enfermedades respiratorias". ?se es su caso. Manuel recuerda que "los problemas empezaron cuando, hace algo m¨¢s de 30 a?os, se implantaron las primeras instalaciones industriales". Este vecino de San Roque tambi¨¦n considera que las movilizaciones han llegado algo tarde en el tiempo, aunque "hay que continuar porque, si no, para los j¨®venes del barrio ser¨¢ mucho peor".
Aunque la contaminaci¨®n no es nueva para los campogibraltare?os, parece que los ¨²ltimos acontecimientos ocurridos en estas barriadas han generado una mayor conciencia social. Las autoridades municipales se han sumado a las protestas de los vecinos para reclamar a la Junta de Andaluc¨ªa que se controlen y, si es necesario, que se reduzcan las emisiones de las industrias.
Juan Buenafuente tiene 75 a?os y es vecino de Puente Mayorga desde que ten¨ªa tres. "Entonces, esta zona era un aut¨¦ntico para¨ªso. Hab¨ªa pesca, numerosos cultivos de frutales y, cada d¨ªa, ven¨ªan tres o cuatro autocares de turistas para pasar la jornada en nuestras playas. Ahora, todo eso se ha cambiado por las manchas en las ropas y los coches, por los fuertes olores que obligan a cerrar las ventanas y por los numerosos casos de enfermedades que se dan entre los vecinos", asegura el anciano, quien concluye: "A pesar de todo, no me voy a ir de aqu¨ª".
Todos coinciden en que su convivencia con las industrias ha sido siempre molesta, pero hasta hace unos meses la han podido sobrellevar.
Desde entonces, la situaci¨®n se ha hecho insostenible y por eso se van a seguir convocando movilizaciones, como la del pr¨®ximo viernes, d¨ªa en el que los vecinos se van a volver a concentrar junto a los ni?os de estos barrios o como la manifestaci¨®n que los grupos ecologistas de la zona han convocado para el pr¨®ximo d¨ªa 5 de junio, d¨ªa mundial del medio ambiente, en el que todos esperan que el punto de mira de la administraci¨®n se sit¨²e en esta comarca gaditana donde la contaminaci¨®n, de momento, no tiene remedio.
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