Ortega Cano preocupado ante su deb¨² ganadero en Las Ventas

Jos¨¦ Ortega Cano debuta hoy como ganadero en Madrid con una novillada de Yerbabuena. Dice que hasta el momento mismo del embarque de los novillos no se ha retirado de su lado, en su finca sevillana de Castilblanco de los Arroyos, y desde all¨ª explica que est¨¢ "preocupad¨ªsimo" ante este compromiso. "Creo que llevo lo mejor", explica Ortega, "y est¨¢n saliendo de maravilla, pero tengo miedo". "Vivo la ganader¨ªa de manera apasionada", contin¨²a, "he estado m¨¢s tiempo con los novillos que con mi familia, he ido a verlos todos los d¨ªas, he controlado lo que comen y los he cuidado con mucho mimo; est¨¢n bien presentados, tienen buenas hechuras y son de buena familia".

Ortega Cano est¨¢ convencido de que habr¨¢ triunfo grande y conf¨ªa plenamente en el cartel. "En esta finca no crece la hierba mala", sentencia, "por tanto, yo no pienso para nada en el fracaso, y espero, adem¨¢s, que los chavales est¨¦n inspirados".

Debuta en Madrid con tres novillos de Garc¨ªa Pedrajas y tres de Domecq, las dos procedencias de su ganader¨ªa. Ya ha lidiado cuatro novilladas en festivales que, seg¨²n sus palabras, han sido extraordinarias, y est¨¢ comprometido con las plazas de Valencia, Navalcarnero, M¨¢laga y Murcia. A¨²n no cuenta con corridas de toros, pero esa circunstancia no le resta un ¨¢pice de beneficio como ganadero: "Lo m¨¢s importante es que disfruto mucho con la crianza del toro y convivo con ellos".

Ortega Cano ha vuelto de nuevo a enfundarse el traje de luces, y asegura que no ha vuelto para dar la espalda a ninguna plaza. "Vuelvo con todas las consecuencias", afirma, "y si me ofrecieran una tarde a modo en Madrid, aqu¨ª estar¨ªa". De momento, tiene previsto acudir a Valencia, Santander, Burgos, M¨¢laga y Antequera; unas 15 o 20 corridas. "Estoy preparado para hacer una temporada digna, pero tambi¨¦n dolorido por una voltereta que sufr¨ª en Getafe el d¨ªa de mi reaparici¨®n".

La novillada de hoy: novillos de Yerbabuena, para Israel Lancho, David Mora y Andr¨¦s Gonz¨¢lez. A las siete de la tarde.