Sartre, el mandar¨ªn de la subversi¨®n
Un encuentro hispano-franc¨¦s de intelectuales conmemora el centenario del autor de 'La n¨¢usea'
Fil¨®sofo, pol¨ªtico, periodista, novelista, dramaturgo, memorialista, premio Nobel renegado, referente intelectual para tres generaciones de franceses, polemista incansable, pensador siempre "en contra", personaje legendario, primero nihilista y despu¨¦s icono de la contracultura y arquetipo del intelectual medi¨¢tico y engag¨¦ del siglo XX, quiz¨¢ el primer marido oficialmente feminista de la historia...
Hace 100 a?os que naci¨® Jean-Paul Sartre y 25 a?os que muri¨® pero muchas de sus m¨²ltiples facetas siguen fascinando igual que entonces.
Ayer, dos profesores franceses y dos espa?oles debatieron en Madrid sobre la vigencia del pensamiento y la obra del gran maestro de la subversi¨®n.
Se habl¨® de su ambigua postura respecto al sufragio universal ("las elecciones, trampa para tontos", escribi¨® en 1973 en Les temps modernes, la revista que fund¨® con Merleau-Ponty y Simone de Beauvoir); se aventur¨® su hipot¨¦tica adhesi¨®n al no en el refer¨¦ndum franc¨¦s del pasado domingo sobre la Constituci¨®n Europea; se elogi¨® Las palabras, su autobiograf¨ªa incompleta, como su obra m¨¢s moderna; se ironiz¨® sobre su ambig¨¹edad ideol¨®gica, que le llev¨® a acercarse al comunismo y a alejarse de ¨¦l buscando una tercera v¨ªa e incluso a coquetear con el terrorismo de la Baader Meinhof o las Brigadas Rojas...
Entre el fervor y la cr¨ªtica, pero siempre dentro de la pasi¨®n que suscita la figura gigantesca y crucial del autor de La n¨¢usea: ah¨ª estaban Jean-Fran?ois Sirinelli, catedr¨¢tico de Historia Pol¨ªtica y Cultural en la Universidad de Par¨ªs y autor del ensayo Sartre y Aron, dos intelectuales en el siglo; Pascal Ory, profesor en La Sorbona y autor de Les intellectuels en France, de l'affaire Dreyfus ¨¤ nos jours (en colaboraci¨®n con Sirinelli); Juan Bravo Castillo, catedr¨¢tico de Filolog¨ªa Francesa en la Universidad de Castilla-La Mancha y autor del libro Jean-Paul Sartre (S¨ªntesis, 2004), y Jacobo Mu?oz, catedr¨¢tico de Filosof¨ªa de la Universidad Complutense, cr¨ªtico y traductor.
Los cuatro charlaron en el C¨ªrculo de Bellas Artes sobre Compromiso literario, compromiso pol¨ªtico: Sartre, ?el intelectual subversivo?, en un acto convocado por la Embajada Francesa al calor del Encuentro hispano-franc¨¦s de historia cultural, que re¨²ne, desde ayer y hasta ma?ana mi¨¦rcoles en la Casa de Vel¨¢zquez, a historiadores, cr¨ªticos y polit¨®logos de ambos pa¨ªses, entre otros Santos Juli¨¢, Jos¨¦ ?lvarez Junco, Jos¨¦ Carlos Mainer, Juan Manuel Bonet, Dominique Poulot, Pascale Goetschel o Michel Leymarie.
?Qu¨¦ hubiera votado Sartre en el refer¨¦ndum del domingo? "Es dif¨ªcil hacer hablar a los muertos", dicen a coro Sirinelli y Ory. "Pero Sartre estaba a la izquierda de la izquierda y hubiera sido hostil a la Constituci¨®n Europea; la hubiera considerado un producto de la Europa capitalista", dice Sirinelli. "O quiz¨¢ no hubiera votado, depende de si nos fijamos en el Sartre nihilista de antes de la guerra o en el Sartre progresista de los a?os sesenta", afirma Pascal Ory.
"Su gran m¨¦rito, en cualquier caso", a?ade Ory, "es que fue el maestro intelectual, la legitimaci¨®n social de Francia, en tres momentos hist¨®ricos muy distintos: la liberaci¨®n, la descolonizaci¨®n y el 68. ?Eso es el r¨¦cord Guiness del intelectual!".
"?sa es su gran fuerza", a?ade Sirinelli. "Sartre proclama el deber del compromiso, lo teoriza, y al mismo tiempo lo encarna como el primer gran intelectual medi¨¢tico, asumido incluso por la prensa popular como una gloria literaria".
"El verdadero intelectual siempre es subversivo y no puede ser sustituido ni por los pol¨ªticos, ni por los periodistas", tercia Jacobo Mu?oz. "Y Sartre fue realmente subversivo porque puso en cuesti¨®n muchos t¨®picos de su tiempo; por eso fue un intelectual inc¨®modo, siempre atento a desmontar las evidencias primarias; aunque cayera en algunos vicios de los intelectuales tradicionales, como el mandarinismo".
"Siempre estuvo en contra, nunca se puso a favor de nadie", concluye Juan Bravo Castillo. "Y aunque fue un pol¨ªtico desafortunado y un fil¨®sofo que no cre¨® escuela, fue una gu¨ªa espiritual para el mundo, un personaje siempre comprometido con su tiempo, uno de esos iconos que siempre se echan de menos".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.