El bravo Landaluze resiste en los Alpes

Si ??igo Landaluze (Algorta, Vizcaya, 1977) resiste hoy en el insidioso circuito de los alrededores de Sallanches -siete ascensiones al repecho de Domancy, dos kil¨®metros al 10%, all¨¢ donde Hinault masacr¨® a sus rivales en el Mundial de 1980- y, despu¨¦s de contemplar el coraje con que defendi¨® ayer su liderato en el colosal Joux Plane, nada hace pensar que no pueda superar el desaf¨ªo, habr¨¢ inventado una nueva forma de ganar el Dauphin¨¦ Lib¨¦r¨¦: solo, a solas y contra todos.

Su equipo, el Euskaltel, lleg¨® al Dauphin¨¦ con problemas en la plantilla, s¨®lo seis ciclistas de los ocho posibles y una t¨¢ctica simple, que cada uno haga lo que pueda hasta que pueda, una regla a la que Landaluze, de todas maneras, lleva toda la temporada acostumbrado. Una aproximaci¨®n muy modesta, m¨¢s acorde con los tiempos que corren, a una carrera que el a?o pasado supuso el c¨¦nit de su temporada -recuerden: Mayo arrasador, cronoescalada del Ventoux, Armstrong sufriendo- .

Pasados los d¨ªas, el equipo se redujo a cuatro, Landaluze y tres m¨¢s, y a una situaci¨®n cuanto menos curiosa: Landaluze, que el a?o pasado fue uno de los m¨¢s preciosos gregarios de Mayo, de l¨ªder, su compa?ero Aitor Silloniz, de farolillo rojo, y Koldo Fern¨¢ndez y Joseba Zubeldia, perdidos en las profundidades de la general.

Landaluze alcanz¨® el liderato el viernes porque no se hab¨ªa portado mal en la contrarreloj que gan¨® Botero, porque tambi¨¦n brill¨® en la ascensi¨®n al Mont Ventoux y porque cuando sus compa?eros de fuga le pidieron el viernes que lo dejara, ya que estaba colocado para la general, para que ellos pudieran llegar, y cuando dejaron de pedalear y dar relevos tras el fugado Axel Merckx, ¨¦l decidi¨® atarse los machos y lanzarse tras el belga.

Tras todo ello, pocos daban un duro por ¨¦l, por su capacidad de resistir con el maillot amarillo en la terrible etapa alpina de ayer, un recorrido por la Chartreuse que vio al incre¨ªble Santiago Botero escalar como un poseso la Joux Plane, que vio al tenaz Paco Mancebo mostrar sus primicias, que vio al cauto Lance Armstrong en compa?¨ªa de los tenores Vinok¨²rov y Leipheimer, subir sin arriesgar. All¨ª, solo, a solas, contra todos, Landaluze pudo haberlo perdido todo, pero se neg¨®. Con coraje resisti¨®. Perdi¨® 4m 17s con respecto a Botero, y poco menos de minuto y medio respecto a Armstrong y compa?¨ªa. Mantuvo el liderato con 59s sobre el colombiano, 1m 16s sobre Leipheimer, 1m 37s sobre Armstrong y 1m 40s sobre Vinok¨²rov.

Por pura iron¨ªa del destino, el triunfo de Landaluze llega acompa?ado de las desgracias del Liberty, uno de los equipos m¨¢s fuertes del ProTour. Ayer abandon¨® Contador, que recibi¨® 18 puntos en el anular de la mano derecha que se hab¨ªa cortado intentando colocar en marcha el im¨¢n del cuentakil¨®metros en un radio. Roberto Heras, su figura para el Tour, sigui¨® sin encontrarse a gusto. Ayer, tambi¨¦n Isidro Nozal, expulsado del Dauphin¨¦ por no pasar el control de hematocrito, sufri¨® un atropello cuando se entrenaba en Mieres. No se rompi¨® nada, por lo menos.