El autor del PGOU rechaza "suburbios de 45.000 habitantes" como Rabassa
Cantallops rechaza "suburbios de 45.000 habitantes" y el promotor niega que sea un gueto
El redactor del Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU) de Alicante, el arquitecto Llu¨ªs Cantallops, advirti¨® ayer en un debate de que la "intenci¨®n de crear, de una tacada, un nuevo suburbio con capacidad para 45.000 habitantes puede convertirse en un error important¨ªsimo". As¨ª se refiri¨® al plan de Rabassa -urbanizaci¨®n de 4,5 millones de metros cuadrados con 15.000 viviendas- que el Ayuntamiento, con los votos del PP y el PSPV, ha aprobado al margen del PGOU. El Ayuntamiento justific¨® el plan para crear 8.000 viviendas protegidas y el promotor neg¨® que sea un gueto.
La mayor¨ªa de los asistentes se manifest¨® en contra del plan urban¨ªstico
La ciudad de Alicante acogi¨® anoche el mayor debate urban¨ªstico de su historia reciente, a prop¨®sito de la controvertida aprobaci¨®n del plan de Rabassa. En una mesa redonda, arquitectos urbanistas, promotores y t¨¦cnicos municipales polemizaron sobre un proyecto que ha generado graves tensiones en el Ayuntamiento y en los principales partidos pol¨ªticos de la ciudad, hasta el punto de influir de forma determinante en la dimisi¨®n del secretario local del PSPV, Juan Antonio Rom¨¢n, presente en el debate.
La mesa redonda se concibi¨® con un plantel equilibrado: tres defensores del plan (promotor, redactor y t¨¦cnico municipal) frente a otros tantos detractores (arquitectos y urbanistas), y ante un p¨²blico, unas 300 personas, inclinado en su mayor¨ªa de antemano en contra de la actuaci¨®n. Para los arquitectos
el tama?o del plan s¨ª importa. "La ciudad necesita complejidad, no es un almac¨¦n de casas", dijo Cantallops.
El urbanista fue aplaudido por el p¨²blico cuando sutilmente critic¨® al alcalde: "?Qui¨¦n hace la ciudad?, quien puede, y quien puede tiene todo el poder si nadie lo acota".
Jos¨¦ Bernab¨¦, representante del urbanizador (la mercantil Viviendas Sociales, SL, del grupo Ortiz, la CAM y Hormigones Mart¨ªnez) bas¨® su defensa del proyecto de urbanizaci¨®n de Rabassa en la bonanza de los par¨¢metros socio-urban¨ªsticos (cesiones de zonas verdes, viales y equipamientos para infraestructuras), a su juicio, m¨¢s rentables para la ciudad que los establecidos en el vigente Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU), y justific¨® la adjudicaci¨®n del plan al margen de la revisi¨®n del planeamiento en la "lentitud" de la f¨®mula contraria y "la falta de garant¨ªas de que las infraestructuras hubieran estado ejecutadas antes de la construcci¨®n de las viviendas". Bernab¨¦ mostr¨® su "extra?eza" por la pol¨¦mica que ha levantado el programa urban¨ªstico tras su adjudicaci¨®n, "cuando la iniciativa se plante¨® en 2000, y entonces s¨®lo se presentaron 18 alegaciones". El t¨¦cnico del grupo Ortiz asegur¨® que la iniciativa parti¨® con el respaldo del 23% de los propietarios, porcentaje que, tras las alegaciones, se elev¨® al 80%. Bernab¨¦ defendi¨® su alternativa, desde el punto de vista de integraci¨®n del territorio, de conexi¨®n de la red viaria, del medio ambiente ("las lagunas se protegen y, adem¨¢s, pasan a titularidad p¨²blica") y de infraestructuras b¨¢sicas -nuevos dep¨®sitos de agua y conduccciones, nueva subestaci¨®n el¨¦ctrica y red para el tratamiento de aguas residuales-. En cuanto a las viviendas de protecci¨®n oficial, el portavoz del urbanizador descart¨® que se vaya a producir un gueto con las nuevas 8.000 casas, "porque estar¨¢n distribuidas y mezcladas con las de renta libre en las distintas manzanas de la urbanizaci¨®n", precis¨®. Y, por ¨²ltimo, Bernab¨¦ resalt¨® la baja densidad de la edificabilidad, "30 viviendas por hect¨¢rea; en los primeros a?os de desarrollo del vigente PGOU la cifra era de 100 casas por hect¨¢rea".
El redactor del Plan de Rabassa, el arquitecto Fernando P¨¦rez Segura, fue el m¨¢s escueto en su intervenci¨®n. El t¨¦cnico asegur¨® que su equipo se limit¨® a redactar una alternativa, finalmente elegida por el Ayuntamiento, desde los par¨¢metros de integraci¨®n del territorio y protecci¨®n medioambiental. P¨¦rez Segura puntualiz¨® que "aunque todo es opinable, el debate sobre el plan tiene m¨¢s connotaciones sociales, que estrictamente urban¨ªsticas".
Por su parte, el catedr¨¢tico de Urban¨ªstica Jos¨¦ Ram¨®n Vera rechaz¨® la iniciativa porque, a su juicio, es contradictoria con un modelo de "crecimiento urbano sostenible y de calidad". En definitiva, el catedr¨¢tico, con un lenguaje excesivamente te¨®rico, cuestion¨® el proyecto, por ser "una entrega m¨¢s del modelo de crecimiento urbano del promotor".
El gerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Alicante, Enric Sanus, lament¨® que s¨®lo se hablara de la propuesta y no de las obligaciones correctoras que impone el Consistorio. El t¨¦cnico municipal justific¨® que el plan se aprobara al margen del PGOU ante la urgencia de disponer de viviendas protegidas. El arquitecto Carles Gasc¨® asegur¨® que es muy f¨¢cil escapar de la controversia: "S¨®lo hay que aplicar las normas con rigor, porque en las normas est¨¢ el sentido com¨²n", dijo. Gasc¨® critic¨® que se est¨¦n desarrollando nuevos planes pese a la importante cantidad de suelo urbanizable existente.
Urbanismo a pie de calle
La pol¨¦mica adjudicaci¨®n del programa urban¨ªstico m¨¢s ambicioso de la historia de Alicante -15.000 viviendas en el sector de las Lagunas de Rabassa- ha despertado la conciencia ciudadana en torno al modelo de crecimiento urbano necesario. El sal¨®n de acto del Colegio de Arquitectos de Alicante fue testigo ayer de esta inusual vocaci¨®n de los vecinos por el urbanismo. Unas 300 personas, en representaci¨®n de diferentes colectivos sociales, partidos pol¨ªticos -todos salvo el PP, en el gobierno local con mayor¨ªa absoluta- y sindicatos, abarrotaron el local para escuchar, primero, la opini¨®n de los expertos y responsables de la iniciativa y luego dejar patente su parecer.
El encuentro, iniciativa de la Universidad de Alicante y el Colegio de Arquitecto, reuni¨® a Fernando P¨¦rez Segura, arquitecto y redactor del Plan de Rabassa; Llu¨ªs Cantallops, arquitecto y redactor de la revisi¨®n del Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU) de Alicante; Jos¨¦ Ram¨®n Navarro Vera, catedr¨¢tico de Urban¨ªstica de la Universidad de Alicante; Enric San¨²s, gerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Alicante; Jos¨¦ Bernab¨¦, director de gesti¨®n de suelo y representante del urbanizador del PAI (una firma del promotor Enrique Ortiz), y Carles Gasc¨®, del Colegio de Arquitectos de la Comunidad Valenciana.
Y frente a ellos, el estamento pol¨ªtico y la sociedad civil. El primero lo integraban el grupo municipal socialista, la edil de EU y l¨ªderes de otras formaciones, como Antoni Arqu¨¦s, del Bloc. El segundo grueso del p¨²blico lo conformaban mayoritariamente profesores universitarios y arquitectos y, junto a ellos, el presidente del Consejo Social de la Universidad de Alicante, Ricardo Ferrer; el l¨ªder CC OO, Jos¨¦ de la Casa; el portavoz de Ecologistas en Acci¨®n, Carlos Arribas, y de los peque?os propietarios del suelo.
El inter¨¦s c¨ªvico por el plan de Rabassa lo constata otro dato: 400 personas -la mayor¨ªa profesionales liberales- ha firmado ya el Manifiesto por la Dignidad de Alicante.
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