El BNG compensa su rev¨¦s con la esperanza de estar en el Gobierno
Anxo Quintana anuncia que "empieza el tiempo de trabajar unidos por el pa¨ªs"
El Bloque no aguant¨® el tir¨®n. Tras la fuga de 35.000 votos, los nacionalistas, que estrenaban como cartel electoral al senador Anxo Quintana en sustituci¨®n de Xos¨¦ Manuel Beiras, perdieron cuatro esca?os, lo que les retrotrae al escenario de 1993, cuando contaban con 13 diputados frente a los 17 de la actual legislatura. Tambi¨¦n, como entonces, ser¨¢n la tercera fuerza parlamentaria, ya que el PSdeG recuper¨® ayer su condici¨®n de segundo partido de Galicia.
Es un resultado adverso y frustrante para las expectativas que barajaba la direcci¨®n del BNG en los ¨²ltimos d¨ªas, pero que cuenta con el parad¨®jico consuelo de que tal vez, si finalmente se corrobora la p¨¦rdida de la mayor¨ªa absoluta del PP, pueda llevarles a detentar sus mayores cotas de poder institucional. Despu¨¦s de agradecer la participaci¨®n ciudadana, Quintana se refiri¨® ayer vagamente al nuevo mapa pol¨ªtico: "Hoy se abre la posibilidad de un pa¨ªs nuevo, m¨¢s libre, m¨¢s igualitario, una naci¨®n respetada".
El candidato, el ¨²ltimo en hablar de los tres aspirantes, corrobor¨® que hab¨ªa conversado con Emilio P¨¦rez Touri?o, pero rehuy¨® ofrecer m¨¢s detalles. Hoy se reunir¨¢ en Santiago la ejecutiva nacional del BNG para valorar los resultados y el nuevo escenario abierto tras la p¨¦rdida de la mayor¨ªa absoluta del PP. "Nos toca escuchar con humildad, responsabilidad y sentidi?o", dijo Quintana ante varias decenas de militantes.
Arropado por la ejecutiva, el portavoz nacional del BNG asegur¨® que actuar¨¢ con "coherencia, transparencia y capacidad de di¨¢logo" y que trabajar¨¢ para "sacar adelante" lo que necesite la sociedad. "Hoy empieza el tiempo de trabajar unidos por el pa¨ªs", a?adi¨®. Tanto Quintana como otros dirigentes del Bloque han expresado de forma reiterada su voluntad de permitir un cambio en el Gobierno gallego si Manuel Fraga no revalidaba su quinta mayor¨ªa absoluta.
Anxo Quintana, de 46 a?os, puede erigirse en el nacionalista con m¨¢s peso institucional en la historia del BNG si accede al Gobierno de la Xunta, pero su papel no ser¨¢ tan determinante como aventuraban las encuestas difundidas al cierre de los colegios electorales, que llegaron a darle hasta 18 esca?os.
El Bloque hab¨ªa acariciado la idea de condicionar el cambio pol¨ªtico con las fuerzas m¨¢s igualadas entre ellos y los socialistas, que ahora casi duplican el n¨²mero de sus esca?os. "Queremos un cambio gallego", se hart¨® de reclamar Quintana en sus m¨ªtines.
La cita era especialmente singular para ¨¦l, al tratarse de su primera carrera hacia la Xunta, con una doble lectura interna y externa. El nacionalista sustituy¨® en noviembre de 2003 a Beiras como portavoz nacional y candidato a la presidencia, as¨ª que esta incursi¨®n electoral era una oportunidad para calibrar su tir¨®n personal y afianzar su liderazgo. Para Quintana, el resultado no ha podido ser m¨¢s que decepcionante, ya que el Bloque ha perdido un esca?o en cada provincia, incluida Ourense, su tierra natal y a la que mim¨® especialmente durante la campa?a.
El candidato decidi¨® cerrar el viernes en esta ciudad, la ¨²nica de las capitales gallegas que gobierna el PP con mayor¨ªa absoluta, para mostrar su compromiso con ella. En la singular batalla que viv¨ªan Quintana, para evaluar su gancho, y Jos¨¦ Luis Baltar, el poderoso presidente de la Diputaci¨®n de Ourense, no hay duda de que la balanza se inclin¨® hacia el bar¨®n del PP, el ¨²nico que podr¨¢ presumir de que el partido no ha retrocedido ni un solo diputado en su provincia.
Los 13 esca?os son especialmente negativos para Quintana, que crey¨® que la campa?a, hecha a su medida, le hab¨ªa permitido remontar un escenario adverso. "Si la campa?a dura m¨¢s podr¨ªamos aspirar a m¨¢s cosas", indic¨® d¨ªas atr¨¢s. Pero el Bloque part¨ªa de una situaci¨®n dif¨ªcil. La organizaci¨®n lleg¨® a la carrera electoral un tanto maltrecha tras el proceso de renovaci¨®n de sus dirigentes, que culmin¨® en una desvinculaci¨®n traum¨¢tica del que hab¨ªa sido su m¨¢ximo referente desde su fundaci¨®n, el catedr¨¢tico de Econom¨ªa Xos¨¦ Manuel Beiras, que dej¨® la presidencia del Consello Nacional en abril despu¨¦s de lanzar duras cr¨ªticas a su sucesor, Anxo Quintana.
Pero no fue el ¨²nico cambio. Del actual grupo parlamentario de 17 diputados, s¨®lo dos nombres, Bieito Lobeira y Ana Pont¨®n, repiten en las listas. Quintana ha abanderado un recambio generacional, repleto de profesionales cualificados con escasa experiencia pol¨ªtica. La mitad de ellos son mujeres, ya que por primera vez en su historia la organizaci¨®n ha presentado listas cremallera, en las que se alternan mujeres y hombres de forma consecutiva.
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