Chus Guti¨¦rrez evoca la movida y el 23-F

Las andanzas de Las Siux, un arquet¨ªpico tr¨ªo punk, en la noche del 23-F son la base de El Calentito, nueva pel¨ªcula de Chus Guti¨¦rrez (Alma gitana, Poniente). Ver¨®nica S¨¢nchez, m¨¢s conocida por la serie de televisi¨®n Los Serrano, es una inocente no emancipada que se incorpora al tr¨ªo a ¨²ltima hora, aunque su principal urgencia sea perder la virginidad. Para la directora, se trata tambi¨¦n de evocar "una noche importante, en la que se pudo perder toda la libertad conquistada en los cinco a?os desde la muerte de Franco".

Chus Guti¨¦rrez (Granada, 1962) se est¨¢ hartando de explicar que s¨ª, que El Calentito existi¨® realmente pero no estaba abierto en 1981, cuando transcurre la pel¨ªcula. De hecho, result¨® imposible rodar en lo que era "un tubo estrecho con un s¨®tano abajo para actuaciones", y la mayor parte de la acci¨®n transcurre entre las paredes de un laber¨ªntico local cercano, que coexisti¨® con El Calentito a finales de los ochenta y principios de los noventa bajo el nombre de Ambig¨². "La gran idea que tuvimos -Juan Carlos Rubio, mi coguionista, y yo- fue hacer coincidir las historias del Calentito y el golpe de Tejero".

Algo hay del Calentito en la pel¨ªcula hom¨®nima -"la gran distinci¨®n del bar era su liberalidad, atra¨ªa a una fauna muy abigarrada"- y bastante del grupo femenino en que Chus militaba por aquella ¨¦poca, Las Xoxonees: "Me he servido de lo que aprend¨ª entonces sobre las relaciones profesionales entre mujeres. Los trapicheos con managers y discogr¨¢ficas tambi¨¦n est¨¢n reflejados. Las Xoxonees ¨¦ramos tan divertidas como malas sobre un escenario, pero CBS nos ofreci¨® enseguida un contrato: no lo entend¨ªan pero quer¨ªan estar en la onda. Claro que aceptamos un productor inadecuado y fuimos incapaces de sacar adelante el proyecto. Ah, Blanca Li, mi hermana, otra xoxonee, acept¨® coreografiar los directos de Las Siux".

Aunque la directora pas¨® buena parte de los ochenta estudiando cine en Nueva York y tocando con las primeras Xoxonees, cree que la pel¨ªcula es fiel al esp¨ªritu de la movida... y de sus enemigos: "Me dicen que si he cargado las tintas sobre los fachas, que es una exageraci¨®n que el hermano de la protagonista lleve un jersey con los colores de la bandera... pero yo recuerdo que una vez nos dieron una paliza unos chavales de Fuerza Nueva que llevaban ese tipo de jersey. Este pa¨ªs tiene una memoria selectiva para lo desagradable".

En todos los ¨¢mbitos: se queja de que hay poco material filmado del 23-F. Otro elemento hist¨®rico en El Calentito es una actuaci¨®n de Almod¨®var y McNamara, procedente de Laberinto de pasiones, que refuerza la verosimilitud que respira la cinta. Para Chus, "es una pena que no se hagan m¨¢s pel¨ªculas sobre aquel momento tan exuberante. Ahora, cuando se recuerdan los ochenta, se tiende al discurso de los juguetes rotos, con una moralina repugnante". "El Calentito es una pel¨ªcula ingenua, libertaria, efervescente. Dan ganas de recuperar la fuerza de aquellos tiempos, donde todo parec¨ªa posible. Cuando hac¨ªa el casting, preguntaba a las actrices si sab¨ªan cantar. Todas me dec¨ªan que no y yo respond¨ªa: 'No importa, tampoco en los ochenta".

Finalmente, Ver¨®nica S¨¢nchez, Macarena G¨®mez y Ruth D¨ªaz han terminado berreando Bailamos fatal o Dominatrix, felices pastiches guarri-punk que firma Tao Guti¨¦rrez (otro de los seis hermanos de Chus). Una selecci¨®n de temas cl¨¢sicos de los ochenta redondea la banda sonora, que edita DRO, la gran discogr¨¢fica surgida de la movida. La directora aprovecha para arremeter contra las estrecheces de la industria cinematogr¨¢fica espa?ola, por lo menos en lo que respecta a las directoras. "No era consciente de mi condici¨®n de mujer hasta que estren¨¦ Sexo oral (1994) y descubr¨ª que lo m¨¢s importante era mi g¨¦nero. Ya no es s¨®lo la an¨¦cdota de que nos hagan mil reportajes sobre j¨®venes directoras: no te dejan olvidar tu condici¨®n femenina, en el trato diario, y sobre todo en los presupuestos. Pienso en directores que comenzaron a la vez que yo y compruebo que ellos han ido creciendo profesionalmente, que tienen m¨¢s dinero y m¨¢s margen para sus proyectos. A nosotras, no. Como somos las mejores a la hora de hacer la compra, se espera que hagas milagros con presupuestos que nunca crecen".

Eso supone que Guti¨¦rrez no tiene muchas posibilidades de rodar la pel¨ªcula de ciencia-ficci¨®n de la que viene hablando desde hace a?os. "As¨ª que lo m¨¢s probable es que termine haciendo una road movie que ir¨¢ desde Algeciras a una ciudad marroqu¨ª, una pel¨ªcula con voluntad de poema, libre de la imposici¨®n de los di¨¢logos constantes; tengo la sensaci¨®n de que la narrativa cinematogr¨¢fica est¨¢ estancada. Aunque tambi¨¦n me tira una historia sobre la cruda realidad de la transexualidad, despu¨¦s de los contactos que he tenido rodando El Calentito".