Amor, democracia y derrota

?ngeles Vald¨¦s-Bango es una mujer ya madura, que disfruta de una merecida jubilaci¨®n en su Asturias natal, al final casi de una vida inquieta y anfractuosa, que describe a saltos desde sus a?os infantiles, desde una infancia marcada por la derrota en la Guerra Civil hasta su madurez de triunfadora, pero derrotada al final en donde m¨¢s le dol¨ªa, un amor que la ha llenado a trozos, una vez que hab¨ªa llegado a un estatus estable de funcionario en la democracia, pero que al final se le deshace entre los dedos para desembocar en la nada, pues es la derrota lo que ha marcado su vida entera. De familia asturiana, fue hija de un juez depurado tras la Guerra Civil, y a su numerosa estirpe, que sobrevivi¨® a duras penas, hace muchas referencias en las notas que interfieren la acci¨®n de su novela, que se centra sin embargo cuando todo parece haber pasado y empieza la acci¨®n real de su novela, centrada en su verdadero tema, el de un amor que se revela imposible, pero avasallador, sobre todo por ce?irse a un problema implacable, que se convierte en tr¨¢gico precisamente por evitar toda muerte innecesaria. Es la historia de un amor terrible por implacable, pues se trata de lo m¨¢s fatal de todo, la dependencia sexual. Lo que indica muy bien una frase casi escondida en la presentaci¨®n editorial, que tras hablar del adulterio como pilar de la instituci¨®n familiar, se?ala con claridad: "El cuerpo como avaricia sucia". Es entonces la historia de un amor prohibido e inexorable, fatal para siempre, que demuestra la suciedad avariciosa presente en los cuerpos que ya no pueden aspirar a una inocencia imposible porque la derrota los ha manchado para siempre.

La novela empieza en el presente -en el origen actual de la acci¨®n- aunque enseguida se llena de notas retrospectivas que explican el pasado de lo que est¨¢ pasando ahora, porque sin ellas no se aclarar¨ªa de verdad por qu¨¦ pasa lo que pasa y c¨®mo pasa en realidad. Estas notas, al principio muy frecuentes y extensas, cuentan la novela previa necesaria a la novela que estamos leyendo (y quiz¨¢ a toda posible novela) y por su frescura y realismo popular (con utilizaci¨®n frecuente de lenguaje popular infantil y "asturiano") son lo m¨¢s fresco, natural y original del texto, lo que constituye la verdadera "originalidad" de lo que leemos. Desde las an¨¦cdotas familiares e infantiles, donde se describe, con gracia y precisi¨®n, el mundillo en una serie de pueblecitos de la costa asturiana en el contexto de una familia derrotada en la guerra, donde sus numerosos miembros sobreviven a la derrota y la miseria, pues el padre expedientado tras la guerra, aunque libre de otras responsabilidades, se tiene que dedicar al ejercicio libre de la abogac¨ªa, lo que le permitir¨¢ dar una educaci¨®n a su numerosa prole, pues no conseguir¨¢ que le devuelvan su puesto de magistrado hasta treinta a?os despu¨¦s, tras una serie de recursos y reclamaciones administrativas que se lo consiguen al final. As¨ª, conforme engrosan la l¨ªnea argumental actual, las notas del pasado se van adelgazando lentamente y desaparecen en los cap¨ªtulos finales, porque ya est¨¢ explicado todo para bien entender por qu¨¦ pasa lo que est¨¢ pasando y las razones de tanta "implacabilidad" que lleva a la derrota total, a la negaci¨®n de un amor que parec¨ªa inocente e inevitable, pero que en realidad estaba marcado de antemano.

Con la llegada de la democracia, la ascensi¨®n de la protagonista, desde sus primeros puestos en la Administraci¨®n, se ve interferida por el amor por uno de sus primeros jefes, que desgraciadamente para ella est¨¢ casado y tiene una familia con anterioridad, lo que se revela determinante para su vida posterior. Ella va ascendiendo en su carrera administrativa, pero tambi¨¦n ¨¦l, que llega a ser profesor y catedr¨¢tico y hasta se "pasa" a la pol¨ªtica, donde llega a parlamentario importante en alg¨²n partido de la oposici¨®n democr¨¢tica sin que por ello sus relaciones amorosas y sobre todo er¨®ticas sufran la menor alteraci¨®n.

En suma, ser¨ªa la historia de

un "tri¨¢ngulo" banal, si no contara con la intensidad y riqueza expresiva de su autora, que, mientras describe las an¨¦cdotas y sucedidos de su historia, no desembocara al final con sus dotes de escritora, que la llevan casi al final a intercalar poemas, en verso y prosa, que sustituyen a las notas retrospectivas iniciales y dentro de su aparente espontane¨ªsmo la hacen tropezar con la literatura de verdad. Como final, esta relaci¨®n "sucia" desemboca en que su democr¨¢tico jefe la utiliza con la mayor desverg¨¹enza como "negro" clandestino en un libro sobre el tema de su especialidad com¨²n, que ¨¦l firma en solitario con la mayor impunidad, y ¨¦sta ser¨¢ la gota que colme el vaso al final, pues dimitida de todos sus puestos, se refugiar¨¢ solitaria en su Asturias natal. No se enga?en, pues este melodrama es una verdadera tragedia, sin muertos ni dioses implacables, pero escrita con una naturalidad, intensidad y gracia en su objetividad que la hacen perfectamente verdadera y que al menos llega a una conclusi¨®n terrible, la de dar las gracias por haber podido sobrevivir para poder contarlo. Pese al poder del sexo, ¨¦ste es un amor derrotado porque ha nacido en medio de la derrota. Estremecedor.