"Puede haber restricciones de agua en las zonas tur¨ªsticas"
Jaume Sol¨¤ es el director de la Agencia Catalana del Agua, el organismo encargado de limitar los efectos de la sequ¨ªa en uno de los puntos que m¨¢s se nota: el suministro de agua a las casas y las industrias. Asegura que la situaci¨®n actual garantiza el suministro hasta despu¨¦s de las lluvias de septiembre, pero no descarta que haya que imponer restricciones en las zonas tur¨ªsticas de la Costa Brava y la Costa Dorada.
Pregunta. ?Cu¨¢nto durar¨¢ la sequ¨ªa?
Respuesta. Si esa pregunta se le hace a los meteor¨®logos, dicen que no la pueden contestar, que como m¨¢ximo pueden hablar de una semana e incluso en el horizonte de una semana hay muchas dudas. Tambi¨¦n hemos hablado con gente que hace prognosis. Hay gente que hace prognosis para la NASA, gente a la que nos hemos dirigido que hace c¨¢lculos y correlaciones que dan indicios y, por tanto, dan cierta fiabilidad a sus predicciones. Hicimos una investigaci¨®n hace cosa de un mes m¨¢s o menos a trav¨¦s del Instituto de Meteorolog¨ªa de Catalu?a. Nos dijeron que hab¨ªa una especie de pantano, o sea, que no hay nada, ning¨²n indicio en una amplia zona del Mediterr¨¢neo en la que estamos incluidos. Continuamente nos est¨¢n diciendo que puede ser que acabe lloviendo y, de hecho, en los ¨²ltimos d¨ªas, las lluvias que hemos recibido hacen mantener los embalses en los mismos niveles que tres d¨ªas antes del decreto de sequ¨ªa. Pero ?cu¨¢nto durar¨¢ la sequ¨ªa? No lo sabemos. Ojal¨¢ lo pudi¨¦ramos decir. Probablemente, si lo supi¨¦ramos todos levantar¨ªamos el pie del freno.
"En los pueblos peque?os y medianos es donde hay m¨¢s consumo de agua, donde la ineficiencia es mayor en las redes y los precios son m¨¢s bajos"
"El turista hace un consumo, digamos, compulsivo de agua"
"Un acu¨ªfero como el del Llobregat, con una capacidad de 60 millones de metros c¨²bicos, es estrat¨¦gico"
"De alguna manera deber¨ªamos empezar a pensar que tambi¨¦n tendr¨ªamos que educar al turismo en cuanto al consumo de agua"
P. ?Est¨¢n ustedes en condiciones de garantizar que el suministro llegar¨¢ a septiembre?
R. S¨ª, podemos decir que razonablemente s¨ª. Los t¨¦cnicos no solemos decir una cosa absolutamente segura porque la seguridad absoluta no existe, nunca, pero dentro de lo que es razonable podemos decir casi seguro que no tendremos problemas antes de primeros de octubre si todo el mundo hace las cosas bien y no tenemos ning¨²n susto. La zona central de Catalu?a, el ¨¢mbito del Llobregat, es un ¨¢mbito con una complejidad estructural o infraestructural, porque es muy vulnerable. En el Ter, todo pasa por un solo tubo, un tubo que tiene m¨¢s de 40 a?os. Por eso, tanto si hay agua como si no, si hay sequ¨ªa como si no, es un elemento de riesgo y por eso hacemos otro.
P. ?Qu¨¦ es lo que puede hacerse mal?
R. Hay dos elementos: el consumo y la contaminaci¨®n, que incluir¨ªa los accidentes. Los comportamientos de usuarios finales, b¨¢sicamente dom¨¦sticos e industriales, a los que hemos hecho un llamamiento al respecto. Todav¨ªa no se ha notado, pero hay muchas cosas que son estacionales y es muy dif¨ªcil a no ser que tengas una estad¨ªstica muy, muy fina, es muy dif¨ªcil. Por otro lado, tambi¨¦n somos conscientes de que en los ¨¢mbitos urbanos centrales (los de m¨¢s consumo) tenemos una cierta inelasticidad del ahorro. En este sector se consumen 130 litros por persona y d¨ªa, y esto es importante.
P. Eso en el ¨¢rea metropolitana, pero ?en los pueblos?
R. En otros sitios tenemos menos contabilidad, es la verdad. ?D¨®nde hay m¨¢s consumo de agua per c¨¢pita en Catalu?a? En los pueblos peque?os y medianos. Es donde hay mayor ineficiencia en las redes y los precios son m¨¢s bajos. Hay una clara correlaci¨®n entre tres variables: consumo per c¨¢pita, ineficiencia de la red y bajo precio, a veces incluso sin tarifa. Hay algunos pueblecitos sin tarifa. Por el contrario, tenemos este ¨¢mbito, que en t¨¦rminos estad¨ªsticos es responsable. Y despu¨¦s est¨¢ todo lo que nos estirar¨¢n de m¨¢s las zonas tur¨ªsticas. Estas zonas nos preocupan.P. ?Puede haber restricciones en las zonas tur¨ªsticas?
R. Por supuesto que puede llegar a haberlas, por falta de recursos, pero para hacer esto desde un punto de vista legal, la Agencia Catalana del Agua tiene que llevarlo a cabo en virtud de un decreto espec¨ªfico de emergencia. O bien se puede trasladar a los municipios y ¨¦stos decidirlo en virtud de que objetivamente tengan un problema.
P. ?Y en qu¨¦ zonas tur¨ªsticas?
R. Las afectadas m¨¢s directamente ser¨ªan todas las de la costa, tanto la Brava comola Dorada. Estamos ante un fen¨®meno delicado. Por un lado, las competencias de distribuci¨®n del agua son municipales. Y son los municipios los que deber¨ªan dictar normas, pero muchas veces est¨¢n delante de un sector que desborda el ¨¢mbito municipal. Por lo tanto, de alguna manera deber¨ªamos empezar a pensar que tambi¨¦n deber¨ªamos educar al turismo en cuanto a consumos de agua. No puede ser que porque el turismo sea muy importante para nosotros, lo dejemos al margen de cualquier tipo de mensajes de mejora o de cambio de comportamiento.
P. ?Y c¨®mo se puede conseguir?
R. No lo s¨¦, pero hemos advertido (nos lo dicen los ayuntamientos y los periodistas) que el turista hace un consumo, digamos, compulsivo de agua, ya sea porque no le cobran si se ducha tres o cuatro veces o se ba?a, no lo s¨¦. No es que sean del norte o del sur, o que sean de pa¨ªses escandinavos y como aqu¨ª pasan mucho calor se tienen que ba?ar m¨¢s, sino que hay un elemento de ocio: "No estoy en casa; por tanto, no tengo compromiso ni implicaci¨®n".
P. Hay muchos pa¨ªses, con m¨¢s agua, en los que se pide a los turistas un consumo racional.
R. Deber¨ªamos iniciar una aproximaci¨®n al Departamento de Comercio, Consumo y Turismo para intentar conjuntamente realizar alg¨²n tipo de aproximaci¨®n al turista, haciendo que se implique en una realidad que es el pa¨ªs y pidi¨¦ndole un consumo responsable. No se trata de decirle que no se duche. Los turistas que vienen normalmente guardan en su memoria de la cultura de su pa¨ªs ciertos mensajes de contenci¨®n. Si podemos establecer esta vinculaci¨®n, probablemente podemos conseguir otra actitud.
P. La oposici¨®n cree que con el trasvase del R¨®dano los problemas de la sequ¨ªa ser¨ªan menores.
R. En los momentos en los que hay sequ¨ªa es cuando este tipo de afirmaciones pueden tener m¨¢s predicamento, pero hemos programado un conjunto de medidas que paliar¨¢n el problema y supongo que la mayor¨ªa de ellas estar¨¢n listas de aqu¨ª a tres a?os.
P. ?Por ejemplo?
R. Por ejemplo, la desaladora, que es la estelar porque significa un aumento de la no despreciable cifra de 60 millones de metros c¨²bicos netos al a?o. En el ¨¢mbito de Barcelona, en una situaci¨®n normal, por ejemplo la del mes de abril, el consumo industrial y dom¨¦stico es del orden de 30 millones de metros c¨²bicos; eso significa que 60 millones es lo que se consume en dos meses en el ¨¢mbito metropolitano. Hay otras medidas que ayudan, aunque parezcan una tonter¨ªa. En septiembre del a?o pasado estuvimos una semana sin poder utilizar el agua del r¨ªo Llobregat. Estuvimos a punto de tener restricciones en el ¨¢mbito de Barcelona por una raz¨®n supuestamente tonta y es que hab¨ªa demasiada agua. El agua bajaba por el r¨ªo totalmente turbia de barro, arcilla, y su turbiedad era tan grande que era imposible tratarla en las plantas potabilizadoras. Por tanto, la planta de Sant Joan Desp¨ª estuvo parada creo que cinco o seis d¨ªas.
P. Y eso, ?c¨®mo se solventa?
R. Con balsas de decantaci¨®n que permitan bajar el nivel de la turbiedad del agua, de la suspensi¨®n de la turbiedad y faciliten su tratamiento. En conjunto perdimos 30 hect¨®metros. Luego est¨¢ la utilizaci¨®n de aguas del Bes¨°s; esto puede significar otros 15 hect¨®metros m¨¢s, y eso sin hablar de la desaladora del Tordera, que supone 10 hect¨®metros c¨²bicos. No consumiremos m¨¢s agua, pero ponemos m¨¢s agua en el sistema por cuesti¨®n de garant¨ªa. Sequ¨ªa supone que algunas fuentes se neutralizan y disminuye el agua de los embalses. Hay que poder utilizar el agua de los acu¨ªferos. De ah¨ª nuestro reto de utilizar el agua del acu¨ªfero de Llobregat. Un acu¨ªfero como ¨¦ste, con una capacidad de 60 millones de metros c¨²bicos, es estrat¨¦gico. En conjunto, creemos que podemos incrementar la garant¨ªa del agua de esta ¨¢rea en una cantidad muy considerable: alrededor de 145 hect¨®metros c¨²bicos.
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